Aquella Noche- Una vida contigo❤️‍🩹

23° CAPÍTULO: Vas a ser padre.

Al cabo de un rato, Hugo apareció por la puerta donde estaba yo ingresada. Entro triste, pero a la vez contento de ver que yo estaba despierta. Hugo traía mi bolso del Pull and Bear, y cuando Samantha y Laura vieron entrar a Hugo por la puerta, empezó la guerra.

- Hombre, a ti te buscábamos campeón. - dijo Samantha dando 3 aplausos lentamente y con una cara de pocos amigos.

- ¿A pasado algo mientras yo no estaba? - Pregunta Hugo indeciso por esa cara de Samantha.

- Mira yo voy a ser más precisa y rápida. Vete y no vuelvas más. Desde que entraste en la vida de Eva, le haces daño. Y no te voy a dejar hablar, porque ahora vas a escuchar. Tu chico, nos a llegado varias cosas que queremos comunicarte- Mientras Laura estaba hablando, bueno gritando, veía como Hugo me miraba con cara de "¿Qué esta pasando?". - Me vas a mirar, además de infiel poca educación tenemos.

- ¿Cómo que infiel? ¿Estás loca verdad? No sabes ni lo que estas diciendo señorita. 

-Te voy a hablar claro, vete con Anaju o Nia, vete con alguien que merezcas esas infidelidades, ya te digo yo que Eva no es la indicada y por si no te quedo todavía claro, vas a ser padre. - Hugo se quedó más blanco que nunca, a Laura se había escapado que estaba embarazada de Hugo, y que además el era el padre.

- Anaju, ¿está embarazada?- preguntó Hugo indeciso.

-¿Qué dices?, esta embarazada Eva. - dijo Samantha incorporándose a la discusión. 

Madre mía, el secreto se reveló como menos me lo estaba esperando. Tío, cuantas veces avise de que mi bebé era mío, y que buscaba el momento más indicado para hablar. Creo que lo he dicho una  y mil veces, pero no. ahí estaban mis amigas Laura y Samantha para hacer le plato más sucio de lo que ya estaba. Miré a Hugo, estaba llorando, estaba mirándome. Estaba destrozado, nuestro juego de los besos, de todo, nuestra felicidad y todo, había acabado en aquel momento. Hugo dejó el bolso en una mesa de la habitación., sin preguntar, sin hablar, salió de la habitación sin hacer ninguna pregunta, sin ni siquiera decirme, estoy contigo. Samantha y Laura se dieron la vuelta para ver como estaba, y yo estaba ahora más que nunca destrozada.

-¿Sabéis que el bebé era mío verdad? -les pregunté con lágrimas en los ojos. -No tenéis derecho a hacer lo que habéis hecho. Yo tendría que haber hablado no vosotras. Pero bueno, lo hecho hecho está, ¿no?.

-Lo siento de verdad, Eva te queremos ayudar siempre y pues lo siento. - dijo Samantha preocupada por mi.

-Eva, sabemos perfectamente que nunca hubieras dado el paso de contarle la verdad. Así que pon una sonrisa bonita, al menos inténtalo va. -Laura era la típica persona que hasta en las malas, te sacaría una sonrisa. En ese momento no tenía ningunas ganas de sonreír. Todo lo que parecía perfecto en un rato era lo peor del mundo.

Pues si, ese día me quedé a dormir en el hospital. Estuve durmiendo bastante bien en lo común de la palabra. Soñé todo el rato con la cara de Hugo cuando se enteró que sería padre. La verdad, no le sobraban motivos pero más motivos tenía de no volverle a hablar en la vida. Me puso los cuernos, haber, no estábamos saliendo pero algo había.