No se supone que debas desear a aquel que te atormenta. Cuando mi hermanastro, Sehun, vino a vivir con nosotros en mi último año de instituto, yo no estaba preparado para lo idiota que podía llegar a ser. Odié que la tomase conmigo solo porque no quería estar aquí. Odiaba que trajese chicos del instituto a su dormitorio. Pero lo que más odiaba era la manera en la que mi cuerpo reaccionaba a él. Al principio pensé que todo lo que tenía eran sus duros y tatuados abdominales y su cara bonita. Entonces las cosas comenzaron a cambiar entre nosotros, y una noche ocurrió. Tan deprisa como había llegado a mi vida, se había ido de vuelta a Shangai. Pasaron años desde la última vez que vi a Sehun. Cuando la tragedia golpeó a nuestra familia, tuve que enfrentarlo de nuevo. Y Dios santo, el adolescente que me volvía loco era ahora un hombre. Tenía el presentimiento de que mi corazón estaba a punto de volver a romperse. • Esta historia es una adaptación. La historia original tiene el mismo nombre.