El bailarín y el pianista [Mashikyu]

Capítulo 14

Capítulo 14.

-Lo hiciste muy bien ahí adentro hoy, Mashi- Dijo Doyoung con una sonrisa alegre mientras se quitaba las molestas zapatillas sentado en el suelo frente al castaño.

-Gracias, he estado practicando lo más que puedo, incluso en mi casa para no equivocarme.- Respondió Mashiho masajeando sus adoloridos pies, algunas de sus uñas ya estaban de una tonalidad morada y sinceramente sus dedos estaban arqueados de una manera poco saludable, los vendajes que se ponía todos los días no estaban ayudándolo en lo más mínimo a proteger sus pies. Pero todo el dolor que sentía no era nada en comparación con la alegría que sentiría al presentarse como bailarín principal frente a todo el mundo en menos de una semana.

-¿No tendrá eso que ver con que querías que tu sustituto se fuera lejos?- Preguntó el pelirrojo golpeando el costado de su amigo de manera juguetona haciendo que Mashiho rodara los ojos y bufara fastidiado.

-De todos modos ese inútil no sabía poner bien sus pies en punta, era una pobre excusa de bailarín.

Doyoung rio con fuerza, echando su cabeza hacia atrás y limpiando algunas lágrimas imaginarias de su rostro, la verdad es que Mashiho era una persona que no tenía ni un poco de malicia en su cuerpo, pero cuando alguien quería interponerse entre él y su más grande pasión, pues, las cosas no se ponían bonitas.

-Igual no creo que Misuk tuviese verdaderas intenciones de sustituirte, ella constantemente me preguntaba por ti y se veía genuinamente preocupada, pero sabes que Natalie necesitaba a alguien con quien practicar.

-Ni siquiera me la menciones, si ella vuelve a pisarme mientras bailamos juro que voy a asesinarla, no entiendo como se pudo ganar el papel protagónico.

-Alguien está de mal humor hoy.- Canturreó Doyoung de manera burlona mientras aplaudía y a Mashiho le recordó a un niño de cinco años.

Sinceramente, él sabía que no estaba del mejor humor del mundo ese día pero no podía evitarlo, se sentía cansado y todo su cuerpo dolía, sin contar los innumerables mareos que había tenido a lo largo del día, pero su rostro se iluminó cuando observó a una más que conocida figura acercarse a donde estaban ellos.

Junkyu le sonrió con alegría cuando sus ojos conectaron y apresuró un poco su paso para estar frente a Mashiho, se agachó hasta quedar a su altura y depositó un pequeño beso en sus labios antes de levantarse de nuevo y saludar brevemente a Doyoung.

-Hoy no podré ir a visitarte en la noche Mashi, lo siento, pero Jihoon me pidió que lo ayudara a buscar apartamentos para alquilar.- Dijo Junkyu y la sonrisa de Mahshiho decayó e hizo un puchero no estando para nada conforme con eso pero igualmente asintió.

-Está bien Junkyu, entiendo, nos vemos mañana, supongo.- Respondió el menor con una sonrisa forzada que no fue pasada por alto por Doyoung.

-Claro que sí, te iré a buscar mañana a tu casa para que lleguemos juntos aquí.- Prometió dejando un beso en su frente.- Adiós Mashi, adiós Dobby.- Se despidió con un movimiento de manos mientras hacía su camino hacia la salida.

Doyoung lo observó hasta que salió y luego regresó su atención al rostro decaído de su amigo.- De acuerdo, quiero que me expliques porque no me habías dicho que Junkyu y tú ya no están viviendo juntos.

Mashiho se encogió de hombros y empezó a buscar sus cómodas vans negras en su bolso. –No lo consideré importante, eso es todo.

-No me mientas Mashiho, te conozco desde siempre y por la manera en que estás desde que viste a Junkyu sé que es algo que te afecta.