﹟ 𝐄𝐥 𝐡𝐞𝐜𝐡𝐢𝐳𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐛𝐫𝐮𝐣𝐚 || (Todoroki x todos)

«04»

Sabes no sabía que eras tan amigable —Afirmó el rubio con una sonrisa que después fue desvaneciendose poco a poco.

Y yo no sabía que eras capaz de hablarte con alguien como yo —una risa en el bicolor era muy raro de ver, pero lo importante ahora era que se estaba riendo, estaba sonriendo, kaminari se lo quedó viendo por un corto tiempo con una cara sorprendida, y claro no podía faltar la típica gotita en su nuca.

Kaminari comenzó a reír junto con él, hasta que las risas continuaron presentes en aquel entonces, pero el heterocromático pronto comenzaría a sentirse cómodo y seguro con el chico eléctrico que hasta invitó a este a su casa.

¿Te gustaría venir a mi casa mañana, en la hora de la salida? , la hora nos está ganando, y pronto se hará de noche, dos Omegas cómo nosotros no deberían de estar caminando de lo más tranquilos por las calles— preguntó el medio Albino con una expresión apenada. Denki por otro lado aceptaría aquella propuesta con aquella actitud que los caracteriza, que es claramente la perseverancia.

Se despidieron con un par de señas que habían aprendido mientras se tomaban su plática.

La Luna comenzaría a despedirse del Sol, entonces eso significaba que el bicolor debía de acelerar el paso, tenía que llegar cuanto antes a su pequeña residencia , o si no lo hacía preocuparía a sus hermanos, si preocupaba a sus hermanos, su hermana lo regañaría, y si su hermana lo regañaba entonces se quedaría sin su sopa más apreciada, y ya sabemos lo que sucedería más adelante si es que no se apresuraba hacía su hogar. Por ello Shoto lo negó rotundamente con una carita que se decidia a no aceptar aquella consecuencia negativa.

Hey mitad a dónde vas a estas horas...— se acercó inesperadamente sin ser notado el cenizado.

A ningún lugar en específico que no se mi casa; con mi habitación, con una cómoda cama, y con unos hermanos que me cuidan. — de la nada el bicolor comenzó a recordar un punto en donde platicó sobre el tema de sonreír, hasta la sonrisa más pobre, existía...

Y claro sonrió, el cenizo se lo quedó viendo raro, estaba dudando si este era el verdadero Todoroki o solo fingía.

Shoto al ver que aquel ojis carmesí no decía nada al respecto, decidió ignorarlo por completo, no tenía tiempo de perder sus valiosos; segundos, minutos o tal vez horas, quien sabe. Pasó por su derecha como si no hubiera ni una un solo pedazo de piedra  por ahí.

Espera mitad mitad, tu no te mueves después de que te diga.

¿¡Como?! A mi nadie me dice que tengo que hacer...— Shoto cambió de cara inmediatamente remplazando su pequeña sonrisa por una de intento de amenaza, es por ello que agachó su vista y se pasaría a realizar una sarcástica pose de ataque, luego preparó sus dos palmas de sus manos donde dejó ver su flama de fuego, y en la otra hielo.

Bakugo en el fondo sabía que aquel ojis heterocromáticos lo atraía, no podía negarlo. Entendió el mensaje rápidamente, es por ello que solo se Alejó del bicolor, pero no lo asustaba del todo, solo lograba hacerlo reír, pero sabía bien claro que pronto él estaría bajo sus pies, caería en sus redes.

Shoto regreso cuanto antes a su casa, pues resulta que llegó a tiempo, salvado por un valioso minuto, lo bueno de ahora es que
degustaría su paladar con el exquisito sabor del Soba.

¡Hermanito tu Soba ya está en la temperatura que más te gusta! — Se apuntó para decir la albina, con un tono de voz que fuera audible por el bicolor.

Mientras tanto, cuando Shoto vio aquel platillo, sus ojitos reflejaron su Estado de emoción, se colorearon con unos brillitos que lo hacían ver aún más tierno de lo que era.

Luego de haber digustado de aquella sopa, se cambiaría con su pijama que consistía en un disfraz de oso polar, se fue al baño inmediatamente para realizar de sus necesidades principales, en ello incluía limpiarse los dientes.

Finalmente como acto final del día Shoto se acostaría en su cama cerraría sus ojos, se cubriría con la Sabana hasta el punto de cubrirlo hasta el último pelo que sobresalía en su almohada.

Al día siguiente el gato del estudiante saltaría en su rostro, haciendo que se despertara en medio sueño.

Min min, no seas malo dejame dormir un ratito más...— se quejaba el bicolor, con los ojos entrecerrados. Qué más daba tenía que despedirse de su cómoda cama y darle la bienvenida a su uniforme, pero dormir un ratito no afectaría su rutina ¿o si?. Pero el pequeño minino no se rendiría fácilmente, comenzaría a dejar mordidas por el tobillo del ojis heterocromáticos, lo que causó que Shoto lanzara algunos que otros quejidos.

Estaba vez el menor de los Todoroki si estaría despierto definitivamente, el gatito canto victoria con un melodioso maullido.

Con un ritmo como todos los días , Shoto se ducharia, cambiaría y se areglaría en lo que hacía falta.

Luego de ello se pondría a ordenar su cuarto, seguidamente le tocaría el comedor donde desayunaría.

Pero al sentarse a desayunar se encontraría con la pareja actual con la cuál su padre sale desde hace una año, pero que lo conocía desde hace muchos años atrás, y claro Fayumi a lado de él, Natsu no se encontraba en casa debido a que tenía un exámen muy importante que dar en su Universidad.

¡Hola pequeño Shoto!—En fin...
ahí estaba un Omega, no común ni corriente de hecho uno en particular, pero que más daba, el respeto siempre reinaba en cualquier familia, por lo cual el Todoroki saludo de lo más habitual, haciendo uso de las palabras adecuadas que ya existían. Pero el bicolor no se quedaría con las dudas en mente por lo cual preguntó, el porque Keigo había venido a casa con un par de maletas.

Shoto...vaya ya creciste desde la última vez que te ví, pensándolo bien...no tanto...jajaja...¡ese es Shoto! —comenzaría a reírse el rubio con alas, con cierta exageración. Shoto se quedó viendo la situación, es por ello que armó una expresión pensativa muy de él, luego tomaría asiento en la mesa para desayunar junto con el invitado y su hermana mayor.

Bien...respondiendo tu pregunta, me quedaré con ustedes por un tiempo, si me preguntan por su padre pues me dejó quedarme con ustedes, Asies que no se preocupen por eso ¿si?. —dijo sonriendo el rubio mientras cogía la taza de té para llevarsela a la boca.

— ¿Como lo hizó? ,mi padre no es fácil de manejar...debe tener un truco para controlarlo...creó que mejor se lo pregunto después de la escuela. —pensaría el bicolor.

Una hora después el ojis heterocromáticos ya se encontraría en camino después de haberse despedido de su familia, tan solo a unas pocas cuadras de la UA.

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Bueno chicas termine el capítulo como lo había planeado, entonces nos leemos en la siguiente. ‹3

Respecto a Rei, ella no está casa porque trabaja en el extranjero, resulta que después de su rehabilitación, el médico de confianza la recomendó que se debería probar un ambiente nuevo. Pero Ella como ama a sus hijos, les manda recados, hasta incluso viene a visitarlos por un tiempo.

Cuídense, bendiciones para todas las que siguen esta historia.