Capitulo 7

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-Vamos Astrid ya son las ocho de la mañana, tú sabes el tráfico que tendremos para llegar a la playa -me reprocha Maia

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-Vamos Astrid ya son las ocho de la mañana, tú sabes el tráfico que tendremos para llegar a la playa -me reprocha Maia.

-Unos minuticos más por favor, Maia- le ruego aferrándome a las sabanas de la cama de ella.

Siempre me quedaba en casa de Maia después de estas celebraciones.

-Que minuticos más ni que cuartos, ayer hablamos de que iríamos tempranos mueve tu trasero ya.

Maia me había dicho que después de la feria iríamos a venice beach una playa muy concurrida, con atardeceres increíbles. Según Maia íbamos a pasar una tarde de chicas y ella quería que fuera desde temprano, me había pedido que alistara vestido y todo para salir equipadas. Eliot se había ido a casa después de pasar un buen rato en el bar de la terraza.

-Maia por favor ...

-Por favor nada muévete ya- me jala las cobijas de un tirón- si no te mueves en cinco yo misma te muevo, pero jalándote de las mechas me oíste – se notaba que le había sacado el malgenio- cinco ... cuatro...

-ya, ya estoy preparada – me siento pasando mis manos sobre mi rostro – tomo el celular que deje bajo la almohada, Maia estaba en lo cierto eran las ocho en punto y se nos estaba haciendo tarde, el camino hacia venice Beach era largo.

-Entonces muévete, a la ducha ya- Me señala con su mano la puerta del baño, Maia ya estaba perfectamente organizada con un vestido amarillo con flores rojas que se le ajustaba al cuerpo, pero que su material era adecuado para el calor.

Tomo mis cosas sin decirle algo más y me apuro en arreglarme.

...

Wow... en verdad pasar tiempo en la playa era increíble estábamos acostadas en unas sillas para tomar el sol mientras nos tomábamos unos batidos cremosos de melocotón con yogurt.

-Sabes ... deberíamos buscar chicos en la playa – me dice Maia.

- ¿Estas bien Maia? – me bajo un poco las gafas de sol para observarla mejor.

- De por dios mira todos estos chicos – rastrea el panorama lentamente – por ejemplo, mira a estos chicos de acá – señala a un grupo de jóvenes que están jugando voleibol playa – no me vayas a negar que están churrisimos – lanza un beso con su mano.

- No están nada mal – rio – pero que yo sepa tu estas coqueteando con Conrad Westwick

- No hemos llegada a nada, como te dije probablemente me invite a salir, así que mientras no lo haga puedo salir con cualquier chico para conocer pequeño cerebrito – lleva el vaso a sus labios.

-Estas loca Maia

-Ya lo sé cariño, venga ya, vamos a pedirles una partida de voleibol – Maia se levanta y me toma de la mano llevándome a donde los jóvenes – Ya es turno también de que superes a Zack, en verdad agradezco que hayas terminado con él, nunca me cayó bien lo sabes.

PROMETO HACERTE DESEARMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora