Mi Bailarina Favorita -Zabdiel De Jesús Y Tu-

-Capitulo 37

Respirando su aroma el que tanto amo me quede sobre el, puse una de mis piernas en medio de las de él y con una de mis manos comencé a hacer pequeños garabatos en su pecho.

El volvió rodear mi cintura con sus fuertes brazos y me dio un beso en la frente.

-no quiero que esto acabe jamás- dijo con voz ronca, se está quedando dormido.

-ni mucho menos yo- dijo muy bajito casi en un susurro -duerme- dije y levanté un poco mi cabeza -duerme, yo no me iré- dije de nuevo y el sonrío de nuevo.

El solo negó y me miró sonriendo, le sonreí y comencé a rascar su cabeza para relajarlo y hacer que se duerma, no me quite de encima de el, comencé a tararear muy despacio la melodía de una canción, el cerro los ojos y aflojó el agarre que tenia, seguí hasta que su respiración fue lenta, no me moví de donde estoy, volví a apoyar mi cabeza en su pecho, puse mi mano en su hombro y apoye mi brazo sobre su pecho, sentir su respiración y su perfume me ayudó a dormir más rápido.

A la mañana siguiente...

Me desperté por la luz del sol que entra por mi ventana, me moví despacio para no despertar a Zabdiel pero para mi sorpresa el ya esta despierto mirándome detenidamente, si estoy sobre el.

-buenos días- dije volviendo a poner mi cabeza en su pecho.

-buenos días bella durmiente- dijo el acariciando mi cabello -qué tal dormiste princesa-

-dormí bien y tu?- dije tratando de quitarme de arriba de el, en mi pierna siento su gloria mañanera.

-siempre duermo bien si estás conmigo- dijo sin dejarme bajar.

Mi teléfono comenzó a sonar, el me lo paso y mire la pantalla "mamita" se distingue en la pantalla.

-no vayas a hacer ruido, es mi mamá- le dije mostrándole la pantalla.

-Tu tranquila- dijo el.

-hola mami- dije.

-Hola hija, cómo estás? No me habías llamado-

-estoy bien y tu? No te había llamado por que no estamos en la casa, salimos de la ciudad a una cabaña que tienen los chicos-

-tienes tu propia habitación en ambos lugares?-

-si-

-hay mi niña, estás sola no?-

-si mami, estoy sola- ambos hicimos una cara graciosa y reímos sin hacer ningún ruido.

-te extraño mucho, la casa se siente sola sin tu presencia- dijo triste.

-pronto podré irte a visitar, no sé cuándo pero iré a verte unos días si?- dije.

-te dejo mi niña te amo, solo quería escuchar tu voz antes de irme a trabajar-

-te amo mamita, hablamos otro día- dije y colgué -ahora tu y yo nos tenemos que levantar así que permiso-dije volviendo a tratar de levantarme.

-no- dijo el abrazándome con más fuerza.

-amor por favor- dije.

Mi teléfono se encendió una notificación de Christopher, la abrí y vi una foto de ahora en la mañana de Zab y yo dormidos justo en la posición en la que estamos ahora, la cobija a la altura de mi cadera, Zab abrazándome por la cintura y yo abrazándolo a él justo en la posición en la que me quede dormida, ambos con una pequeña sonrisa en nuestro rostro, mire a Zabdiel quien también esta viendo la foto, mire lo que decía "que linda escena me encontré ahora en la mañana que estaba por despertarlos, espero hayan disfrutado, desayunen les dejamos fruta, una taza de chocolate caliente y un sándwich, para cada uno, disfruten tórtolos pdt: estamos en el río" nos reímos y deje el teléfono a un lado y mire a Zab otra vez.

-necesito un besito- dijo el haciendo un puchero.

-ven acá bebecito hermoso- dije y puse mis manos en sus mejillas y lo besé.

Cuando quise separarme el me pego más a su cuerpo para no separarnos, puse bien mis piernas a los costados de sus caderas y el puso sus manos en mis caderas, me empujó y me apoyó sobre la cama dejándome sin la cobija, nos separamos y nos miramos a los ojos, se puso sobre mi dejando mis piernas a los lados de las de el y me volvió a besar, rodeé con mis brazos sus cuello, y él comenzó a pasar una de sus manos sobre mi abdomen acariciando mientras que la otra la tiene apoyada a un lado de mi para no dejar caer todo su peso sobre mi, cuando nos quedamos sin aire nos separamos y nos miramos, pase mis manos sobre su pecho desnudo mordiéndome el labio inferior mientras lo miro directamente a los ojos cosa que por lo que veo lo volvió loco.

-te amo- unas simples palabras que me derritieron el corazón.

-te amo- dije y jale su cabello para volverlo a besar con mucha pasión y amor, cuando nos separamos mordí su labio sin dejar de mirarlo a los ojos.

-si no queremos que esto pase a más es necesario levantarnos ya, así que preciosa, arriba- dijo quitándose de encima de mi a lo que hice un sonido en forma de protesta.

-voy a darme un baño rápido, te veo abajo para desayunar?- dije mientras me pongo las pantuflas.

-báñate, yo voy a subir nuestro desayuno para poder comer juntos aquí- dijo él parándose, hasta que lo vi parado caí en cuenta que estaba en bóxer, ignoré eso, tomé mi teléfono, mi toalla, mi ropa interior y me metí al baño.

Puse música y encendí la regadera, me mire al espejo y me lave la cara, me lave los dientes y arregle el moño del cabello, me puse la gorra de baño y entré a bañarme, me bañe lo más rápido que pude, salí me puse la toalla y camine al espejo, me mire y me quite la gorra de baño y el moño, me desenrede el cabello y me hice dos trenzas, me puse mi ropa interior y tomé la ropa sucia y mi teléfono, salí y vi a Zab en su teléfono esperándome para comer, deje mi ropa sucia en una pequeña bolsa y sin hacer mucho ruido tomé un vestido negro con rayas blancas pegado al cuerpo, me puse mis all stars rojos con cintas de la bandera lgbt, me quite la toalla y me puse el vestido y camine a la cama con mi teléfono y los zapatos en la mano, deje caer los zapatos al piso y me senté junto a él en la cama.

-hora de comer- dije feliz tomando un sándwich y dándole una mordida.

-bueno, ahora se que para tenerte feliz todo el tiempo tengo que darte comida- dijo el riéndose tomando un plato con fruta.

-dame comida y mi estado de ánimo cambia en un segundo- dije comiendo.

-creo que eres hermana perdida de Vélez- dijo el riéndose.

-ambos compartimos un amor hacia la comida- dije tranquila.

-me acabo de dar cuenta de algo muy importante y que creí imposible, contigo si puedo compartir mi comida- dijo el tomando una de mis manos.

-no puedo con lo lindo que eres, eres como el hombre perfecto- dije dándole un beso en la mejilla.

-para ti siempre voy a tener mi mejor lado, me hace feliz verte sonreír- dijo el.

Luego de eso simplemente nos quedamos callados, no es un silencio incómodo, terminamos de desayunar tranquilos y el se metió a bañar, me puse mis pantuflas y baje a lavar y guardar los platos a la canasta, encontré la maleta abierta en la sala así que corrí a por mi ropa y la guardé, deje incluso hasta las pantuflas y subí sin zapatos a la habitación, me senté en la orilla de la cama y escuché como Zab canta en la ducha, me reí un poco y justo él salió del baño en bóxer como si nada, me puse mis all stars rojos de botin y me los amarré súper bien, me puse un poco de desodorante y perfume de Zab y me puse el collar de bailarina que usé cuando conocí a los chicos, me maquillé muy natural y tomé mi libro, mis audífonos y mi teléfono, rápido ordené la cama mientras Zab se viste.

-estoy listo- dijo ofreciéndome su mano para levantarme.

-entonces vamos a guardar tus cosas en la maleta y a dejar mi mochila junto a eso, para ir a ver a los chicos- dije tomando su mano y levantándome.

-vamos entonces- dijo el tomando mi mochila y su ropa, lo seguí hasta la sala y guardo toda su ropa, dejo mi mochila a un lado y salimos de la cabaña, puse música y conecté los audífonos, le di uno a él y el otro para mi, guarde mi teléfono en la bolsa de su short y el me quito el libro, como pudo lo tiro junto al resto de nuestras cosas y tomo mi mano, cruzamos nuestros dedos para comenzar a caminar, de vez en cuando según la canción el me daba alguna vuelta, me daba un beso, me abrazaba, a lo largo del camino.