De compras

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Cómo Black Hat lo había mencionado, el sexo se volvió rutina diaria aunque para la tranquilidad de la empresa el villano no se excedía mucho, pues Flug tenía trabajo que hacer, aunque eso no lo detiene de intimar en el laboratorio o en la oficina cuando estaban haciendo papeleo o checando los artículos para el catálogo de la empresa, incluso el villano tomo una de las numerosas habitaciones de la mansión solo para tener intimidad con su científico ya que su alcoba no era un lugar adecuado para eso; Flug estaba muy feliz, ahora la posibilidad de tener una relación amorosa con Black Hat ya no es una simple fantasía, pues su jefe se volvió más considerado, más amable y mucho más atento, parecía otra persona, aunque aún había ciertas cosas que aún eran un problema, por ejemplo, Black Hat aún no podía controlar su mal carácter y termina gritándole por pequeños fallos en algunos proyectos, también la carga de trabajo excesivo, aunque antes podía con ello, ahora con los encuentros con su jefe es demasiado cansado para el rendir de la misma forma que antes.

- ¿Señor...? - menciono Flug abriendo sus ojos para un nuevo día, pero nuevamente se encontraba sólo, después de tener sexo despertaba sin nadie a su lado o veía como su jefe se marchaba con la excusa de tener trabajo pendiente y salía de la habitación sin decir nada más, se volvió un poco frustrante que Black Hat siga haciendo esa clase de cosas, aunque no puede esperar menos de él; lentamente se incorporó y se vistió para empezar el día - Auch...me sigue doliendo, cada vez el jefecito es más brusco - Flug salió de aquella habitación cerrando la puerta con llave, hace días Black Hat le sugirió que se mudase a aquella recamara , pero Flug se negó, pues además de cambiar todas sus cosas tendría que dejar a su adorable experimento sólo, así que se no acepto la propuesta.

Al entrar a la cocina el científico quedó cautivado por un olor agradable, al parecer 505 estaba preparando algo exquisito para el desayuno, cuando noto la numerosa cantidad de frutas y verduras comprendió el motivo del entusiasmo del oso; años atrás su adorado experimento le pidió que le hiciera un huerto secreto, pues todo lo que plantaba en el patio de la mansión de secaba o era destruido por Demencia y Black así que le pidió a su creador que le ayudará a mantener sus preciosas plantas vivas, Flug le hizo un pequeño jardín, modificando la tierra para que sea fértil y construyendo un búnker que evite que Demencia entre e implorándole a su jefe que lo mantenga intacto, así 505 obtuvo su añorado jardín secreto.

- Baw - dijo el adorable osito sirviendo un gran plato de wuaffles con una gran cantidad de frutas y una mermelada recién echa

Flug: Se ve delicioso pachoncito, gracias

505 estaba muy contento de ver a su creador más animado, por alguna razón Flug ya no estaba tan tenso y cansado, el oso pensó que su creador comenzó a hacer algo para alivianar su estrés, como yoga o ejercicios de paz mental, pues en un lapso de tiempo desaparece de su laboratorio o no llega a dormir y es la única forma de explicar ese repentino cambio de humor o eso es lo que 505 deducía. El científico degustaba aquel delicioso desayuno, las frutas en especial las fresas eran deliciosas, agradece que su adorado oso sepa cuidar bien de las plantas; mientras Flug disfrutaba su desayuno Black Hat entro como si nada a la cocina, al parecer el científico no fue el único que captó el dulce aroma de la comida, aunque para el villano es una sensación completamente diferente a lo que Flug siente.

B.H: Que asqueroso aroma

Flug: Bu...buenos días señor

B.H: ¿¡Terminaste los proyectos!?

Flug: Si...ya está todo lo listo, solo...solo falta el empaque

B.H: Bien, saldremos de la mansión en unas horas, termina con eso antes de irnos

Flug: ¿¡Que!? Pero...pero...

Antes de que el científico preguntara el motivo de aquella salida el villano empezó a regañar a 505 por el uso excesivo de azúcar en la comida y el desagradable olor a almendras tostadas, aparentemente Black Hat le disgusta todo a aquello que sea dulce literalmente y metafóricamente hablando, sin prestarle atención Flug continuo comiendo, tal vez sea un simple encuentro con algún cliente, así que no debería preocuparse por ello; con un suspiro profundo tomo una fresa de su plato, pero antes de darle el mordisco completo Black Hat se acercó a Flug, aprovechando que el adorable oso estaba distraído, tomo el mentón del científico acercándolo a él y le arrebato un pedazo de fresa directamente de su boca sin tocar los labios de Flug - Excelente cosecha, aunque no soy fan de las frutas - menciono saboreando aquella fresa dejando al científico completamente avergonzado ante esa acción - Saldremos en cuatro horas, no se demore - dijo el villano saliendo de la cocina.

Sólo el amor lastima asíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora