Mi Bailarina Favorita -Zabdiel De Jesús Y Tu-

Capitulo 88

Me desperté tan tranquila, tan relajada, tan feliz, la luz del día hizo que me despertara pero se que hoy va a ser un gran día, hoy es la premiacion, voy a bailar con los chicos en el escenario, al parecer hoy también Zabdiel me pedirá que sea su novia, hoy va a ser un día de locos pero estoy segura que va a ser un día hermoso.

-buenos días mi princesa- me dijo Zabdiel en cuando él también se despertó.

-buenos días mi amor- dije sonriendo.

Me subí sobre el, puse mis piernas a los lados de sus caderas y lo miré a los ojos sonriendo.

-alguien se despertó de buen humor hoy- dijo riendo.

-hoy va a ser un gran día, lo sé- dije sonriendo.

-pero para comenzar este buen día me tienes que dar un beso de los buenos días- me dijo y junté nuestros labios.

Mientras nos besamos él puso sus manos en mis piernas, me jalo un poco y pude sentir algo por ahí abajo, para seguirle el juego comencé a mover mis caderas hasta que él soltó un gemido.

-segura? Aquí y ahora?- me dijo, tiene la voz más ronca, clara señal de que en realidad está exitado.

-segura- le dije lento muy cerca de su oído y mordí el lóbulo de su oreja haciéndolo gemir.

-ven aquí- me dijo y me pego más a su cuerpo.

A partir de aquí las palabras van a sobrar.

Bajo hasta el borde de mi top y comenzó a subirlo hasta quitármela dejando mis pechos a la vista, el beso mi cuello y pude sentir su pecho desnudo contra el mío, sentí escalofríos al sentir su piel contra la mía, el acaricia mis pechos mientras continúa besándome con deseo y pasión.

Esto se siente muy pero muy bien, que mejor manera de comenzar el día.

Solo se separó de mi para quitarme el short, me dejo nada más en bragas, él se quitó él pans y me miro con una sonrisa.

Se acerca a mi rostro con una sonrisa y empieza a repartir besos por todo mi rostros, baja a mi cuellos, deja pequeñas mordidas haciéndome gemir, cierro mis ojos disfrutando de cada caricia y cada beso.

Con una sonrisa como pude comencé a mover mi cuerpo de arriba hacia abajo rozando mi pelvis contra su miembro, el mordisqueo mi labio inferior logrando así que yo jadee contra su boca.

Recorrió mi cuello con su lengua hasta llegar a mis pechos, tomó uno y lo llevo a su boca, con su mano libre comenzó a jugar con el otro, eso hizo que yo suelte un gemido, comenzó a succionar con fuerza haciendo que gima más.

Pone una de sus manos en mi vientre, con su dedo índice va trazando una línea por mis bragas, movió el dedo sobre la tela mojada, cerré mis ojos sintiendo un extraño cosquilleo en mi vientre, corrió hacia un lado la tela que cubría mi feminidad y metió uno de sus dedos.

En cuanto sentí su dedo adentro sentí una sensación entraña pero me gusta, arquee un poco mi espalda hacia arriba y apreté los puños contra las cobijas.

Metió otro dedo y comenzó a moverlos con rapidez. Me siento en el cielo, estoy tan exitada que siento que voy a explotar.

Apreté con fuerza los puños, lo miré, él tiene una sonrisa maliciosa, no puedo correrme ahora, necesito más que sus dedos, él se detuvo de golpe, mirándome a los ojos llevo sus dedos a su boca y los chupo, ¡mierda! Ahora si este hombre logró volverme loca.

Ya desesperado se deshizo de besotes última prenda, cuando se quitó el bóxer liberó su miembro el cual masajeo un poco.

Abrió mis piernas y llevo su cara a mi feminidad, con su lengua comenzó a hacer movimiento en círculos sobre mi clitoris, solté un gemido más fuerte cuando sentí que succionó un poco, abrazo mis piernas para que no las cierre y continuó con su trabajo, me siento en el cielo, continuo jugando con su lengua hasta que logró que me corra, arquee la espalda con fuerza y solté un gemido más alto, puse mis manos sobre su cabeza y lo empujé para que continúe pero no lo hizo así.