CALIFORNIA · [ hiatus ]

II: Second letter, just a prank?

"Ayer estabas muy nervioso viendo la carta que te dejé, me dio risa porque aún cuando estuviste mirando a todos lados no me viste.

De todas formas, nunca me has prestado especial atención.

Pero, oh mi amor, no estoy enojado, no te preocupes, no podría enojarme con un ser tan bello como tú.

Anhelo el día que me notes y veas como prácticamente me tienes a tu lado, y a tus pies.
Sé todo de tí ¿No me crees? Te contaría todo, pero... Son tantas cosas, al final ambos las sabemos.

Adoras la fotografía, la música en general, especialmente el pop-rock. Algo que en su tiempo me extrañó fue tu gusto por el reguetón, admito que no lo esperaba.
Tienes un hermano, madre, tu padre falleció hace, más precisamente, once años.
Tu cabello no es rubio natural, realmente es castaño oscuro, no sé ni como consigues ese rubio tan claro y precioso que te queda de muerte.

Y podría seguir, pero en vez de una carta, esto va a acabar siendo una biografía tuya.

¿Qué tal si hablamos de un futuro juntos?
Sin Jungkook, claro, porque a él le queda, relativamente poco tiempo junto a ti.

Me gustaría que vivamos tú y yo juntos, en una casita no muy grande, alejados de todos para que nadie que no sea yo pueda contemplar tu belleza.

¿Te gustan los gatos? Podríamos tener dos gatos que desempeñasen un papel de hijos.

Es realmente una gran idea, no puedo esperar a que solo seamos nosotros dos.

- P.J"

Otra vez más, había una carta pegada a su puerta.

Taehyung no entendía nada, esto parecía una broma de mal gusto.

La despegó y la abrió, comenzando a leerla, lo peor de todo es que el chaval que escribía esto realmente aparentaba tomarse en serio la frase de "Tú y yo contra el mundo".

En esta ocasión volvió a mencionar a Jungkook, bien, no es que especialmente le importase que le escribiesen cartas de amor, le incomodaba la mención de su novio más que nada.

Sin más, miró a ambos lados, esta vez alzando la mirada rápidamente a las ventanas abiertas de las casas, sin conseguir ver a nadie que justifique esto.

Entonces, tranquilamente pensando que era una broma y no duraría demasiado, hizo de la carta una bola y la arrojó a la basura más cercana.

Se adentró a su propia casa sin fijarse mucho más en las poco concurridas calles, aún sin notar como un pelinegro apretaba los puños con fuerza, siendo un amargo testigo de la poca importancia que Taehyung daba al asunto.