Situados en ningún lugar especial, el dolor que se plasma bajo el rostro. La luna que nos alumbra y los labios rotos del calma. Veo vislumbré el recuerdo de alguien, alguien que es especial e inigualable. • Ambos bajo la cópula nocturna, el dolor que mora en el rostro. La luna que nos alumbra y los labios rotos del otro. Siento el pálpito de algo avecinar, sus labios en mi sucumbir. Se ve tenue sobre mi morar, mi cuerpo en él situar.