- 7 - Es mío

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13/12/2020

13:30pm/ Corea del Sur (Seul)/ Casa de los Jeon.

El infierno apenas comenzaba, un pequeño rubio estaba acostado entre sus sábanas, con lágrimas en los ojos, los recuerdos lo atormentan, tiene miedo, miedo de el hombre con el que se casó, por suerte no le a visto el rostro en todo el día, después de lo que paso, el castaño se dio una ducha y se fue.

Al rubio le dolía todo el cuerpo, simplemente casi no se podía mover, su hija está en si habitación, el rubio no quería que lo viera así, tan débil, tan inútil.

Escucha unos pasos acercarse a la habitación en la que está, se enrolla más en la sábana, como si esa simple cosa lo vaya a proteger de todo lo que le sucede.

— Papi — Escucha un pequeño susurro, se limpia las lágrimas y pone una sonrisa, sale de su "escondite" y le sonríe a su pequeña —

— ¿Que pasa Dahyunnie? — pregunta acariciando el cabello de la pequeña —

— ¿Porque lloras papi? — pregunta la niña mientras seca las lágrimas que han comenzado a caer de sus lindos ojos —

— No es nada, dime cariño ¿Que sucede? — volvió a preguntar y la niña sonríe en grande —

— El tío Taehyung está en la puerta — grito emocionada —

Y como si un interruptor se hubiera activado, bajo a recibir a su mejor amigo, su alma gemela.

— ¡Tae! — grito eufórico y el pelinegro le sonrió y abrió sus brazos para que le rubio se acerque y lo abracé, y así lo hizo —

— Jiminie, te extrañe tanto — sonrió — ¿Porque no has ido a mi departamento? — pregunto una vez se separaron del abrazo —

— ¿Eh?... P-Pues no eh tenido tiempo — le respondió con voz temblorosa —

— ¡Papi no mientas! — regaño la pequeña y JiMin tuvo que taparle la boca para que no diga de más —

— ¡No miento Dahyunnie! — exclamó — Ve a tu cuarto cariño, el tío Tae y yo tenemos cosas de las que hablar — le dijo, a lo que la niña asintió, se despidió del pelinegro y se fue a su habitación —

— ¿Y bien? — pregunto el pelinegro y el rubio le miró confundido — ¿Me vas a contar la verdad? — se cruzó de brazos y el rubio palideció —

— E-Este... Y-Yo... — fue interrumpido por la puerta siendo abierta —

— ¿Kim? — pregunto el castaño mirando la escena, SU esposo muy cerca de el pelinegro, no le gustaba nada —

— Jeon — respondió el pelinegro serio —

— ¿Que haces en mi casa, Con MI esposo, A solas? — pregunto entre dientes —

— J-Jungkook — susurro JiMin, temiendo hacerlo enojar —

— Deja que hable JiMin — Espetó fuerte y claro —

— No tengo que darte explicaciones, solo vine a la casa de un amigo — Le enfrentó y el castaño se estaba enojando —

— Si claro "amigo" — hizo comillas en esa palabra — Por más que lo desees el es mío — sonrió con superioridad —

— No es un objeto Jeon — le dijo toscamente —

— No, pero es mi esposo y eso lo hace de mí propiedad, y ¿Lo sabes bien no? Yo no comparto.

— Eres un poco hombre — le encaro y el castaño sonríe sin dientes —

— ¿A si? ¿Porque? — ambos ya estaban muy cerca, y la tensión en el aire era horrible —

— Tae, Jungkook, paren — volvió a susurrar completamente en vano ya que lo ignoraron —

— ¿Te diviertes no? — dijo el castaño — Escúchame bien Jeon, porque va a ser la primera y la última vez que te lo digo — Lo miró seriamente — Si vuelvo a ver algún golpe, rasguño o un moretón en alguna parte del cuerpo de JiMin, no me va a importar que estén casados, me lo voy a llevar lejos de ti, ¿Entendiste? — dijo claramente enojado, el castaño lo tomo de su cuello muy bruscamente —

— Ni tu ni nadie, escúchame bien, ni tú ni nadie me va a quitar a mi esposo, ni siquiera el mismo, yo hago con el lo que se me pega la gana, porque es de mi propiedad — Y así lo volvió a soltar bruscamente — Y ahora, vete de mi casa — le dijo y el pelinegro simplemente salió de el hogar de los Jeon — Y ahora, tú y yo vamos a divertirnos un rato.

Si alguien te hace sentir más
Miserable de lo que te hace feliz,
No importa cuanto lo ames,
Debes dejarlo ir.


¡Papa malo! //KookMin//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora