╰➝[★]Juego: Twisted Wonderland. ╰➝[★]Tipo: Personaje x Lectora. ╰➝[★]AU: Mundo actual. ╰➝[★]Tipo de corto: Escenario.
Disclaimer: Esto es como la continuación del SS del mismo personaje, puede tomarse como una parte canónica o no.
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Las almas gemelas podían manifestarse de cualquier manera y como cualquier persona, dicen que en el otro mundo viven juntas pero una vez que vienen a la tierra tanta es su necesidad de estar acompañadas que aún en vida se encuentran solo para seguir al lado de la otra, no importa cuánto tarden o que tal lejos estén, al final siempre se van a encontrar. Una promesa que nunca podría ser rota.
—Gracias por su compra.
Sonrió la chica entregando la caja donde venía una tarta de vainilla y fresas, una que tanto le había gustado una vez que la probó.
El dueño de la pastelería dónde ella trabajaba la miraba con cariño, nunca se lo dijo, pero era exactamente igual a una chica que solía frecuentar antes su tienda en busca de la misma tarta, aquella chiquilla que siempre traía una sonrisa en el rostro y pareja de uno de sus mejores pasteleros. Inclusive se llamaban igual.
Ambos conversaban tranquilamente pues los clientes no frecuentaban mucho aquél día, ______ descansaba en el mostrador mientras el mayor limpiaba algunas bandejas, la música suave sonaba desde la computadora ambientando el lugar, su vista al frente y abrió los ojos con sorpresa, había un chico alto de lentes mirándola con la misma expresión, sostuvieron las miradas un buen rato antes de que su jefe se acercara a ella al ver que no reaccionaba y al mirar curioso por lo que había dejado impactada a la muchacha se le fue el aliento.
—¿Trey...?
Estaba confundido, se había enterado que Trey había fallecido hace varios años atrás, ¿cómo era que estaba ahora ahí frente a ellos...?
El de ojos dorados reaccionó y entró a la tienda sin saber que decir, tan pronto como había visto a la muchacha su mente se había inundado de recuerdos, estaba él en esa pastelería a pesar de ser la primera vez que la visitaba, había una chica junto a él pero su rostro era borroso y no podía reconocer lo que decía.
—Disculpa... ¿Nos hemos visto antes...?
—También siento que te conozco...
Allí el mayor entendió que era lo que sucedía, su bisabuela le había hablado antes de las almas gemelas y como a pesar de los años y la distancia siempre terminarían encontrándose nuevamente, estaba frente a dos almas gemelas, dos reencarnaciones que en su primera vida no pudieron estar juntas. Se fue de allí dejando solos a los jóvenes.
—Eh... Soy Trey por cierto.
Sonrió amigable el más alto, la chica sintió que sus memorias habían sido desbloqueadas.
