⁽⁽ଘ million to zero ଓ⁾⁾

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⚠️ TW// angst ligero.

10 de febrero de 2020.

Desperté en confusión y con un terrible dolor por todo mi cuerpo. Especialmente en mi rostro.

Los primeros segundos fueron abrumadores.

No podía moverme
No veía
No olía
No oía
No sentía

Lo único que podía percibír era un dolor abrumador que me hacía lagrimear ligeramente.

Pasaron veinte segundos y al fin podía sentir mi cuerpo, notaba que algo me cubría y no, no eran las mantas.

Pasaron treinta segundos y al fin podía ver.
Vi una ventana, era de noche, me preguntaba que hora era ya que no habían relojes ni encontraba mi celular a primera vista.

Estaba en una habitación de hospital pero no había nadie dentro, solo un horrible silencio y mis quejidos.

Entonces me miré. Estaba conectado a un suero y apartando un poco la manta, vi que era lo que me estaba cubriendo, decenas de vendas por todo mi cuerpo.

Empezé a sudar en frío, no recordaba que había pasado antes de despertar y probablemente preferiría no recordarlo.

Visualicé un espejo en una esquina del cuarto de hospital, me costó verlo, ya que tenía una venda cubriendo mi supuestamente marrón ojo, deducía que era una venda.

Me levanté con mucho dolor ya que necesitaba verme, debía verme y me desconecté del suero que me mantenía anestesiado, cosa que no cumplía muy bien su función al parecer ya que la sensación de irritación en mi piel era frustrante, desesperantemente dolorosa y molesta.

Caminé siete pasos hacia el espejo, solo fueron siete pero se sintieron como si fueran un millón.

En cuanto llegué al espejo y me vi, efectivamente tenía un 80 porciento de mi rostro vendado, excepto la boca, la nariz, un ojo y mi cabeza, pero veía algo al lado de las comisuras de mi boca, una especie de costra de un color distinto al de mi piel.

Comencé a arrancar las vendas con lentitud y cuando finalmente pude ver con mis dos ojos, sentí que estaba dentro de una terrible pesadilla.

Caí de bruces mientras observaba con horror mi reflejo mientras me aguantaba las ganas de llorar porque trataba de auroconvencerme de que esto no podía estar sucediendo y que lo que tenía en la mayor parte de mi cara, se iría pronto.

De golpe la puerta se abrió y aunque pude ver la silueta en el espejo me giré.

Luzu, mi exnovio, estaba en la entrada de la habitación, observándome con horror y con las manos en la boca, negando con la cabeza.

Entonces recordé.




(Fin del flashback)

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POV Reborn

Hoy era un martes lluvioso, así que no pude salir a la azotea en el recreo como usualmente hacía, así que me tuve que conformar con esconderme en el aula de música mientras fumaba un cigarro.

Debía esperar hasta el final del día para que me diesen una fotocopia del maldito documento a rellenar porque cierto pelirrojo cabrón me robó la ficha ya rellenada.

Lo peor de todo era que mañana era el último día para entregar el documento.

Reí ligeramente ante aquel recuerdo y di una última calada a mi cigarro antes de apagarlo y dejarlo bajo un pupitre, para que luego le echaran la bronca al dueño de este, ni más ni menos.

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