El chico que se casó con el cielo ✨ YOONMIN/JIMSU ✨

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En los barrios mas bajos del país, y en las casas mas olvidadas, se encontraba JiMin yendo directo a la azotea de la casa, aunque aseguraba que la vista del atardecer debía ser mas hermosa desde lo alto de un edificio, no se quejaba.

Una vez llegó, se acomodó como de costumbre en la orilla del techo y en pose de flor de loto. Entonces comenzó.

— ¿Cómo estas hoy, bello cielo? — Saludo con aire encantador — Amo cuando la noche está por caer, te llenas de rosa, morado, y en lo mas alto es de un azul pálido, tan bonito y estético. Siempre lo haces increíble.

Paro un momento, admirando los colores ya antes dichos, y el como las nubes comenzaban a lucir como algodones de azúcar, surcando todo a su paso. Le fascinaba.

Suspiro afligido.

— Hoy volvieron a molestarme, no fue peor que las otras veces, eso es bueno — Como pocas veces hacia ante el cielo, agacho la mirada con pena —. Ya sabes, esta vez...No me hicieron nada, sólo se burlaron un poco llamándome niña y...Bueno, lo de siempre — Alzó la cabeza, y por un momento olvido lo que estaba diciendo. Sonrió —. Pero no puedo decir que fue un mal día, porque ahí estabas tú, por la ventana en cada clase y a cada segundo, tu azul me da serenidad — Rió bajito—. Ningún día será malo mientras existas, mientras estés esperándome con colores y estrellas cada que lo necesite.

Y se perdió de nuevo en él, en como parecía que las nubes se volvían telarañas para finalmente desaparecer y darle espacio a la oscuridad. Esa que no le hacia sentir tanto temor. Porque en lo alto del cielo parecía hermosa.

— ¿Prometes no abandonarme? — Preguntó de repente — Yo prometo siempre estar aquí si tú lo estás...

La noche cayó, y el cansancio en su cuerpo y mente se volvió aún mas presente, decidió que era hora de irse y se levanto.

— Buenas noches, por mas que quieras estar aquí, mi cuerpo me pide otra cosa, pero quiero que sepas...Qué eres perfecto a cada segundo...Simple e inmensamente, gracias — Musitó lo ultimo y se fue.

Porqué no importa por cuanto JiMin tenga que pasar sí el cielo le regala las ganas de vivir con unos simples colores...