Nota 27: Johan

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No sé si te acordarás de la vez que viajamos a Los Ángeles y te encontraste con una de esas cantantes que tanto te gustaban, empezaste a llorar y le pediste una foto. Y después cuando se fue seguiste llorando porque sabías que nunca o muy pocas veces la volverías a verla.

Hoy estaba sentado en una banqueta, afuera de la tienda esa donde se supone que trabajabas. No fue intencional, yo no me di cuenta. Dicen que tu subconsciente siempre te guía a tu hogar.

Tú eres mi hogar, Selene.

Donde sea que tu vayas.

Y espero que así como tú pudiste ver a tu cantante preferida aunque sea una vez, yo te pueda ver a ti para pedirte perdón.

El perdón que te mereces, Cariño.

Y el perdón que me debo y yo.

Para el alma que no tengo [EN PROCESO] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora