Capítulo 3: Reinan las situaciones incomodas

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—¿Se puede saber por qué no te has dado una ducha?...— Tory me inspecciona de arriba a abajo con el ceño fruncido, ni siquiera determinó al peque—Me parece increíble, que porque vives cerca de la u no seas responsable. 

—Ay Tory no me regañes ¿sí?—Digo mientras pongo la misma cara de perrito con la que ella me convence siempre. Sonríe y dice

—Si bueno bueno, ya que... —Se detiene un momento— Oye que bien huele— «Lo mismo he dicho»

—Muchas gracias por el cumplido —Menciona Philip antes de que pudiera aclararle que no había sido yo. Inmediatamente ella posa sus ojos en él y descaradamente lo recorre comiéndoselo con la mirada. Vale que ya tiene nuevo objetivo en mira. 

—Vaya, vaya, con que tu eres el que pasara la mayor parte del día con Api— dice seductoramente y ya se que la mirada que me lanza trae consigo reclamo por no haberle dicho.

—Emmm supongo que si—Le responde algo risueño para luego entrar al baño de nuevo. 

Un par de minutos oímos un pequeño grito proveniente del baño y después sale con cara de espanto.

—Eh disculpen pero ¿Qué hacen estos tampones en mi caja de rasuradoras?—Tory y yo reímos al unísono, y la manera en la que los toma nos hace reír mucho más. Disculpándome se los recibo y los lanzo a mi cama, ya veré donde los meto. 

—Oye, pero eso no tiene nada de malo, es natural, no hay porque poner esa cara. —Dice Tory mientras se posa detrás de él haciéndole una especie de masaje en la espalda. Es que es sin vergüenza esta muchacha. 

Seguido entro al baño y me arreglo para ir a la universidad, Tory me espera en el comedor para irnos en su auto.

—Oye peque ¿a qué  hora tienes clase? —Le pregunto.

—Después de medio día. — Asiento con la cabeza y sin más me despido.

—Está bien... adiós peque, perdona por los tampones—Digo cerrando la puerta y el grita.

—Adiós!.

Subo al asiento de copiloto y Tory conduce, mientras vamos de camino me pregunta.

—¿Oye, como vas con la búsqueda de trabajo?—Reviso mi móvil pero nada...

—Ninguna novedad...—Digo llevando las manos a mi rostro recordando que no tuve ni una sola llamada; aunque ya no tiene caso; me voy en un par de días no podría cumplir el contrato.—Solo me queda que alguien rente mi casa y poderme ayudar un poco con el dinero.

—Pero ¿ya pusiste el anuncio en linea?—Niego con la cabeza y le cuento del mural.—Vale que eso nadie lo determina, mira cuanto tiempo llevas tu estudiando y apenas lo notas, tienes que ponerlo en redes sociales y en linea porque a este paso la rentarás en cuatro años. — «Tory tiene razón entre todo lo que tengo en la cabeza se me pasó hacerlo» Solo asiento con la cabeza mirando a la ventanilla y el resto del camino todo es silencio.

***

Mientras almorzamos con algunos compañeros, «amigos de Tory», yo solo observo a mi alrededor, todos estos chicos son tan "normales", solo compiten entre si por quién tiene más dinero, relojes, viajes o chicas lindas a su lado; pero no tienen mayor aspiración a alguna que les viene por el típico discurso que dan los padres. Y las chicas, bueno la mayoría se cree "influencer", todos tienen padres que les suplen todo, posiblemente una relación o algún pretendiente. Se les ve tan felices... y no sé que tan bueno es que yo sea diferente en varios aspectos; tal vez las circunstancias me hicieron diferente o sería igual a ellas... quien sabe. 

DESÁTAME LA RAZÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora