Taeyong era el omega más codiciado y deseado por la mayoría de los alfas de la preparatoria, los tiempos habían cambiado y aunque la mayoría de los omegas seguían siendo huecos y estúpidamente sumisos, algunos pocos como Taeyong eran algo rebeldes...
Renjun sonrió con los ojos cerrados mientras sentía el rostro de Jeno en su cuello, pues, el mayor restregaba su nariz para seguir impregnando su aroma en el omega.
Jeno lo observó, teniendo un pequeño debate mental consigo mismo.
"¿Por qué me ves tanto? Sé que soy muy hermoso pero no seas tan obvio". El alfa rió por el comentario de su novio.
"Quiero presentarte con mi madre".
Renjun abrió los ojos para ver al mayor, esperando que éste estuviera bromeando, sin embargo Jeno lo veía serio.
"¿Es en serio?". Asintió y el omega sonrió. "¿Cuando? ¿Mañana?... Pero espera... ¿Y si no le agrado?".
"Vas a agradarle, tenlo por seguro...". Tomó las mejillas del menor y le dio un corto beso. "Eres un amor de persona".
Hwang se sonrojó y se abrazó a su alfa, comenzando así una ronda más de besos en esa mañana.
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Cayó dormido con una sonrisa no solo por las palabras de su delta sino también porque tenía impregnado el aroma a café amargo que tanto amaba, el tierno omega había ronroneado mucho en esas pocas horas de sueño que recuperó.
Bajó a la cocina, donde solo se encontraba su omma haciendo el desayuno.
"¿Y los chicos?".
"Mmm... Yuta fue a trabajar, Taemin pasó la noche en casa de un amigo al igual que Jeno se quedó con su omega". Comentó mientras dejaba su desayuno frente a Taeyong. "Debo ir a la plaza comercial, comete todo". Besó la frente de su hijo y salió.
Al terminar de desayunar, lavó su plato y caminó a las escaleras dispuesto a subir a su habitación, pero el timbre de su casa sonó impidiendo su plan. Abrió la puerta encontrándose a Doyoung, quien le sonreía.
"Hola lindo".
"Oh... Hola hyung".
El alfa se agachó para besar sus labios, sin embargo, la esencia a un muy amargo café lo detuvo, su ceño se frunció y su lobo gruñó.
"¿Por qué tienes ese olor? Apestas...". Taeyong se puso nervioso y se dio la media vuelta, alejándose de la entrada. Doyoung entró y cerró la puerta.
"No sé de qué hablas...". Su muñeca fue tomada por el mayor quien lo giró de manera un poco brusca.
"Sabes perfectamente de qué hablo Lee Taeyong...". Acorraló al omega contra la pared acercándose mucho más. "¿Por eso querías ir a la fiesta? ¿Para verlo?".
"¡¿Qué?! ¡¡¡¡No!!!!". Replicó Taeyong. "¿En serio me tomas por ese tipo de persona?". Doyoung suspiró tratándose de calmar, pero no podía, su orgullo se sentía herido de tan solo pensar que ese delta estuvo con su omega.
"Claro que no, Taeyong... Pero dime... ¡¡Qué quieres que piense después de saber que no te vi en toda la noche, noche en donde pudiste beber hasta no estar en tus cinco sentidos y que cuando por fin te vea apestes a ese imbécil!!". Gruñó asustando al menor quien trató de retroceder a pesar de la pared detrás de él.
De pronto, alguien aclarándose la garganta, llamó la atención de la pareja haciendo que Taeyong se sintiera aliviado y que el pelinegro se alejara del omega.
"Si solo vienes a gritarle a mi hermano, será mejor que te largues antes de que yo te saque a patadas". Taemin advirtió entre dientes.
Doyoung tragó duro y miró a su pequeño novio que lo veía asustado, el corazón del alfa dolió.
"Taeyongie...". Trató de acercarse pero Taemin se puso en medio sin dejar de mirarlo.
"Si hay algo que odio, es oler el miedo de mi hermano".
"Taemin hyung... Para...". Tomó al mayor del brazo y miró a Doyoung. "Por favor vete... Hablamos luego...".
El pelinegro no quería irse, quería disculparse con Taeyong, por cómo le gritó y lo trató, sin embargo no tenía otra opción más que hacerle caso al omega. Por lo que solo se dio la vuelta y salió de la casa.
El menor soltó todo el aire que había retenido y recargó su espalda en la pared, Taemin volteó a mirarlo.
"¿Desde cuándo te grita ese imbécil?".
"Espera hyung, no es lo que crees... Doyoung es un buen chico... Nunca lo había visto enojado...". Miró a su hermano. "Aun así... Gracias Taemin".
Taeyong lo abrazó ocultando su rostro en el cuello ajeno buscando relajarse con su aroma a fresas, sin embargo, frunció el ceño al encontrarse con el aroma a mora azul.
"¿Mora azul?". Se sorprendió al ver como el alfa se comenzaba a sonrojar. "Hyung por qué...". Abrió mucho los ojos. "¡¡Tienes pareja!!".
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"¡¡¡Ahhhhh!!!".
Taemin, Taeyong y Yuta (quien apenas regresaba de su trabajo) bajaron corriendo a la cocina después de escuchar el grito de su madre.
"¡¡ ¿Qué pasó?!!". Preguntó asustado el omega encontrando a su progenitora y a su hermano Jeno quien cubría sus oídos.
"Jeno traerá mañana a su omega". La mayor se veía realmente feliz y emocionada contagiando a Taeyong con su sonrisa.
"¡¡¿En serio?!! Yeii". Los tres chicos se quedaron mirando, sin entender del todo, a los dos omegas que festejaban emocionados.
