FINALLY WE CAN REST TOGHER |Kushina Uzumaki.| ✓

02.

Los días habían pasado desde que había llegado a Konoha, las burlas seguian cada día pero yo no me dejaba y obviamente siempre acabo golpeándo a los chicos que siempre me molestan hasta que llegaron al punto de ponerme un apodo.

“El demonio sangriento”

Antes de que pudiese a ver seguido caminando he visto a uno de los chicos que me molestaba en la academia

—¿Tu siempre estás haciendo llorar a mi hermano?.—Pregunto caminando hacia mi sin a ver dejado de sonreír.

—¡Es porque siempre está molestandome y haciendo comentarios horribles sobre mi cabello ttebane!.—Le he dicho con seriedad apuntando al chico quien solo aparto la mirada.—¡Es un cobarde!.

—Soy Genin. Genial ¿Verdad?.—Señalo si banda.—Tengo que enseñar una lección a cierta persona que molesta a mi hermano.

Ante eso intenté mantenerme firme pero en realidad por dentro sentía miedo por lo que fuese a pasar, a si que he comenzado a huir siendo perseguida por aquel chico.

Esquive a tiempo el Kunai que ha lanzado hacia mi dirección, lo que me sorprendió al ver que era real, por lo tanto si tenía intenciones de dañarme. Pero está vez no huiria, a si que volte a ver al sujeto para iniciar a enfrentarlo.

Lo golpe fuerte en su estómago que hizo que callera fuertemente al suelo, sin embargo me he quedado sorpendida al ver aparecer un tronco y antes que pudiese reaccionar este apareció detrás de mi golpeando mi espalda y mandarme una patada haciéndome caer al suelo.

Intenté levantarme pero este me sostuvo del cabello de un tirón.

—¿Nisiquiera puedes reconocer la técnica de sustitución?.—Pregunto sin haberme soltado.—Eres una niñita.

—Sueltame...— Suplique en susurro pero este nisiquiera me escucho.

—Tu cabello es tan rojizo y resistente como un hilo.—Jalo aún más de mi cabello haciéndome soltar un chillido.—¡Es horrible!

Me sentí inútil y fatal, no podía hacer nada incluso me sentía con ganas de acabar con este sufrimiento, todos me molestan y discriminan por tener este horrible color de cabello. Sentí como había dejado salir lágrimas las cuales no quería que nadie las viera.

—A mi...—Inicie hablar alzando mi mirada lentamente.—..tampoco me gusta mi cabello.

Le he dicho intenta do soltarme de su agarré pero lo único que lograba era que el jalara aún más hasta que finalmente logré liberarme haciendo que algunos de mis cabellos quedarán en sus mano.

—¡Pero después de todo sigue siendo mi cabello!.

Y antes que pudiese golpeado inesperadamente ha aparecido _____ quien le ha mandado un gran golpe haciendo que cayera al suelo, está se colocó enfrente mío teniendo kunais en sus manos.

—Tratar a una chica de mala manera no es de hombres.—Escuche decir _____ sin apartar la vista de aquel sujeto quien solo huyó molestó junto con su hermano.—Cobardes.

—Eres tu...—Ella me miró dedicándome una sonrisa.

—¿Se encuentra bien, Kushina-san?.—Camino hasta quedar enfrente de mi y comenzar a examinar si yo tuviese alguna herida.—Su cabello...

—No es nada, ttebane.—Le hize saber sobando mi cabeza.— ¿Que haces aquí, _____?.

—Estaba entrenando con mi hermano pero de repente comenze a escuchar voces por este lado del bosque.—Explico y ante eso he visto a un sujeto el cual apareció detrás de unos árboles.

Era casi ver a _____ pero versión hombre.

—Veo que te has encargado de ellos.—Menciono el sujeto.—Un gusto, soy Minato Namikaze ¿Eres amiga de ______?.

—¿Amiga?.—Murmure mirando de nuevo a la chica.

—Ya que estamos las dos aquí.. ¡Hay que ir por ramen!.—Dijo de repente exclamando con emoción y sostenerme de la mano.—¡Yo invito Kushina-san!.

—Yo tengo que ir a una misión, nos vemos en la noche _____.—Antes que diera un paso el hermano de la chica la miró nuevamente.—Y hoy te toca lavar los trates.

Ella bufó en cuanto su hermano mencionó eso.

—A veces odio lavar los trastes.—_____ se despidió de su hermano y volteo a verme.—Entonces... ¿Quiere ir por Ramen?.

—Claro.—Respondi feliz.

Las dos hemos iniciado a caminar hasta el lugar donde vendían ramen, en el camino estuvimos hablando sobre algunas cosas sobre nosotras, para así conocernos mejor.

_____ Namikaze se había convertido mi primera amiga.