Empiezo esa segunda parte de nuestro espacio de reflexión presentando a la que lo hace nacer: la Filosofía.Todo el mundo ha oído hablar de la filosofía, incluso se usa para cuestiones como "la filosofía de nuestra empresa/colegio/banco...", como sinónimo de pensamiento (me gusta tu filosofía) o para reflejar calma (tómate la vida con filosofía).
Vamos, que todo el mundo habla de esta bella y necesaria disciplina, pero poca gente sabe realmente qué es, en qué consiste, o que engloba múltiples áreas de conocimiento.
Etimológicamente es una palabra que viene del griego: Filo significa amor y Sofía sabiduría. Por lo que, siguiendo el lenguaje, podemos afirmar que la Filosofía es el amor por la sabiduría.
Pero el amor, el amar, es un acto, así que no estamos mal encaminados si hablamos de la filosofía como una actividad.
¿Actividad de qué?
Actividad de las mentes inquietas que no se conforman con lo establecido.
La filosofía requiere inconformismo, curiosidad por descubrir nuevos caminos, abordar nuevos horizontes.La filosofía requiere salir de nuestra zona de comfort y estar dispuestos a darnos cuenta de que, quizá, nuestras creencias eran infundadas o, simplemente, después de investigar, adquirir los nuevos conocimientos que las vuelvan invalidas para nosotros.
Sí, puede ser algo tedioso, molesto e incómodo buscar la mayoría de edad intelectualmente hablando... pero, si no lo hacemos corremos el riesgo de ser manipulados, absorbidos y enajenados de nosotros mismos.
Sócrates, filosofo griego del siglo V a.C., era conocido en Atenas como un "moscardón", un bichito pesado que incomodaba a quienes se encontraba en el ágora con su zumbido. El zumbido de Sócrates consistía en hacer preguntas a la gente sobre cuestiones como qué es la justicia, qué es lo bueno, qué es la belleza... qué, qué y qué.
El resultado de quienes se atrevían a conversar con él era que comenzaban su respuesta afirmando una cosa y gracias al método socrático llamado mayéutica (hacer preguntas al interlocutor para que el mismo/a obtenga las respuestas adecuadas)
Como anécdota os puedo contar que un alumno, hace unos meses dijo en clase que la Filosofía es un "coñazo". Lo mismo pensaban los atenienses de Sócrates, ¡incluso le condenaron a muerte!
Pensar a veces cuesta y es el más duro de los ejercicios, pero el resultado, la meta, no tiene precio: la autonomía, o en otras palabras, la libertad.
Y lo bueno es que podemos hacer filosofía de cualquier cosa. Ética, bioética, política, estética, literatura, cine, metafísica, historia, religión...
Así que, queridas y queridos lectores: Sapere aude, atrévanse a pensar.
Pregunta: ¿Qué es para ti la Filosofía?
.
.
.Espero que os haya gustado este primer post. El siguiente va a ser un dilema ético sobre el que reflexionar.
Para los que no me conozcáis, soy profesora de Filosofía en Madrid (España) y adoro mi profesión las letras, los libros, las historias, a Friedrich Nietzsche, y soy apasionada de la Bioética, interesándome especialmente la ética animal.
Tengo dos libros de poemas publicados en físico (tenéis la información, por si os interesara, en mi descripción de wattpad) y he comenzado a escribir mi primera novela, "Como la vida misma", sobre la que subo un capítulo a la semana es esta misma app.
Espero hacer de este espacio un lugar para todas y todos, y que podamos seguir avivando la llama del pensamiendo.
Un abrazo
L.C.
ESTÁS LEYENDO
Filosofía de sobremesa
RandomSegunda parte de "Y de postre... Filosofía, por favor". Nuevo espacio de reflexión, pensamiento crítico, dilemas (bio)éticos y mucha, mucha Filosofía.