𝘜𝘯 𝘝𝘰𝘭𝘵𝘢𝘫𝘦 𝘈𝘭 𝘈𝘮𝘰𝘳 | ᴋᴀᴍɪɴᴀʀɪ ᴅᴇɴᴋɪ

Mi caballo

El tiempo se pasa muy rápido cuando te diviertes. La semana había pasado y el último día de mis pasantías llegó. Termino de preparar mi mochila y tomo el maletín con mi traje. Ya lista bajo a la planta baja donde Gang Orca me estaba esperando. Ya abajo lo veo parado junto a la puerta

—Te acompaño a la estación— ofrece con total tranquilidad.

—Bien.

Me ponía triste irme pero también extrañaba a mis compañeros. Durante todo el camino a la estación ninguno de los dos dijo una palabra, era un ambiente algo incómodo. Llegamos y me di cuenta de que solo faltaban 5 minutos para que llegara mi tren

—No esperaba que la semana terminara rápido.

Volteo a ver al héroe

—Yo menos, es divertido estar con usted— le sonrío.

Observo como el tren llega y con firmeza aprieto el tirante de mi mochila

—Gracias por cuidar de mi y por sus enseñanzas.

—No, gracias a ti por venir a mi agencia. Nunca creí que le tomaría tanto cariño a una niña— declara con burla.

—¡Oiga!— ambos reímos.

Lo miro una vez más y hago una reverencia. Me doy vuelta y comienzo a caminar hacia el tren, pero antes de entrar tiro mis pertenencias al suelo. Regreso corriendo hasta el héroe y de un gran salto lo abrazo por el cuello. Él al instante me sujeta para que no me caiga, tardó un poco pero termina correspondiendo

—Espero que volvamos a vernos pronto— susurro aún sin soltarlo.

—Lo mismo digo, vuelve a visitarme cuando quieras.

—Claro.

Nos damos una mirada rápida y me baja. Tomo mi mochila y esta vez sí abordo el tren. Me siento junto a la ventana y lo saludo a través del cristal con una sonrisa. Hice bien en escoger la agencia de Gang Orca, pude aprender y mejorar mis habilidades, además de que fue divertido compartir esta semana con él

Ahora tendrán que ser tres horas más de viaje, horas las cuáles mi trasero y yo las vamos a sufrir

(...)

Luego de ese largo viaje pude llegar a casa y descansar. Mañana había clases lo cuál me deprime mucho pero no importa porque vería a Mina, ya quiero contarle todo lo que aprendí y viceversa

(...)

Es muy temprano y aquí estoy yo, caminando hacia la escuela como si fuera sonámbula. No me detuve a ver si tenía ojeras, creo que parezco el chico peli morado de la clase C. Llego a la academia y camino tranquila por los pasillos hasta llegar a mi aula

Apenas abro la puerta me topo con la espalda de un rubio bien peinado, este se voltea y veo que se trata de la rubia explosiva. Intento con todas mis fuerzas contener la carcajada pero me es casi imposible

—¡¿Y tu de que mierda te ríes?!— me grita en la cara.

—¿Yo?— me apunto con mi dedo índice.

Es divertido hacerlo enojar pero tampoco sin pasarse mucho, aprecio mi vida

—No, mi perro ¡Obvio que tú estúpida!

—De nada...solo que pareces un trapeador recién comprado.

Escucho las carcajadas de Kirishima y Sero, contagiandome al instante

—¡¿Que dijiste maldita extra?!

Antes de que dijera algo más me voy corriendo junto a Mina la cuál me espera con los brazos abiertos. No lo dudo y me lanzo a abrazarla, en tan poco tiempo se volvió mi mejor amiga