En una habitación de la mansión Giglio Nero se podía apreciar a un joven albino que se encontraba llorando en una de las esquinas, todo estaba en completa penumbra hasta que la puerta fue lentamente abierta por una chica de largo cabello verde y ojos azules. -Byakuran-san... -Solo pudo pronunciar su nombre al verlo así de destrozado. -No te preocupes Uni-chan. Su voz salió algo rasposa mientras dejaba de ocultar su rostro en sus rodillas para observar a la recién llegada, ella sintió su pecho contraerse al ver el demacrado rostro del albino. Pálido, con sus labios rotos de tanto morderlos y sus ojos violetas hinchados e irritados por las lágrimas que seguían corriendo por su rostro. -Esto era algo que me merecía. Pero no me voy a rendir, esta vez, lucharé por él de la forma correcta. Una promesa cuya sinceridad solo ella comprendía. "¿Por qué tenía que ser él siempre quién sufría?" *Todos los derechos reservados* *El universo y los personajes de Katekyo Hitman Reborn pertenecen a Akira Amano*