Stay With Me | J.Jungkook

Capítulo. 5.

Me quedé temblando sobre la cama en cuanto Jungkook salió de mi habitación... ¿qué demonios había pasado? ....cuando lo sentí tan cerca de mi todo mi interior dio un vuelco, mi corazón comenzó a palpitar desenfrenadamente contra mi pecho y un estremecimiento me recorrió desde la punta de los pies erizando todos los bellos de mi cuerpo hasta llegar a mi rostro y ruborizarme, no me gustaba que su presencia causara esas sensaciones dentro de mí.

Trate de calmar mi respiración cuando el episodio del lago se hizo presente en mi cabeza, mis ojos se humedecieron y dos pequeñas lagrimas recorrieron mis mejillas, las sequé al instante y me puse de pie, fui hasta el espejo del tocador y miré mi rostro, estaba fatal, suspiré y me dirigí a tomar una ducha. El miedo aún estaba instalado en mi cuerpo, vi mi vida entera pasar delante de mis ojos, si no hubiera sido por él yo... ¡Dios! ahora tenía que agradecerle algo a aquel estúpido, bufé y terminé mi ducha, al salir me coloqué mi piyama y me acosté en la cama. La imagen de su rostro cerca del mío volvió a aparecer...sacudí la cabeza tratando de apartar esos pensamientos, pero no se iban, al contrario, se volvían mas nítidos haciendo que el latido de mi corazón se volviera irregular. De repente la puerta de mi cuarto fue golpeada varias veces, me senté sobre la cama y ordené que pasara.

− Hola cariño, ¿cómo estuvo el paseo? − mi madre había entrado con una sonrisa de oreja a oreja. Tal parece que adora creer que el cretino y yo nos podamos llevar bien... ¿pues sabes que mamá?, estás muy equivocada...

− Intenso − no encontré mejor descripción para lo que había sido mi día con el idiota de mi hermanastro.

− Me alegra saberlo cariño − se acercó a mí y planto un beso en mi frente − Hani.

Fruncí el ceño al escucharla decir mi nombre de esa manera...de seguro quería algo.

− Mañana vamos a tener una cena familiar − soltó todo aquello tan tranquila, en serio me estaba matando seguirle el juego de la familia feliz.

− No quiero ir, no tengo deseo − me dejé caer sobre la cama.

Mi madre resopló y se sentó a mi lado.

− Escucha Hani, sé que es difícil para ti todo esto por lo que estás pasando, pero por favor, dale una oportunidad a esta nueva vida que tenemos, sé que te va a gustar.

Bufé.

− ¿Gustar?, ¿en serio mamá?, la odio como no tienes idea, a ella y a todas las personas que la conforman.

El rostro de mi madre se volvió serio, se paró de la cama y fue rumbo hacia la puerta.

− Mañana a las seis en punto te quiero vestida y bien arreglada − se giró hasta mirarme fijamente − Y no es una petición Hani, es una orden, así que espero la obedezcas.

Cerró la puerta y me tapé la cara con la almohada, grité fuerte tratando de desahogarme un poco. En este momento odiaba a todo el mundo, a mi madre por haberse casado con ese tipo, a él por no haber sabido criar al insoportable de su hijo y a mí por no tener las agallas de largarme de la casa, podía solo escapar y perderme bien lejos de aquí donde nadie me encontrara...no sería mala idea.

Me giré sobre la cama quedando de lado, debería dormir, estaba muy exhausta. No supe en qué momento se me cerraron los ojos cayendo en un profundo sueño, hasta que esos recuerdos de mi niñez volvieron. Veía una vez más como mi padrastro golpeaba a mi mamá una y otra vez al igual que a mi hermano y a mí, dejándome completamente adolorida, veía sangre, escuchaba disparos y el rostro de ese desgraciado sonriendo maliciosamente cuando tocaba mi pequeño cuerpo...di un brinco en la cama exasperada...estaba teniendo esas pesadillas nuevamente, me pasé las manos por la cara y sentí la humedad de mis lágrimas...había llorado dormida...me levanté y salí rumbo a la cocina.