El prometido de mi hermana {Zayn Malik}

Capítulo siete: "No puedo"

Me había hipnotizado ante su mirada. Era tan guapo y me hacía sentir muy bien, pero tan imposible para mí. Bajo la mirada y con ella mi cabeza, impedí que Zayn me besara o hiciera lo que tenía en mente. 

— ¿Pasa algo? — dice levantandome el rostro desde el mentón. Trago saliva y evito su mirada. 

— No — niego y quito su mano de mi mentón. Me alejo de él. 

— Abby, ¿estás bien? 

— Sí — digo una vez más. No me salían más que monosílabos. No quería mirarlo. Quiero irme de ahí pero él me toma de la mano y sigue caminando junto a mí

. Nos habíamos alejado un poco de la gente que bailaba apegada. La estaba pasando mal, me sentía hasta culpable de bailar con Zayn, de intercambiar miradas. Si bien a Nina no la había visto hace tres años y podía llevarme mal, era mi hermana y nunca podría traicionarla con algo como ésto; Zayn debería darse cuenta de que esto estaba mal. 

— Abby, escuchame, ¿qué te pasa? — me dice una vez que logré salir afuera de Cameo. Solté rápido la mano de Zayn. 

— Zayn, ¿tú amas a Nina, verdad? — le pregunto. Él frunce el ceño —. Contéstame. 

— Sí, la amo. 

— Entonces déjame en paz — digo con valentía, no sé de donde la saqué, sinceramente.

— No. 

— Sí, déjame en paz. Ésto no... es normal que pase entre cuñados. Los cuñados no bailan juntos, no — digo casi al borde de las lágrimas—, solo, déjame en paz. 

— No. 

— ¡Que si, hombre! 

— No, es que no puedo — dice tras mirarme a los ojos. El corazón comenzó a darme palpitaciones. Zayn comenzó a acercarse una vez más a mí. Mis pies estaban pegados literalmente, al suelo. Sus manos acunaron mi rostro y atiné a cerrar mis ojos. 

— ¡Abby, que suerte que te encuentro! — Oí la voz de Anne y entonces abrí mis ojos. Zayn se había alejado de mí y sentí un vacío dentro mío, ¿Si Anne no llegaba era capaz de besarme?. Trago saliva y luego miro a Anne—. ¿Interrumpo algo? 

— No — dijimos Zayn y yo al unísono. Lo miro con dolor y al mismo tiempo con rabia. Tenía que alejarme de él, pero por más que quiera no podía. 

— Ah uhm — vuelve a hablar Anne mirando a Zayn y luego a mí —. Gracias — me dice. Yo seguía mirando a Zayn a través del hombro de Anne, pero luego vuelvo a la realidad. 

— ¿Uhm qué? 

— ¿Estás bien? 

— Sí, sí, ¿qué... dijiste? 

— Que gracias — sonríe ella pasandose una mano por su cabello. Frunzo el ceño. 

— ¿Gracias, por qué? 

— ¡Por haberme presentado a tu ami... al amigo de Zayn! — chilla—. Está tan bueno que me lo follaría en dos segundos — dice una vez más y no puedo evitar reír ante su comentario, aunque lo hago sin ganas. 

— ¿Hablas de Harry, no? 

— Sí, sí. Me encanta — relame sus labios —. ¿Segura que estás bien? 

— Mhm — asiento con la cabeza —. Creo que ya me iba al hotel. 

— ¿Quieres que te acompañe? 

— No, gracias. 

— Mira que las calles son muy peligrosas a altas horas de la noche. Son las 2:35. 

— No te preocupes, Anne. Estaré bien. 

— Está bien, cuidate mucho — me dice una vez más y me abraza. Sonrío sin ganas y Anne se mete nuevamente a Cameo. Suspiro y analizo la zona, Zayn no estaba por aquí y Daniel menos. 

— Disculpe, señor — llamo a uno de seguridad, éste presta atención en mí—. ¿Sabe como ir al hotel Hilton? 

— Ah, sí. Caminas tres calles hacia la derecha y luego doblas  a la izquierda — me indica. Le sonrío. 

— Está bien, muchas gracias — le agradezco y él me asiente inseguro. Al parecer los de seguridad tenían sentimientos. Río ante mi idea y me voy de ahí para luego emprender mi caminata hacia el hotel. No quedaba lejos y eso me tranquilizaba un poco, aunque las palabras de Anne seguían revoloteando por mi cabeza Las calles son muy peligrosas. 

Me abrazo a mí misma por el frío de la ciudad. Algunas de las personas que estaban en la calle chiflaban pero aún así no se acercaban a mí; aquello me ponía los pelos de punta, mi papá me enseñó que ante algún cumplido en la calle o algun chiflido nunca, pero nunca tenía que mirar hacia atrás, siempre tenía que ignorarlo así que eso hice. 

Pero finalmente, había llegado al hotel. Entré y saludé a los de recepción; me devolvieron el saludo con la mano y fui directo al elevador donde me metí, ya que estaba abierto porque supongo que estaban todos durmiendo o la mayoría estaba de fiesta. Era típico de Miami salir de fiesta todos los días. Subí hasta el 4to piso y una vez que llegué a la habitación me quité mis zapatos, mi ropa. Me puse un pijama cómodo y me tiré en la cama.

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Hasta ahí :) Sé que no es el mejor capítulo pero el próximo está bueno, lo prometo. ¡130+ leídas! Yayyyyyyyy, y 17 votos <3. Como sea, gracias Anne por leer y comentar, te amo ya lo dije :). 

Besos!