4|Hemofobia

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Me levante de mi asiento y esquibe los demas bancos buscando la salida. La vista se me nublaba y comenzaba a sudar. Abri la puerta lo mas rapido que pude y corri por el pasillo buscando un espacio libre. Me encontre con la puerta del baño de damas y no dude en entrar.
Rebice todos los cubiculos y no habia nadie.

Abri unos de los grifos y me moje la cara. Que diablos. ¿Porque hoy?. Notaba el cambio, mi piel se tornaba mas pálida, el azul de mis ojos comenzaba a expandirse y mis pupilas se dilataban. Cerré los ojos con fuerza. Intente calmarme. El control es mi salvación, no debo perderlo.

Cerre el grifo y me encerre en un cubiculo. Baje la tapa y me sente apoyando la cabeza en una de mis manos. Con la otra tome el pequeño frasquito que se encontraba en uno de mis bolsillos, y lo obcerve. Talle con mi dedo el simbolo de lunas. Recuerdo las ultimas palabras de mi madre y sonrio. Cuanta razon tenia. Siempre la tubo. Recupere el control, pero la nostaljia me invadio. Como la extrañaba. Siempre la recordaba, sus historias, sus bromas, su espiritu... .

Guardo el frasquito y saco el movil. Deveria llamar a papa y contarle, el debe saber. El reponde al segundo tono.

-¿Serena?¿Que sucede?- dice mi padre, se me escapa una sonrisa al imaginarme su cara de confucion.

-Hola papa, ahora no pasa nada. Queria decirte que hoy no te acompañare al hospital, lo siento.- digo tan rapido que ni yo misma entiendo mis palabras.

-Porque, que sucede?- me debatía entre contarle la verdad y que no confiara en mi para ir a las afueras, o mentirle.

-Adivina, hoy toca proyecto, biología precisamente. Algo sobre las células- De todas formas se enteraría.

-Y...-su tono me pedía que fuese más clara.

-Las células de nuestra sangre papá, tenían microscopios y agujas- dije mientras tragaba con fuerza, mi boca estaba seca.

-Diablos, fue tan malo?-

-Digamos que ahora estoy encerrada en el baño y me esperan con una explicación- la había cagado.

-Quieres que vaya a recogerte? Quieres qué vaya y les explique que tienes mie...-

-Tranquilízate papá, yo me las apañare. Sólo quería pedirte si podías ir ahora, así estarás cuando llegue a casa, si es que me entiendes- dije intentando parecer tranquila, deseaba que toque el último timbre y sólo era mi primera clase.

-No te preocupes hija. Vuelve a clase, luego me cuentas, vale? Adiós -sonaba preocupado, pero me aliviaba su respuesta.

-Adiós- colgué justo en el momento en que abrían la puerta. Un suave perfume a pino penetro mi nariz. Era extraño, pero agradable.

-¿Serena?- era Isabel, sonaba preocupada.

-Estoy aquí- dije al momento que salía del cubiculo. Desvíe la vista hacia el espejo y me encontraba normal. Inmediatamente se acerco a mi.

-Te encuentras bien? Me a costado pero he convencido a Crawford de que me dejara venir a verte- me dijo con voz dulce.

-Te lo agradezco. Digamos que el proyecto no era de mi agrado- dije con una media sonrisa.

-Ya veo...- dijo pensativa - Tranquila cualquiera tiene hemofobia-

-¿Disculpa? Yo no le temo a los gays- de donde habrá sacado eso?

Ella sonrió y me dijo:- No amiga, eso es homofobia. Hemofobia es el miedo a la sangre-

Quede pasmada. Mierda. Yo estudio para idiota. Sabía que la escuela no servía un carajo. Si no fuese ella ya estaría muerta.

-Que va, era un chiste. Claro que se lo que es.- dije disimuladamente, con una de mis mejores sonrisas.

-Ya claro- dijo dándome un golpe en el hombro. Dio la vuelta y pretendía salir, pero la detuve.

-Espera, me haz llamado "amiga"?- me miro como sí le pareciese extraño que le haya preguntado eso.

-Claro, porque es lo que somos, no es cierto?- Me lo dijo como sí la hubiese ofendido. Genial.

-Si, seguro. Solo es que no he tenido muchas amigas- le dije avergonzada.

-Pues aquí tienes una, no?- dijo señalándoce con sus manos.- Anda vamos, que nos espera una buena- diablos si no...

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Hola chic@s, disculpen el retraso con los capítulos. Se qué no es un buen comienzo para una historia, pero el surf me exige mucho tiempo y término detonada. Sólo quería decirles perdón y gracias por leer.
Tengo una gran historia en mente, tiene muchas sorpresas! Ademas es algo totalmente nuevo, les juró que no lo he visto en otro lado y eso me emociona.

Les mando un abrazo...

AR•

Híbrida: ReclamadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora