Mi Bailarina Favorita -Zabdiel De Jesús Y Tu-

-capitulo 84

-ah-ah-ah-ah-ah-ah-ah-ah, yo lo que siento, es que cuando estamos juntos está a favor el universo, todo es tan perfecto- cante mientras Erick toca la guitarra, dormimos unas 4 horas pero despertamos todos y nos pusimos a cantar canciones lentas para tratar de relajarnos otra vez, necesitamos seguir descansando -esto no lleva poco tiempo, esto lleva rato, disfruto tus besos, qué placer es verte a diario presente en mi calendario, es que me gusta tu cuerpo cuando con gana' en la boca me miras y es que me encantan los besos con que me levantas todos los días y es que soy fan de tu cuerpo cuando con gana' en la boca me miras y es que me encantan los besos con que me levantas todos los días y es que solo me fijé en ti desde que te vi, quiero viajar contigo hasta París, es que no existe pasaporte para quererte y esos besos que me das yo quiero devolverte, ir paseando juntos por la ciudad, todo tan natural- le cante a Zabdiel quien me mira a los ojos -qué fácil tú me sube' la temperatura, mi amor, si estoy contigo, todo sale mejor, esto no lleva poco tiempo, esto lleva rato, disfruto tus besos, qué placer es verte a diario, presente en mi calendario y es que me gusta tu cuerpo cuando con gana' en la boca me miras y es que me encantan los besos con que me levantas todos los días y es que soy fan de tu cuerpo cuando con gana' en la boca me miras y es que me encantan los besos con que me levantas todos los días, qué placer tenerte, quiero amanecer siempre en tu mente y también presente, que cada noche sea diferente, un gran amor, eso dice la gente, ir paseando juntos por la ciudad, todo tan natural qué fácil tú me sube' la temperatura, mi amor, si estoy contigo, todo sale mejor- ambos sonreímos sin apartar nuestras miradas el uno del otro -esto no lleva poco tiempo, esto lleva rato, disfruto tus besos, qué placer es verte a diario presente en mi calendario y es que me gusta tu cuerpo cuando con gana' en la boca me miras y es que me encantan los besos con que me levantas todos los días y es que soy fan de tu cuerpo cuando con gana' en la boca me miras y es que me encantan los besos con que me levantas todos los días y es que me encantan los besos y es que me encantan los besos y es que me encantan los besos con que me levantas todos los días- terminé de cantar.

-ahora entiendo todo el talento del que nos platicaban- dijo Johan.

-porque no pueden evitar hablar de eso- dije fulminando a mis 4 hermanos y a mi situación amorosa.

-necesitaban saber que además de una gran bailarina cantar hermoso- dijo Zabdiel.

-ya mejor sigamos con otra canción, yo ya tengo sueño- dije.

Zabdiel le dio la guitarra a Erick y me jalo para acostarme sobre su pecho sentada en sus piernas, me tapo con una manta de regalo que encontramos envuelta entre mis cosas, fue el único que no abrimos al momento porque ni siquiera lo vimos.

Me acurruqué, pase el brazo que queda sobre su pecho atrás de su espalda, la otra la puse sobre mi pecho, me tapo bien hasta los hombros, me acomode bien, Joel me quito los zapatos y mientras todos tranquilos toman la guitarra y tararean una canción me quedé profundamente dormida.

Al paso de un rato escuché que todos se callaron, se acomodaron de nuevo y se volvieron a dormir, Zabdiel solo me acomodo mejor y se durmió.

Quizá unas 3 horas después sentí como Zabdiel se despertó, me destapó un poco el pecho, me acomode mejor y el comenzó a pasar su dedo por mi cara muy despacio, no abrí mis ojos porque el tacto me gusta, además, todo está callado, quizá es el único despierto, todo está oscuro, solo hay una pequeña luz alumbrándonos.

