𝘜𝘯 𝘝𝘰𝘭𝘵𝘢𝘫𝘦 𝘈𝘭 𝘈𝘮𝘰𝘳 | ᴋᴀᴍɪɴᴀʀɪ ᴅᴇɴᴋɪ

Especial Navidad

-Parte 1-

Las épocas navideñas llegan y con ellas el entusiasmo de los mayores e niños de poder festejar. Observo a través de la ventana como los pequeños copos caen, llenando todo de nieve. Me gusta la navidad pero no es emocionante esta vez, saber que voy a estar sola me entristece

Me he despertado muy temprano y ya no puedo volver a dormir. Me levanto envuelta en mi manta y camino a la cocina dispuesta a desayunar. No tomo más que un simple café con tostadas para terminar de despertarme

Me visto con ropa abrigada y salgo afuera para sentarme en las pequeñas escaleras. Observo como los niños se divierten jugando en la nieve, hasta me dan ganas de jugar a mi también. De repente escucho el tono de llamada de mi celular por lo que lo saco del bolsillo de mi pantalón

Al mirar la pantalla leo el nombre de mi rubio amigo, alías el señor eléctrico. Deslizo el botón de contestar y me llevo el artefacto a la oreja

—¿Holo?

—Buenos días bella durmiente— dice el rubio del otro lado de la línea.

—No estoy muy segura, pero mientras duermo no tengo nada de bella— río nerviosa.

—No digas eso— empieza a reír junto conmigo.

Literalmente ninguna de nuestras charlas tiene sentido, somos como dos pequeños niños ,de dos años, hablando

—Bueno, ¿Que necesitas?

—¡Ah si! ¿Que harás hoy? Me refiero a con quien pasaras navidad y eso.

—Emm...supongo que estar sola— digo algo triste.

—¡Genial!...Eh, digo...eso es muy triste— comienzo a escuchar su voz nerviosa.

—Es algo triste pero estoy bien.

—De hecho, quería preguntarte algo.

Noto como sus palabras salen de manera mucho más inquieta que antes

—Claro, dime— contesto de manera tranquila.

—¿Quieres pasar navidad conmigo?

Me sorprendo bastante al escuchar su pregunta. Esas cuatro palabras me dejaron shockeada en mi lugar. Siento el calor subir a mis mejillas, tiñiendolas de carmín. Como es posible que una simple pregunta por parte del rubio me sonrojara de esta manera

—¿____? Oye, ¿Sigues ahí?

No me había dado cuenta de que dejé de hablar por lo que rápidamente me vuelvo a llevar el celular a la oreja

—Si si, aquí estoy.

—Y...¿Que dices? ¡Si no quieres no hay ningún problema!

—Oye.

—Entiendo que quieras estar sola.

—Kaminari.

Ni siquiera me está dejando contestarle y ya saca respuestas solo

—Claro, ¿quien querría pasar navidad con un idiota como yo?