VI - ¿Podrías tan solo mostrar un poco de empatía?

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"Doc... Claro que sí, claro que disfrutaría ver como se desangra ante mí. Quizás hace mucho dejé de tener empatía o remordimiento por lo que causo."

Caminaba lentamente hacia donde estaba, tomé el cuchillo... Mi mente no pensaba, solo actuaba por inercia...


Ese día me acerque a Jade, le platique sobre el hecho de "hablar de algo importante"... Algo que nunca le había dicho a nadie. Y creía que era necesario.

«Siéntate a mi lado ¿Sí? es algo que me cuesta decir y no creo que sea totalmente fácil de escuchar. » dificultando mi hablar.

«¿Todo se encuentra bien, H? Sabes que puedes confiar en mí, siempre estaré para ti... Y nos cuidamos mutuamente.» ¡Vamos! el para siempre no existe... Nada es para siempre, ni siquiera tu vida, J... Sé que lo sabes, sólo ya te acostumbraste a mentirme, te hice acostumbrarte a creer que me tragaba tus mentiras.

«Jade... Te contaré parte de mi vida. Con lo que te voy a decir no quiero que tomes una actitud negativa o incómoda hacia mí, simplemente eres mi amiga, seguramente lo entenderás. Sé que lo sabrás interpretar de la manera correcta y analizarás todo en calma. Pero claro... Eres totalmente libre de hacer lo que creas mejor; si alejarte o simplemente quedarte... Para siempre.» dije sonando preocupado.

«No te preocupes, H. Tal vez le están dando mucha importancia a algo que no necesita tanta. Sea lo que sea, lo sabré entender ¿Sí?» Dijo acercándose y abrazándome fuertemente, me recordó un poco al abrazo en la cocina de hace unos días.

«Okey... Creo que estoy preparado, aunque seguramente necesite agua para contarte todo, y la verdad no quiero que lo pienses mal o te pongas sentimental, es la razón por la cual no puedo salir de esta casa hoy en día.»

«¿Okey...?» dijo alzando una ceja y sonando algo confundida por lo que trataba de explicarle.

«Empezaremos con algo fácil y suave... Luego seguramente vaya aumentando un poco las cosas. De pequeño tuve muchos problemas en el colegio, muchos niños me golpeaban y abusaban físicamente de mi, esto no quita que los insultos también existían. Recuerdo sus puños en mi cara, o las varias veces que termine hasta tarde curando las heridas de mi cuerpo. Los profesores sabían de este problema, más no interferían... Unos años más tarde entendí el porque. El chico "líder" de los que me golpeaban, era hijo del director del colegio.
Siempre lo veía como un juego, justo ahora también lo hago. Pero algo cambió drásticamente. Mis padres. Cruzaban un momento difícil en su relación "amorosa"» dije recalcando las comillas con mis manos.

«Mi padre discutía con mi mamá, ya no comíamos siquiera como familia. Simplemente pelea tras pelea, insultos, gritos, amenazas... Quizás algunos golpes de por medio. Hacían que esta casa sea el lugar con más voces y odio que tenga en mi corazón. Después de todo esto papá empezó a jugar conmigo» dije empezando a cristalizar mi mirada. «Él jugaba con un cinturón. Yo por otra parte tenía que detenerlo antes de que el cinturón llegase a mi cuerpo.» Pude ver como su cara cambió drásticamente tras decirle la palabra "juego" a maltrato continuo por parte del señor French. «Pasaron los meses, y quizás años. Y papá y yo seguíamos en nuestro juego. Quizás a veces era doloroso sentir el golpe del cinturón al momento de no poder detenerlo con mi mano. Otras... Siquiera era con cinturón, a veces se le olvidaba y jugábamos a las luchas... Aunque el siempre ganase.

Un día en la escuela, les conté a mis compañeros que mi padre y yo jugábamos tales juegos, ellos solo se reían... Supongo que pensaban que era mentira, y días más tardes el hijo del director se enteraría; invitándome a jugar con el. Al principio decidimos que a las luchas, pero el empezó a ponerse anillos o cosas en los dedos. Y aunque era más compasivo que papá igual dolía en muchas ocasiones. Al pasar las semanas decidí llevar una "ayuda" también... Guardé en mi bolsillo un lapicero y al momento de que el me golpease decidí sacar el lapicero, cuando lo vio se asustó. Se paralizó un momento, y luego se me vino encima de mi a pelear por el. Supongo que él no tenía uno y quería el mío. Pero aunque le dejé en claro que me pertenecía, el quiso quitármelo. En momentos de pelear por el lápiz el se lo llevó al pecho, quizás por accidente. Y al momento que cayó al piso recordé algunos golpes que aplicaba papá al momento de jugar; cuando yo caía me golpeaba en el abdomen. Quise intentar lo mismo, pero como él tenía mi lapicero se lo logré quitar y golpearle en el abdomen con el. Después de un rato, el chico no se levantaba, empezó a salir ese jugo rojo de su cuerpo, tal cual como a mí. Pero el de él salía mucho más, y más rápido. Sus amigos salieron corriendo a pedir ayuda y un poco asustados. Supongo que por su amigo en el piso sin reaccionar. Empecé a llorar ya que el niño no se movía y luego recuerdo un pinchazo en el cuello, más una persona encima de mí. Creo que eran policías. Desperté más tarde en una sala bastante clara y mis padres hablando bruscamente. Intenté decirles que era un juego, el mismo que jugaba con papá. En ese momento se callaron y salieron de la sala. Luego de ahí, recuerdo estar encerrado en unos cuartos blancos durante unos meses, tratarme con más de cinco doctores cada semana y por último terminar en esta casa. Sigo sin entender porque no puedo salir, o qué hice tan mal que no se comparece al juego que tenía con papá.»

El silencio arropó la casa, la cara de Jade estaba destrozada. Y sus ojos no paraban de derramar lágrimas sin control alguno. No sé qué pensaba en ese momento, o si volviese a verme igual. Sólo tenía miedo a lo que pensará de ahora en adelante. Pero necesitaba que lo supiera, necesitaba que supiera la verdad y espero la entendiese perfectamente. Jade se levantó bruscamente de su silla, pero no sin antes darme un abrazo fuerte y besar mi mejilla nuevamente.

«Todo estará bien, todo estará bien ahora...» ¿Cómo se que no mientes, pequeña? «Yo te cuidaré, H... Nadie volverá a pasar por eso, y tu no volverás a jugar con tu padre.»

«¿Lo dices en serio, J?» dije entre sollozos...

«Estás seguro, conmigo lo estás, pequeño.» Dijo terminando el abrazo y encerrándose en su habitación, seguramente irá a escribir todo lo antes posible a la doctora Nurk.

Sólo debo esperar, saber si me cree y ver qué le dirá a la doctora. Quiero creer que entré en su mente por un momento. Que llegó a dudar algo de la historia como se la contaron. Quizás haya servido de algo llorar. Todo ese día Jade estuvo en su habitación, no salió mucho a conversar. Raramente salía de su cuarto y al verme me sonreía y lanzaba un beso al aire señalándome.

A las 4:56 PM se sentó conmigo a orillas de la piscina, al momento de que se sentase recuerdo cambiar mi rostro completamente y sollozar.

«Te alejarás, te irás como todos y me dejarás con ellos otra vez. Y no te culpo, quien estaría conmigo ¿sabiendo que seguramente dañase la vida de alguien? Sabiendo ahora todo lo que sabes, sólo soy una página blanca ante ti, J.» dije dejando salir lágrimas. No me sorprendí por la respuesta que me dio... Al contrarío, lo esperaba. «¡No! No lo haré, H... Sólo necesitaba tiempo para pensar, sabes cómo me afectan los problemas familiares, sabes cómo me afecta todo lo que tenga que verse con padres. Quería estar sola, llorar un poco por lo que dijiste y más si pensaba en mi pasado. No eres el único, pero será la última vez que jugarás con tu padre. Te dije que te cuidaría y eso estoy haciendo desde hace meses. No dejaré que nadie te haga nada, es más... De ahora en adelante eres completamente mío y quien te lastimé saldrá aún más herido.»

Espero que lo que digas sea real, si es así... Sé que ya la soga está rodeando tu cuello, sólo tengo que amarrar el nudo.

«Jade...» Dije dejando caer más lágrimas sin control alguno de ellas.

«Haytham...»

Ambos contemplamos los ojos del otro, el hielo formarse en nuestras miradas casi completando una fusión visual. Era como ver la luna y el sol eclipsarse, era ver dos planetas chocando entre sí. Era... Nuestras manos se acercaron y entrelazaron entre si. Éramos uno, un cuerpo, dos almas... Las cadenas empezaban a rodearnos, sólo tenía que bloquear la cerradura para que no escapase. Y sabía perfectamente cómo hacerlo.

Cayó la noche antes de darme cuenta, la madrugada estaba vacía... No había mucho que esperar, no obviando los datos del computador de Jade... Y sólo faltaban 5 minutos para tener acceso.

12:00 AM

| ACCEDIENDO |

| ACCESO EXITOSO |

~Would you love me more...?

| ELIMINANDO DATOS |

| PROXIMO ENVIO 12:00 AM |

¿Un psicópata necesita niñera?©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora