𝐌𝐈𝐗𝐄𝐃 𝐒𝐈𝐆𝐍𝐀𝐋𝐒 || 𝐓𝐎𝐌 𝐑𝐈𝐃𝐃𝐋𝐄 ✔️ [Español]

⇝The Broomshed

(TW: Agresión)

En una tarde de septiembre, Livia estaba en la cancha de quidditch, sola. La temporada de quidditch se acercaba rápidamente y Livia quería entrenar lo más posible. Normalmente practicaba con Cora, pero la chica había cogido un caso de gripe y estaba descansando en los dormitorios.

Livia voló de vuelta a la tierra cuando notó que las nubes sobre ella se volvían oscuras. Metiendo el bebedero bajo su brazo y su varita en el bolsillo de su bata, Livia se abrió paso hasta el  corbetizo.

Livia dejó su escoba junto a la puerta y colocó el quaffle de nuevo en su estuche. Cuando se dio vuelta, se sorprendió al ver a Tom Riddle detrás de ella. Saltó de sorpresa.

"Lo siento", Tom se rió. "No quise asustarte. Otra vez."

Livia miró al chico. No confiaba en él y en sus repentinas apariciones. "¿Qué estás haciendo aquí?" Preguntó Livia. "No juegas al quidditch."

"Lo sé", dijo Tom. La mitad de su rostro estaba cubierto de sombras, dándole una innegable mirada misteriosa y atractiva. "Sólo quería verte".

Livia levantó una de sus cejas oscuras. "¿Por qué querías verme?"

Tom sonrió con suficiencia. "¿Por qué no querría?"

Livia se quedó sin palabras. Ella miró fijamente a Tom por un momento, devanándose los sesos por algo que decir.

Un súbito trueno hizo que Livia mirara lejos de Tom, y el sonido de la lluvia golpeando el exterior del cobertizo la hizo suspirar.

"Bueno, es una lástima", dijo Tom, moviéndose hacia la pequeña ventana. "Estamos atrapados aquí. Hasta que la lluvia se calme".

Livia se unió a él en la ventana. Llovía a cántaros contra el vidrio, así que Livia temía que la ventana se rompiera.

"Supongo que sí", murmuró Livia. Ella no quería salir bajo esa lluvia torrencial.

Livia podía ver el reflejo de Tom en la ventana. Sus ojos estaban fijos en la lluvia de afuera y sus labios parecían estar pegados en una sonrisa.

Livia se apartó de la ventana y se apoyó en la pared que estaba a su lado. Deseaba desesperadamente que la lluvia amainara rápidamente.

"Así", comenzó Tom, también alejándose de la ventana. "¿Juegas al quidditch?"

Livia se sorprendió ante la pregunta normal de Tom. Rápidamente se puso en guardia otra vez; ¿cómo no sabría Tom que ella jugaba al quidditch? Ella ha estado en su equipo de casa por cuatro años.

"Sí. Soy una cazadora de Ravenclaw", dijo Livia rápidamente.

"He oído que eres bastante buena". Los ojos de Tom se clavaron en los de Livia.

Livia frunció las cejas pero no pudo detener el calor que crecía en sus mejillas. "¿Escuchaste que soy bastante buena? ¿Así que sabías que jugaba al quidditch?"

Tom se rió. "Supongo que lo hice".

"¿Entonces por qué lo preguntaste?"

Livia esperaba que sus preguntas atraparan a Tom, lo pusieran nervioso y confundido como ella. Sin embargo, parecían hacer todo lo contrario.

Tom sonrió con suficiencia. "Sólo intento entablar una conversación, Ángel".

"Por favor, no me llames así", dijo Livia.

Tom la ignoró. "¿Cuánto tiempo llevas en el quidditch otra vez?"

"Cuatro años", respondió Livia.

Tom tarareó. "¿Y quién más es un cazador?¨

"Cora Kent y Brennen O'Brien." Livia notó que Tom se acercaba más a ella. Dio un paso atrás, sólo para que su espalda se golpeara contra la pared de madera.

La sonrisa de Tom se amplió pero continuó hablando. "¿Te gusta el quidditch?"

Livia tragó y escupió un rápido "Sí". Tom no se elevaba sobre ella y ella se sentía totalmente expuesta y vulnerable.

"¿Cuánto?" preguntó Tom, moviendo su cara hacia la de ella.

"Mucho", chirrió Livia. Odiaba lo cerca que estaba Tom de su cara. Estaba congelada, pero sabía que si Tom se acercaba más a sus labios, Livia enloquecería completamente.

Sin embargo, no intentó besar sus labios, lo que alivió a Livia. Su pánico regresó cuando Tom agachó la cabeza y besó su cuello suavemente.

Livia trató de gritar, pero el miedo y la confusión obstruyeron su garganta, haciéndolo imposible. Sus manos buscaron en la pared de atrás, con la esperanza de encontrar algo con que defenderse. Cuando no encontró nada, movió sus manos hacia el pecho de Tom, tratando de empujarlo con fuerza pero no pudo.

"Detente", Livia se las arregló para salir. "Tom..."

Tom chupó con más fuerza la piel del cuello de Livia. Agarró sus manos y las sostuvo contra la pared sobre la cabeza de Livia. Livia sintió la necesidad de llorar.

 "Te quiero, Ángel". Se lamió los labios. "Y sé que tú también me quieres".

"No podrías estar más equivocado, Riddle", le susurró Livia.

Tom sacudió la cabeza para divertirse. "Te pones nerviosa cuando estoy cerca. Te ruborizas cuando te felicito".

Livia miró a Tom con todo el odio que pudo reunir, que era mucho ya que despreciaba al chico que tenía delante. "¡No quiero tener nada que ver contigo!"

Aunque Tom seguía sonriendo, permitió que Livia lo alejara de ella. Livia agarró su escoba y corrió del cobertizo, empapándose tan pronto como salió.

Mientras Livia caminaba hacia el castillo, su ropa se volvió más pesada por segundo, debido a la fuerte lluvia. La lluvia se mezcló con las lágrimas de Livia mientras fluían rápidamente por sus mejillas.