Nueva York, Estados Unidos 12: 39 am
Narra Harry
- ¡¿Como es que has cambiado tanto?! ¡Hasta casi llegas a mi altura! -le recriminé mientras la soltaba.
- ¿Y tu? ¿Como es posible que ya no existan tus clásicos rulos castaños?
- Supongo que estos cuatro años nos cambiaron a todos, a mi el cabello por ejemplo.
- Lo sé, y si que cambiamos -dijo después de soltar una risotada.
- ¡Oh, Ashley! ¡Hay alguien a quien quiero presentarte!
Me observó con sorpresa- ¿Ah, si? ¿Quién es?
- Soy yo, aunque el pequeño detalle es que ya nos conocíamos Hazza -Alex bajó las escaleras en un short de jean y una blusa amarilla.- Hola Ashley -le sonrió y se acercó a saludarla.
- ¿Ya se conocían? -me rasqué la nuca en confusión.
- ¡Claro que si! -dijo Alex mientras se acercaba antes de plantarme un beso en los labios.
Clara carraspeó- Emmh, como algunos no disfrutamos del espectáculo, nos retiramos -dijo mientras se marchaba.
- Antes de que te vayas, ¿me acompañas a ir por el traje? -preguntó Liam.
- Claro. Zayn, tu ven también -ordenó Clara antes de que los tres desaparecieran por la puerta.
- Bueno, no es que quiera interrumpir un encuentro amistoso,pero...-Alex comenzó a hacer círculos con su dedo índice sobre mi camisa.- Quiero robarme a Harry por un rato, ¿esta bien?.
Ashley alzó sus manos a la altura de sus hombros- Es todo tuyo. Te veo luego Hazza.
Me reí y Alex me arrastró escaleras arriba.
¿Ahora que tramaba?
Nueva York, Estados Unidos 12:40 am
Narra Ashley
Tal vez Alex no sea la persona mas humilde o empática del mundo, pero es que se me hacían una pareja tan perfecta que no podía evitar emocionarme por ellos. Harry se merecía entablar una relación estable y más con una chica como ella. Era hermosa, amigable y modelo. Perfecta.
Sonriendo me di la vuelta y me encontré con la hipnotizante mirada del rubio.
[Flashback]
[...] Todos reímos, hasta que una cabellera rubia apareció por las escaleras. Los latidos de mi corazón aumentaron, este quería escaparse de mi pecho. ¿Hace cuanto no lo veía?.
- Niall -susurré.
- Ashley, ¿eres tu? -preguntó mientras se acercaba, como si estuviese viendo a un fantasma.
- ¡Claro que soy yo! ¿Quién más?
Eso bastó para que un abrazo callara nuestras palabras. Lo extrañaba más de lo que podía admitir.
- ¡No puedo creerlo! -exclamó mientras profundizaba aún mas el abrazo.
Tenerlo en brazos se sentía tan irreal que dolía.
- Eres tu -me soltó lentamente.- Te he extrañado -dijo acompañado de una brillante y tierna sonrisa.
- Yo también -respondí con el corazón a punto de explotar.
Nuestras miradas seguían conectadas, el mundo se había esfumado a nuestro alrededor. Hasta que sentí unas manos en mi cintura alejándome del posiblemente mejor momento del día.
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Forever and Always
RomansaDespués de que le dejaran el corazón roto por tercera vez, pasaron cinco años. Nadie sigue siendo igual. Cada uno hizo su propio camino. Cada cuál cumplió sus espectativas. Hicieron amistades diferentes. Se separaron. ¿Qué pasará si se vuelven a jun...