"¿Cómo llegamos aquí?" El demonio de radio se preguntó mentalmente. Sosteniendo con fuerza la mano de su amada princesa del infierno. Mientras ella estaba empujando. -Solo un poco más mi amor. Trae a nuestro pequeño al mundo - dijo Alastor, al verla presionar con más fuerza ante el aliento de su esposo. -¡Eres un idiota! - dijo Charlie, sosteniendo la mano del pelirrojo con mucha fuerza, casi hasta el punto de romperla. -Solo una vez más su alteza - dijo el médico a cargo del momento. Un último empujón fue suficiente, y un fuerte llanto de bebé invadió la habitación.