-hasta dormida eres perfecta princesa- dijo muy despacio, los chicos no están cerca, todos se acostaron en los demás asiento así Zab y yo nos quedamos más cómodos -no sabes lo afortunado que me siento de tenerte conmigo mi pequeña niña, gracias por aparecer en nuestras vidas- dijo -llegaste en el momento en el que me estaba dando por vencido, tantas bendiciones tengo al cumplir mis sueños pero necesitaba a esa persona especial que iluminara aún más mi vida, llegaste justamente cuando menos lo esperaba, sé perfectamente que lo nuestro no solo es algo físico, esto es algo que va más allá de lo sentimental, amo esa sonrisa que sale de ti cada vez que hago algo estupido, amo cuando siento que tus ojos no ven nada más que a mi, amo esa sensación de paz cuando tú me hablas o simplemente cuando estamos juntos o te veo dormir junto a mi, me enseñaste que no se necesita tanto tiempo para saber que en realidad se ama a alguien, deje que entraras a mi vida porque sabía que eso me haría feliz, eres esa pequeña que siempre tengo en mi mente, solo sé que te amo y me da igual si fue tan rápido, estar contigo es lo más feliz y hermoso para mi, y sin saber si me escuchas o no aun tengo miles de palabras que me faltan por decirte y expresarte, esto que siento es tan grande y ni las palabras logran decir todo lo que siento por ti, no como a mi me gustaría, te amo tanto mi princesa, no sabes la sensación tan fea que siento cuando no puedo verte, tu haces que te extrañe mucho, me gusta sentir tus pequeñas manos rodeando mi pecho, tu cabeza sobre mi hombro, tus labios en los míos, tu respiración en mi cuello, ver tu cara llena de paz cuando duermes, sentir tu aroma a flores que tanto amo y me vuelve loco, contigo simplemente me saque la lotería, por favor, nunca sueltes mi mano, no estoy listo para dejarte caminar sola por el mundo, no quiero caminar yo solo por el mundo sin el verdadero amor de mi vida, gracias por todo mi princesa, gracias a ti soy el hombre más feliz de este mundo- dijo y me dio un beso en la frente.

Una hora más tarde escuché voces.

-Zab, que Yoandri la cargue, ya tenemos que bajarnos- dijo Erick.

-no quiero dejarla así por así- dijo y me pego más a su pecho.

-a ver, dámela, solo van a ser unas horas, pronto vas a estar con ella- dijo Yoandri tratando de cargarme.

En cuanto sentí las manos de Yoandri en mi espalda abrí los ojos y mire fijamente a Zabdiel.

-la despertamos- dijo Zabdiel y me miró- ya nos tenemos que ir princesa- dijo.

-no quiero pero tienen que- dije y me senté bien sobre sus piernas -te amo, los amo a ustedes 4 también, cuídense, nos vemos en unas horas- dije, le di un beso en los labios a Zabdiel, un beso en la frente a los otros cuatro y fui con ellos hasta la puerta del avión, aun estoy enrollada en la cobija, descalza y toda despeinada -suerte en todo, los voy a extrañar, si pueden me escriben o me llaman- dije y ellos solo asintieron mientras bajan, cuando ya estuvieron en el piso Ricky apareció a lo lejos así que corrí a mi asiento, me puse los zapatos, Yoandri despertó a los demás, me hice un moño un poco más decente, doble la cobija, ordenamos todo, y nos sentamos todos juntos a jugar con un juego de mesa.

-me toca a mi- dijo Alan cuando vio que Johan llevaba su mano hacia el jenga para sacar una pieza.

-es rápido, según yo ya la habías sacado- dijo Johan.

-hola chicos- escuchamos a Ricky -qué hacen?- preguntó.

-hola Ricky- dijeron todos y yo nerviosa no volteé.

-estamos jugando jenga- dijo Alan.

-hola pequeña- dijo Ricky poniéndose a mi lado.

-ammm ho hola Ricky- dije nerviosa.

-no estés nerviosa, ven a darme un abrazo- dijo y abrió los brazos, Yoandri sacó su teléfono y nos apuntó con la cámara.

Me levante de mi asiento y tímida lo abracé, en cuanto el me rodeó me calmé, pude sentir mucha tranquilidad y olvidé por completo los nervios.

Cuando nos separamos sonreí segura y regrese a mi asiento, él se sentó a mi lado en el asiento de al lado y Alan justo tiro la torre.

-qué tal si guardamos eso?- dijo Ricky -me gustaría que comamos un poco de pastel, brindemos por la cumpleañera y así le daré mis regalos- dijo el mirándome.