Capítulo II

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Anne

Después del accidente con el agradabe muchacho y que este me alentará un poco diciendo que todo iba a salir bien, fuera cual fuera el motivo por el que estuviera allí, me encontraba nuevamente caminando de un lado a otro como la loca que todos imaginaban que era.

Después de quince minutos más repitiendo la acción, vi a la joven enfermera que me había impedido pasar junto con Maxi.

- Familiares de Maximilian Jonas- habló esta revisando el nombre sobre el tabloncillo que traía en manos.

Automáticamente al oír su nombre me dirigí a la enfermera.

- Yo... yo soy su novia- hablé

- ¿no se encuentran los padres del joven?- cuestionó la enfermera

- Están de viaje y no responden al teléfono- informé

- Bueno, en ese caso,... acompañarme- inquirió dubitativa

La mujer se desvió de las grandes puertas dobles de urgencia y me condujo hasta el elevador, una vez en este índico a dicho artefacto mecánico que nuestro destino era el tercer piso. El corto trallecto entre el elevador y la habitación fue muy silencioso por parte de la enfermera, la no me contó nada sobre el estado de Maxi a pesar de haberle preguntado unas diez veces, su respuesta solo era silencio.

Una vez fuera de la habitación, por el estrecho cristal de la puerta pude ver a Maxi, recostado en un camilla, conectado a unos cuantos aparatos médicos, aún yacía inconsciente o eso parecía.

-¿Aún no ha recuperado la conciencia?- le pregunté a la enfermera sin despegar los ojos de él

- Si, la recupero hace una hora, solo está dormido debido a las medicamentos que le dieron para la fiebre- contestó esta-¿ Señorita... ?

- Rivera- completé por ella

- Señorita Rivera, debe esperar unos minutos aquí al doc...- no termino de hablar ya que fue interrumpida

- No va tener que esperar señorita Rivera, ya estoy aquí- habló un señor mayor vestidos con la característica bata blanca de médico y unos marcados rasgos asiáticos.

- Doctor Han- saludó la enfermera, a lo que el mencionado hizo una pequeña pero notable reverencia- Bueno, yo me retiro- habló y partió rumbo al ascensor

-Señorita Rivera, creo que será mejor que hablemosen mi despacho- hablo el doctor Han mientras miraba a través del cristal que yo lo hacía hace unos momentos- ¿Le parece bien?- ante su pregunta asentí.

El camino hacia el despacho del Doctor Han fue bastante corto. Al llegar a este el Señor Han se sentó detrás de su escritorio he hizo que yo tomara asiento en frente de él.

- Señorita Rivera...- habló pero le interrumpí, ya me empezaba a cansar de el que me llamaran así.

- Anne, solo Anne- dije, a lo que el asintió

- Señori...Anne, ¿ qué parentesco tiene con el jóven Jonas? - cuestino el médico

- Soy su novia

- ¿ Y sus padres? ¿ Saben qué el jóven Jonas termino en urgencias?- prguntó,a su ves apoyaba los codo sobre su escritorio y entrelasaba sus manos

- No, no lo saben- el señor puso mala cara- No lo saben porque están de viaje y no respondieron a mis llamadas- informé ante de que tuviera una idea equivocada

- En ese caso, ¿el jóven, no tiene más familia en la ciudad?- preguntó

- No, el resto de su familia vive en Australia- declaré- ¿Pasa algo con Maxi doctor?

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