Sadistica Serendipia [EDITANDO]

4

Hero tomó el cuello de Hendery, acariciándolo y enredando sus fríos  dedos en su pelo mientras seguía el beso haciéndolo más intenso.

Seguido, Hendery bajó su mano a su entrepierna acariciando su miembro por encima de la tela de su pantalón. El beso lo estaba haciendo delirar,estaba encantado con ello. Su mano por supuesto al ser fría estimulaba de una manera considerable la entrepierna del mayor y mientras él se entretenía con su amigo hasta hacerlo entrar en razón. El empezaba a quitarle el molesto pantalón.

Una vez desnudo Hendery hizo lo mismo con el.
Mordiendo su labio al ver su seductor el sin alguna ropa que importunara a probarlo o a tocarlo.

Besó sus labios e hizo que humedeciera dos de sus dedos con su boca... los cuales después hizo resbalar en su cavidad.

Aquel hombre de pálida piel que había intentado meter cierta sustancia para hacerle caer en sus encantos estaba a su merced, sumiso ante el y a su cuerpo, Hero estaría mintiendo si no se estuviera sientiendo caliente, si no lo desea incluso le hierve la sangre de una manera peculiar y diferente a cuando algo te hace exaltar la imaginación y tus partes bajas son las que sufren las consecuencias...

Dos de sus dedos dentro eran suficiente, estaba muy apretado aún asi se sentía algo dilatado, ayudaba con su otra mano a estimular su entrepierna con firmeza y rudeza, Hendery tenía hundida su cabeza en la cama de la habitación y sus jadeos y cortos gemidos eran consumidos por las sábanas mismas, estaban desnudos ambos, pronto el cuerpo del mayor se correría  con el como aceite.

Sus dedos salían y entraban maltratando esa entrada con poca delicadeza, ¿el la necesita? Por supuesto que no... Hero lo considera  una puta de local.

Sacó sus dedos pegando una fuerte nalgada en su trasero.

—eso te gustó... no sé que pensar de usted.— dijo viendo como ya su entrada escurría, Hero lo estaba disfrutando.

—ya veo, si hubiera ingerido de ese trago hubiera estado en verdaderos problemas—. Se colocó detrás de él, como un peligroso león de más tamaño que el y se posicionó arriba de él, como Hendery tenía su pecho pegado a la cama cuando decidió levantarse un poco su espalda topó con el pecho del contrario.

—Quédate quieto... porque aquí no hay a dónde correr pequeño conejo—. dijo a su oreja haciendo que sintiera su sexo escurrirse entre su trasero y cuando estaba dispuesto a pronunciar una palabra su cuerpo lo embistió haciendo que sus palabras regresaran hasta su caja de voz.

—no tienes derecho a mencionar una sola palabra a menos que sea para pedir mas—. Dijo arrebatando una mordida y chupada de su cuello, Hero pudo notar que muy apenas se marcó, ¿acaso no había circulación?  Lo dejó pasar y puso  su cuerpo pequeño contra el, estocando su entrada una y otra vez, haciendo sonar ambas pieles, primero fue suave y rudo al entrar en lo que hacía que se acostumbrara a su tamaño y grosor, después fue más rápido y pudo darse al gusto de hacerlo violento, Hendery volvió a la merced de las sábanas apretandolas como si eso fuera lo que le rescatara de lo que ahora sentía.

Lo estaba llenando de el, su carne se sentía bien alrededor, lo succionaba como si  necesitara tenerle dentro, y lo soltaba añorando su regreso. Hero abrió un poco más las piernas de Hendery  y pegó ciertas palmadas a su trasero escuchando esos lloriqueos y gemidos.

—eres una perra, un pervertido, un sucio...—dijo con desprecio y erotismo. Tomó sus cabellos en las manos y con fuerza, la misma que hizo que las venas de sus brazos sobresalieran lo levantó hasta que su cabeza pudiera quedar a su altura, al menos a su alcance, Hero se agachó y compartieron un beso necesitado mientras que su cuerpo se movía bruscamente y seguido, rápido, agitado... lo estaba haciendo bien. El se sentía bien... tanto que sentía que estaba mal.

La única mano libre jugó rudo con uno de sus botones hasta tenerlo enrojecido y bien erecto tanto como lo que le colgaba en medio de sus piernas.

-Narra Hendery-

Este chico estaba llevando al cielo na Hendery con cada toque.

Hendery se encontraba extasiado que hasta el mismo se desconocía, detesta ser dominado porque siente que están humillando su persona, pero está vez no le importaba nada, solo recibir más y más de su tacto.
Hero lo estaba follando tan bien, sin cuidado y tampoco yo se lo pedía porque, carajo se sentía tan bien.

Su pene ya estaba expulsando algo de líquido blanquecino ese mismo que indicaba que estaba por correrse así que lo tomó en su mano, subió y bajó su mano rápido y duro acompañando esta acción con embestidas se aferró aún más a las sábanas, arqueó su espalda y en ese momento explotó.
Hendery sentía vibraciones por todo su cuerpo lo cual hizo que ese líquido blanco saliera.

Hero al notarlo se detuvo un poco y regulando su respiración se enderezó, lo tomó de la nuca haciendo que sus labios se unieran en un beso.
Seguido de esto con cautela y cuidado lo fue recostando poco a poco quedando yo encima de Hero, todo esto mientras se seguían besando.
Acarició su mejilla y detuvo su mano sintiendo como iba el ritmo cardíaco de Hero, mordió su labio y sintió nuevamente su miembro de Hero en  su interior seguido comenzó a moverse lentamente en círculos viéndolo a los ojos soltando uno que otro jadeo.

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Hero no queria que esa noche acabara con ellos, no queria acabar ahora... queria seguir, El ya se habia corrido después del orgasmo del contrario pues mientras le estaba estocado Hendery succionó tan bien la punta que desprendió todo el liquido que ya había retenido, él lo hizo tan abundante pero Hero tenía todavia una descarga más.

Teniendo al chico arriba de él, saltando y moviéndose... restregando su trasero y paredes en su cuerpo, sonrió ligeramente mientras atacaba sus deliciosos labios y acariciaba sus muslos al sentirlo danzar arriba de él con un cuerpo delirante y una voz muy excitante que daba pequeñitos gemidos y jadeos constantes.
Las manos de Hero se encargaban de tocarlo, jugar con él y su punta rozada, metiendo un dedo pequeño en su orificio escuchando una queja a lo que sonrió, luego metió dos de sus dedos a su boca.

—Eres muy bueno Hendery, y veo que te gusta escuchar eso mismo.. alta vanidad...— sonrío para poner esos dedos humedos sobre su pezón y apretarlo y asi acariciarlo en circulos.

Al escuchar sus palabras Hendery no pudo evitar esbozar una sonrisa.

—La vanidad es uno de mis pecados favoritos...—dijo para después acercarse al oído de Hero. —y estoy casi seguro que el tuyo es la lujuria— mordió levemente el lóbulo de su oreja. —el problema es que si no sabes controlarlo puede llevarte a la perdición...—se movió lentamente metiendo más el miembro de Hero soltando un gemido cerca de su oído.
— aún quieres ir al baño...?— agregó con un toque de arrogancia.

Hero suspiró jadeando por las sensaciones que su cuerpo recibía la manera en que Hendery se puede decir lo tragó por completo lo hizo sentir demasiado bien... por consiguiente lo único que pudo hacer fue dedicarse a golpear su punto dulce y estrellar sus testículos contra su piel, después los movimientos fueron más lentos donde tuvo que salir completo y volver a introducirse entero.

—No hace falta sabiendo que voy a liberarme de todo dentro de ti— dijo y siguieron  con firmeza hasta que sus cuerpos sintieron esa agradable vibración que después le hizo expulsar su semen abuntante en su interior, inundando toda su carnosidad. Los movimientos bajaron y él cayó a la cama junto Hero, jadeó ligeramente por como se sentía y lo besó ligeramente mientras salía de él, después solo se dedicaron  un extenso y cariñoso beso como si se diéran gracias por esta noche.