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Los días posteriores a su muy breve encuentro con aquel hombre, pasaron con la rapidez de un pestañeo. Así era últimamente. Un día estaba recostado sobre la cama, mirando el techo junto a Yun en completo silencio, tan sólo esperando a que su madre volviera de hablar con la suya sobre la verdad que ocultaba la cara amigable del hombre que dormía junto a ella, y al otro, se encontraba de nuevo en el salón de clases junto a Yun, quien le sonreía furtivamente desde la otra punta del salón. Aún estando con su grupo de amigos nunca dejaba de verlo, lanzando pequeñas señales con su cuerpo de que quería ir a donde estaba, alineando inconscientemente su cuerpo hacía él, no importaba en que posición estuviera, aunque si se lo preguntaba después, lo negaba rotundamente.

Armando le observaba desde su lugar, con su mentón recargado contra la palma de su mano y una mirada de desinterés, aburrimiento, tratando con éxito de ocultar la satisfacción que le invadía el pecho al verlo tan feliz, genuinamente feliz. Ya nadie dejaba marcas en su cuerpo y ese tipo que se creyó muy hombre al tocarle se había ido para nunca volver, eso sino deseaba una demanda y recibir los golpes sin contención que se había reservado aquel día, su madre se lo aseguró incontables veces cuando se negó a dejar ir a Yun si él seguía en su casa, listo para recibirlo. Las palabras de su madre, aunque sinceras, no le detuvieron, y le acompaño a casa, lo hizo durante días, tal vez semanas hasta que la desconfianza le dejo dormir tranquilo.

—Chicos — llamó el profesor con un tono alto, lo suficiente para que todos le prestarán atención—, como ya saben, otros profesores y yo estamos planeando realizar un festival para recaudar dinero — informó y los murmullos no se hicieron esperar, algunos emocionados, otros como él, no tanto—, así que les he hecho una lista con las actividades que pueden realizar ese día — Mostró el papel que sostenía entre las manos y todos se inclinaron hacía adelante, intentando visualizar mejor lo que tenía escrito—. Les daré la libertad escoger que actividad desean realizar y les aviso que es obligatorio que todos participen — finalizó, entregándole el papel a una de las chicas que se encontraban en la primera línea.

Él se sentaba hasta atrás en esa clase por insistencia de Yun, así que la lista tardaría en llegar a él, más teniendo en cuenta el tiempo que tardaban las chicas en ponerse de acuerdo en que actividad querían hacer, entonces, sin más remedio que esperar, se dispuso a terminar de pasar a su cuaderno lo que había en la pizarra.

—Almando — Esa voz suave y única le llegó a los oídos de repente. Separó su vista del pupitre y se encontró con sus oscuros ojos marrón mirándole hacía abajo, sosteniendo entre sus manos la lista que esperaba ver llegar hasta unos minutos más tarde.

Si, se había olvidado del factor Yun, siempre actuando tan impredecible y apresurado, que la idea de que había ido a quitarles la hoja de las manos a las chicas se le confirmo cuando le dedicaron sus peores miradas por encima del hombro.

Madre mía Yun...

—¿Quiele' sel una botalga? — Le preguntó de la nada, apartando la mirada de encima suya para fijarla en la hoja, trazando con sus ojos un recorrido de arriba a abajo—. Podlía' sel un oso y asustal a todo' — añadió con entusiasmo, mostrando una amplia sonrisa.

—No — Se negó al instante, tomando el borde superior de la hoja para quitársela y así ver que otra cosa podía hacer, porque pasar horas dentro de un traje afelpado con el calor que seguro iba a hacer, no, definitivamente no. Había muchas actividades que tenía uno o varios nombres escritos a un lado, lo que implicaba que estaban tomadas y, muy abajo, estaba escrito "Atender un puesto de comida"—. Yun, ¿qué tal si atend-

—¡Mila, mila! Podemo' cantal una canción — Le interrumpió con la emoción desbordando en su voz, tomando la hoja de vuelta.

No se consideraba del tipo tímido, pero tampoco se veía como un extrovertido, simplemente no le gustaba llamar la atención sino era necesario y si se subía a un escenario en un lugar repleto de gente que no conocía, iba a atraerla como moscas a la miel.

|↻| 𝐓𝐈𝐄𝐌𝐏𝐎 || 𝐅𝐈𝐍𝐀𝐋𝐈𝐙𝐀𝐃𝐎 |↻|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora