Jinchuuriki y el ladrón del rayo

Parte 4

Al día siguiente, Bigotes estaba buscando a Annabeth. Ya había buscado en la cabaña de Atenea, el anfiteatro y el bosque, Quirón dijo que podría estar en la casa grande, así que ahí es donde iba el zorro.

"¡Annie!" Gritó, su única respuesta fue que el dios Dionisio se despertaba de su siesta del mediodía, sus ojos parecían tan inyectados en sangre que parecían naturalmente rojos. Le frunció el ceño y luego se volvió a dormir, con los pies en alto.

Entró a la casa grande y finalmente la encontró, estaba sentada al lado de la cama del niño que mató al minotauro. Saltó y aterrizó en su regazo, sacándola de lo que los otros campistas llamaban " la cara pensante".

"¿Ya se despertó?" Preguntó, mirándola a los ojos.

"Sí, miró a su alrededor, vio a Argus, luego se volvió a dormir". Annabeth dijo, "también, no hagas eso, me asustaste".

"Oh, la gran hija de Atenea asustada por mi pequeño". Dijo, sonriéndole, "vamos Annie, tienes más que hacer que verlo dormir, tienes que tomar una lección de historia en veinte minutos. Prepárate, no se despertará pronto".

Como si simplemente demostrara que el zorro estaba equivocado, el chico de la cama se movió, gimiendo mientras recuperaba la conciencia, Annabeth lo miró fijamente, antes de sonreírle a Bigotes.

"Mira, ahora averiguaremos qué está pasando". Annabeth dijo: "Él va a saber".

El zorro suspiró mirando al semidiós que estaba despertando, "no te hagas ilusiones Annie".

Los ojos de Percy se abrieron de golpe y los dos fueron recibidos con orbes verde mar parpadeando para quitar el sueño. Finalmente se centró en Annabeth y su sonrisa se ensanchó. El niño miró su confusión, luego miró al zorro y logró ahogar un "¿Qué?"

Annabeth miró a su alrededor, asegurándose de que Argus no estuviera cerca para escuchar. "¿Qué está pasando? ¿Qué fue robado? ¡Solo tenemos unas pocas semanas!"

"Lo siento", murmuró Percy, sus ojos luchando contra el sueño, "Yo no ..."

Alguien llamó a la puerta, y Annabeth lo alimentó a la fuerza con un poco de ambrosía que rápidamente llenó su boca y haciendo que el pobre niño se pareciera a una ardilla mientras se dormía de nuevo.

"Vaya, qué fascinante conversador es este". Bigotes dijo sarcásticamente, "asegúrese de escribir eso, podría ser una pista".

Annabeth solo suspiró y se volvió hacia su zorro, "Yo solo ... ¿y si él es el indicado?"

"Annie, creo que deberías dejar de esperar a tu caballero de brillante armadura, porque eso es lo que estás haciendo, ¿sabes en qué te convierte eso? La damisela. No eres la damisela, eres una de las personas más fuertes que conozco. . Tu momento llegará, y sé que Chiron dijo que tenías que esperar a algún héroe, sé el héroe de tu propia historia ". Dijo Bigotes.

"Bigotes ... sabes que a veces siento que eres demasiado inteligente". Ella le sonrió. "Entonces, si yo soy la 'damisela' y él es mi 'héroe apuesto con armadura brillante', ¿eso significa que eres el dragón que me mantiene cautivo?"

"Oh, sí, ten cuidado, valiente caballero, yo, el feroz dragón protegerá a la princesa. Tiembla ante mi aterrador poder. RUGIDO". Los dos rieron.

"Oh, ¿entonces soy una princesa ahora?" Annabeth dijo, levantando al zorro y colocándolo sobre su hombro. "Creo que me gusta eso, todos se inclinarán ante la magnífica princesa Annabeth".

"Hmm." Bigotes tararearon, luego mostró una sonrisa salvaje, "bueno, si eres la princesa entonces supongo que deberías lucir el papel".

Annabeth miró con recelo al zorro, "¿en qué estás pensando?"