Si Decido Quedarme // Ross Lynch [Editando]

Capitulo 43 "Like a River"

En cuanto Ryan sale del viejo edificio con una sonrisa enorme, corro en su dirección para cargarlo y abrazarlo con fuerza.
Acaricio el cabello de mi hijo mientras el entierra su pequeña nariz en mi cuello.

—Vayamos al auto —murmura Hailey con una pequeña sonrisa, toma mi mano y sin bajar a Ryan de mis brazos comenzamos a caminar.

—¿Por qué las personas siempre nos toman fotos? —pregunta Ryan con una voz suave como la de su madre.

—Tu papi tiene una preciosa voz al igual que todos tus tíos ¿Lo recuerdas? —mi pequeño asiente —bien Ross es un cantante muy talentoso —la rubia ríe bajito —y yo soy una mujer de negocios con demasiados talentos.

—¿Intentas quitarme créditos? —muestro una sonrisa divertida mientras elevo una ceja —y vaya que tiene muchos talentos.

Después de llegar a la Suburban, los tres subimos al auto y Ryan me cuenta de todo lo que me he perdido.

Estoy encerrado en estás cuatro paredes, una pequeña vela en el suelo es lo único que ilumina la habitación. Intento abrir la única puerta que hay pero está cerrada con llave, el pánico junto con la desesperación se apoderan de mi. Sin darme cuenta me encuentro en el suelo junto a la vela en posición fetal cubriendo mis oídos y murmurando cosas sin sentido.

Una dulce voz logra sacarme de mi ataque de ansiedad.

—Hola cariño.

Me pongo de pie y comienzo a buscar la fuente de esa dulce voz pero es inútil ya que todo a mi al rededor sigue estando oscuro.
Siento la suavidad de unos labios sobre mi frente, genial, estoy volviendome loco.

—Traje invitados — ¿Esa es Hailey? —Miralo ¿Acaso no es precioso? —silencio total —es nuestro hijo, Ross.

—Nuestro pequeño —murmuro con una sonrisa en dirección al rubio.

—Se que hemos pasado por muchas cosas —Hailey recarga su cabeza contra mi hombro y toma mi mano para jugar con mis dedos —me conoces mejor que nadie, si me hubieran dicho que en un futuro tendríamos un hijo probablemente me hubiera muerto de risa, pero estamos aquí ahora y no cambiaría nada de lo que pasamos para llegar hasta aquí —murmura —te amo tanto que duele y algunas veces creo que eres irreal, creí que te perdería —sus ojos se cristalizan.

—Te amo, Hails —suspiro —es increíble ver hasta donde hemos llegado. Solo míranos resistiendo, seguimos juntos y fuertes —acaricio su mejilla viéndola —no puedo esperar a envejecer a tu lado, ver a nuestro hijo graduarse —Ryan sonríe en grande —me he perdido de tanto pero lo único que se es que no he dejado de amarte, jamás lo haré, no me imagino a alguien más que no seas tu a mi lado —junto nuestros labios para compartir un dulce beso corto.

El chófer avisa nuestra llegada a la casa, Ryan baja corriendo buscando a Rocky para enseñarle sus nuevos dibujos hechos por el. Tomo la mano de mi prometida y ambos subimos a nuestra habitación.

—Ross....—murmura la rubia en cuanto le doy la espalda para quitarme la camisa, me volteo a verla con el rostro tranquilo después de tirar la camisa en alguna parte de la habitación, una enorme sonrisa se forma en mi cuando Hailey sacude sus pestañas de manera coqueta, da media vuelta para asegurar la puerta.

Pasa a mi lado sin borrar la sonrisa de su rostro.

—Alexa, pon The Hills —murmura con su dulce voz, antes de que pueda darme vuelta cuando la canción se reproduce, Hailey esta pegando su pecho con mi espalda y dejando un camino de besos en mi cuello.

—¿Qué haces? —ladeo el cuello dejándola hacer, suelto un jadeo ahogado cuando presiona sus labios contra mi piel haciéndome una marca.

La rubia ahora esta frente a mi pegando su espalda contra mi pecho y meneando sus caderas de una manera sensual recorriendo su cuerpo con sus manos disfrutando de la música.