Sighs Cherry Flavor

Extra #3

- ¡Nos van a matar!

- ¡Todos nuestros maridos son maderos!

- ¡Vamos a calmarnos! - detuvieron el auto en una calle poco transitada y que alejaría a las patrullas - Respiren y controlense que nos pueden oler a dos calles de distan... - bajo del auto y vómito, cuando termino volvió al auto - Me cago en todo acabo de sacar mi puto almuerzo por su culpa.

- Vamos a pensar bien, ya hemos escapado de la poli otras veces.

- Les dije que Las Vegas sería mejor - suspiro cansado.

- Pero ya estamos aquí así que... La mafia sexy vuelve - sonrió divertido.

Los tres se miraron y sonrieron divertidos, era cuatro Omegas en medio del caos...

- Sabes que en cuanto lleguemos a casa, nos van a matar.

- Eso si llegamos a casa, no creo que nos libremos de está.

- Fichados en Canadá no suena mal.

- Veníamos a esquiar ¿cómo acabamos con toda la cabellera tras nuestro culo?

- Velo de está manera, este viaje era para nosotros, regresar al pasado y divertirnos - les sonrió - Esto es volver al pasado.

- Literalmente.

Volvieron a salir de la calle donde estaban, parecia que habian esquivado las patrullas que los perseguian.

- Bueno, al hotel ahora, nos largamos de aqui.

Dejaron el auto un par de calles de el hotel donde se estaban hospedando, se habian calmado, aunque el auto apestaba a los tres Omegas. 

- Deberiamos quemar el auto.

- Vamos a descansar, recuperar fuerzas - se recosto - Estoy agotado.

- Gustabo ¿estas bien?

- Si, solo que no habia sentido tanta adrenalina de estas hace mucho - solto una risita - Fue genial, admito que esto fue mejor que Las Vegas.

- Por cierto ¿como cambiaste nuestros vuelos sin que supieran? Los tres estamos casados con maderos - dijo Segis.

- Mi pico de oro sigue funcionando - sonrio de lado - Aunque, yo estoy casado con el super y eso significa que pronto empezara a ver mis movimientos y si de verdad estoy en Las Vegas.

- Bueno, rogaremos que no lo descubra aun - dijo Horacio - Estas vacaciones las necesitabamos, volver a ser nosotros. Despues de tener cada quien su vida, fue como si quitaran una parte de nosotros.

- Si - dijo Segis - Tenia años que no me divertia asi.

- Ni yo y eso que apenas llevo un año casado - rieron divertidos - Y tambien que yo aun no tengo cachorros como ustedes. Estaba muys eguro que no los dejarian venir sus Alfas.

- Bueno tú tienes tu pico de oro y nosotros el nuestro - sonrio Horacio - ¿Pedimos servicio a la habitacion? Tengo hambre. 

- Si yo tambien, despues de vomitarlo todo - dijo Gustabo - Preparare la tina, quiero algo relajante.

- Yo quiero un masaje, pidamos uno para los tres - dijo Segis.

- Esta bien, yo hago la reservacion - dijo Horacio, justo cuando abrio la puerta se encontro con todo lo que queria evitar hasta llegar a casa - ¿Viktor?

Gustabo casi se cae en la ducha al escuchar eso.

- James - dijo Segis al ver que tambien su Alfa habia venido.

Gustabo no habia falta que saliera ni que viera si su Alfa estaba ahi, lo podia oler y no estaba nada contento.

- Toma tus cosas, te veo abajo en dos minutos - dijo Volkov bastante molesto.