¡Papa malo! //KookMin//

-6- Pesadillas.

13/12/2020

11:00pm//Corea del Sur(Seul)// Casa de los Jeon.

Un lindo rubio se encontraba durmiendo hecho bolita en su cama, ¿Su marido? No esta, simplemente no regresa todavía de su "trabajo" como el lo llama.

¿Que si las cosas mejoraron? Mentiría si dijera que si, pues el lindo pelirubio tiene huellas de la mano de su esposo en su cuello, ¿La razón? Resulta que su esposo le gusta ser brusco en la cama y el rubio término con esa fea marca en su lindo cuello.

El chico debajo de las sábanas comenzó a moverse mientras soltaba pequeños quejidos.

✨ Sueño de Jimin✨

La familia Park se encontraba en la mesa almorzando, Park Shinhye estaba sirviendo la comida para su esposo y su bello hijo, lamentablemente tropezó y mancho el caro traje de su esposo con la sopa que había preparado.

Mamá— dijo ella rubio aún cuando nadie le escuchaba.

— Lo siento — Se disculpo haciendo una reverencia al Señor Park —

— ¡No sirves para nada! — Grito el señor Park mientras se levantaba de su asiento enojado. —

Padre — musitó asustado — No es real, esto no es real — se dijo a si mismo mientras negaba con la cabeza —

Se acerca a la débil mujer con pasos fuertes y le toma fuerte del cabello, mientras un pequeño rubio se levantó de su asiento y se acercó a ellos.

— Padre, no le hagas daño a mamá, no tuvo la culpa se tropezó y... — No termino de hablar, pues el señor Park le golpeó tan duramente en la mejilla que lo mando al suelo —

Para, detente — susurro viendo la escena — ¡Esto no es real! ¡Esto no puede ser real!

— ¡Callate mocoso! — espetó fuerte y claro, mientras Shinhye se removía, el volteo a verla y comenzó. —

Golpe tras golpe, se escuchaban los gritos desgarradores de aquella mujer y también los lloriqueos de aquel niño, pero aún cuánta bulla hicieran, nadie ayudaba, los vecinos preferían hacer la vista gorda y evitar todo el embrollo que era la familia Park.

Solo se quedaban como unos espectadores, justo como el pelirubio, ya que ahora es solo un espectador más.

Para, — el rostro de su padre acercándose con una sonrisa de superioridad aparece en su vista — ¡Aléjate! ¡No te me acerques! — gritaba retrocediendo pero chocó contra la pared — No ¡No!

✨ Fin del sueño ✨

1:35am

— ¡No! — se despertó todo sudado con lágrimas en los ojos mientras respiraba erráticamente, observó la hora en el reloj de mesa y se dio cuenta que ya era muy tarde, observó a su alrededor y al no observar a su esposo se preocupó —

Se levantó y comenzó a buscarlo en toda la casa, pero no lo encontró, hasta que escucho como abrían la puerta de la entrada y se acercó a ver.

Al llegar al lugar lo observó, era su esposo el cual se tambaleaba, se acercó rápidamente para evitar que caiga y un fuerte olor a alcohol llegó a su nariz.

— Kookie ¿Estuviste tomando? — pregunto tontamente, ya que la respuesta estaba más que clara —

— Que te importa — respondió arrastrando las palabra su esposo —

Lo ayudo a sentarse en un sofá de el living.

— Jungkook, no debes llegar a estas horas, tú hija está durmiendo y... — se calló en seco cuando sintió la mano de su esposo en su mejilla, le había golpeado, no tan fuerte pero para JiMin dolía como mil demonios —

— ¡Callate mierda! ¡Me duele la maldita cabeza! — grito con una mueca de fastidió —

— J-Jungkook — dijo en un susurro con una mano en su mejilla — Tú hija está durmiendo, haz silencio — le dijo aún susurrando, mientras lágrimas silenciosas caían por sus hermosos ojos —

— JiMin-Shii — sonrió a la nada el castaño — ven Jiminie — palmeó su regazo mientras seguía sonriendo —

— Y-Yo... — se calló al ver que el rostro de su esposo se tornaba serio, se acercó lentamente y se sentó a horcajadas en su regazo —

— Eso, JiMin-Shii — coloco sus manos en la pequeña cintura del rubio mientras hacía que se mesa en su miembro —

— Jungkook — susurro el rubio con angustia, sentía que algo malo iba a pasar.

El castaño ignoro el hecho de que haya nombrado su nombre y comenzó a moverlo más rápido, el rubio sentía el bulto en su trasero, pero cada vez que lo mecían era de una manera más ruda, tanto que estaba seguro que dejarían marca en su cintura de lo fuerte que le apretaba.

— Jungkook, me duele — volvió a susurrar pero esta vez un poco más audible que la anterior — Jung-... — El azabache se levantó de golpe haciendo caer a Jimin en el suelo —

— ¡Mierda JiMin! Solo estate callado y quiero ¿Bien? — dijo fastidiado —

— P-Pero... — lo interrumpió —

— Pero nada, eres mi esposo y tienes que satisfacer mis necesidades ¿Entendiste? — Pregunto, pero recibió el silencio como respuesta — ¡¿Entendiste?! — espetó más alto y el rubio asintió repetidamente — Así me gusta — Se volvió a acercar —

Y así, Jungkook técnicamente violó a el rubio, ya que, no se dio cuenta de las lágrimas silenciosas que escapaban con cada estocada dura, con cada vez que mordía duramente su cuello, con cada jalada de cabello, con cada vez que el castaño se corría...

Porque JiMin podría aguantar lo que sea por sus seres queridos, y como JungKook lo es, JiMin puede hasta morir por el...

Porque...

El amor puede aveces ser mágico.
Pero la magia puede algunas
Veces ser solo una ilusión