Capitulo 5

7K 429 36
                                    

Rainer Ritcher

Estoy como un loco, necesito un baño de agua fría, no puedo sacarme de la cabeza a esa pequeña pelirroja con solo verla y escuchar su voz ya tengo una erección.

Verla con esa blusa que dejaba ver si abdomen, sus senos que son perfectos ni tan grandes ni tan pequeños, solo perfectos, sus ojos que hipnotizan. Solo de recordarla hace que me duela la polla.

Nuestro juego apenas empieza pero no veo la hora de poder hacerla nuestra.
Después de darme placer pensando en ella me quedo dormido, jamás me había sentido así por alguien, que me asusta un poco.

Antes de bajar a desayunar decido ir con mis hermanos para ver qué haremos hoy con esa hermosa pelirroja.

Entro a la recamara de Rayen y me encuentro a mis otros hermanos que ya se encuentran aquí.

-Porque tardaste? – Me dice Rayen con su típico tono de querer saber y ordenar todo.

Aunque la verdad así es el, nos saca de los problemas y por ser el mayor tiene esa facilidad.

-Me quedé dormido – les digo.
-Bueno chicos, creo que nadie se esperaba que nuestra nueva invitará estuviera así de… buena. -Dice Roth
 
-Hermosa – Dice Reign

Es que es maldita mente perfecta, necesitamos actuar, porque no he pensado en otra cosa que no sea desnudarla y hacerla gritar de placer. – Digo un tanto desesperado y molesto.

Mis hermanos me miran y ríen un poco por mi efusiva declaración, que solo logra molestarme mas.

Opino que la vallamos abordando de poco a poco, ella no sabe de nuestros gustos y preferencias, así que hay que irle dando pistas y ver si ella puede ser la elegida. – Dice Roth con la vista al balcón, se le ve pensativo y serio, tal vez planeando todo.

Bueno creo que todos estamos de acuerdo así que bajemos a desayunar y esperemos que todo salga bien con nuestro juego. – Dice Rayen

Nos ponemos de pie y vamos saliendo de la recamara de Rayen y mas delante de nosotros la vemos caminar.

En un vestido negro de tiras cruzadas en la espalda que llega hasta su espalda baja dónde termina con un poco de vuelo que hace ver sus piernas largas y hermosas junto con unas sandalias.

Si de espaldas se ve tan apetecible no puedo esperar para verla de frente y que su tono de vestido resalte sus linda piel pálida y hermosa.

Se escucha un golpe duro en el suelo y nos percatamos que su celular resbaló de sus manos y cayó al suelo.

Se agacha maldita mente lento al suelo sin doblar las piernas y dándonos la mejor de las vistas, su vestido se levanta conforme ella se agacha y vemos esa tanga negra casi inexistente y sus glúteos bien formados y ve un poco de su coño rosado que se asoma poco.

En esos segundos tenemos los cuatro una erección marcada en nuestros pantalones y pude escuchar gruñidos y jadeos de mis hermanos y claro uno mío.

Y nos ve una vez que toma el celular con su mano y se levanta lentamente. Y nos da una sonrisa radiante y un poco sonrojada.

-Buenos días – nos dice, con un tono sensual y arrastrando las palabras que hace que sienta una corriente eléctrica por todo mi cuerpo.

Ella definitivamente quiere matarnos – todos volteamos a ver a Reign dónde solo se le ve una sonrisa en su rostro y sigue caminando al comedor.

Nos tomamos unos minutos más y seguimos caminando un poco más atrás que Reign.

Al llegar a la mesa Jade se encuentra platicando con nuestra madre de lo más natural, como si fueran confidentes desde hace años y no una persona que acaba de llegar a nuestra casa.

Las dos nos voltean a ver uno por uno y después comparten una mirada ellas juntas, que me da mala espina, pero por el momento lo dejo pasar para ver si comentan algo en el transcurso del desayuno.

Nos acomodamos y llegar Vivenka con nuestros desayunos, los va sirviendo y noto como Jade nos mira detenidamente a cada uno como si quisiera estudiar nuestros movimientos.

El desayuno transcurre entre charlas cortas y veo miradas entre mi madre y Jade que me hacen sospechar algo deben de tramar…

-Sr. Ritcher podría hablar un momento con usted… en privado, prometo no tardar – lo dice con su tono suave y hace un pequeño puchero.

Y todos volteamos a mi padre que está un poco sorprendido pero después sonríe.

-Claro cariño, acompáñame a mi despacho por mi maletín ya que después tengo que ir a la oficina y ahí podemos hablar mejor.

Los dos se levantan y caminan juntos por el pasillo.

¿Qué será lo que tendrán que hablar? Y porque no pudo decirlo aquí.
 

Jugar con fuego (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora