✨ 7 ✨

283 51 4
                                    

El mismo cielo, los mismos colores, los mismos sentimientos, pero esta vez, por una persona diferente.

Esta vez los sentimientos estaban siendo reflejados por un príncipe, que se encontraba mas allá de los ojos mortales. Al lado de la Luna y del Sol. En el jardín de estrellas rodeado por las montañas de nubes. Justo en la orilla del palacio hecho de éstas. Esa orilla en la que si miras hacia abajo, hay metros, kilómetros sin nada. Claro, a menos que llegues a tierra.

Y estaba reprimiendo todos esos sentimientos, todo para su amor, que se encontraba bajo sus pies.

— Siento que ya no podré aguantarlo mi vida — Habló mas para si mismo que para él, aunque realmente no lo escuchaba —. Te estoy dejando sufrir y no puedo hacer nada. Nacimos en tiempos correctos, cuerpos parecidos pero almas completamente diferentes. ¿Dime que hago con eso?

YoonGi estaba realmente afligido. Si bien claramente no podía morir, se sentía tan malditamente muerto y abatido, tan roto como su mitad en la tierra. Y lo único que podía hacer era esperar.

— Me siento tan inútil. Porque siempre sonríes y yo sólo puedo darte las mañanas, tardes y noches que tanto amas, ojalá supieras que todas ellas te pertenecen. Todos las ven pero todas ellas son para ti — Se asomó un poco a la orilla del palacio, deseando poder saltar y llegar a él, si tan solo fuese posible.

Y quedó mirando un tiempo, pidiendo disculpas tanto para si mismo como para él. Disculpas de solo ser él y no hacer un milagro.

— No te preocupes por tu madre, amor, yo me aseguraré de que ella te escuche, de que ella te vea todas las noches, me aseguraré de que brille como tanto lo aseguras, como tanto lo sé, te lo prometo — Respiró, y le dió un momento a su "corazón" —, también te prometo, que cuando salgas de allí, lo anaranjado rojizo de la mañana, las tardes soleadas con nubes de algodón y las noches de oscuridad, sean en tu nombre, te lo prometo amor mio. Si tan sólo supieras que yo fui tuyo desde el momento en el que tu corazón latió para mí.

Limpio rápidamente esa escurridiza lágrima que planeó caer por sus celestiales ojos, no quisiera que lloviera, no con un aura de tristeza, aunque JiMin ya le había dicho que amaba la lluvia, esta vez quería darle unos colores mas alegres. Para después, poner la noche brillante, con la nueva estrella que se aseguraría de eso.

Porque YoonGi, príncipe del cielo, se enamoro del chico que le amaba como ningún otro en toda su existencia, el que le contó sus secretos como ningún otro lo había hecho. Se enamoro de un humano, que tenia el mismo corazón que él. 

El chico que se casó con el cielo ✨ YOONMIN/JIMSU ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora