Elección [RavnHo/LeeHo]

👤dos👤

Seo Ho se despertó abruptamente por el sonido de su despertador, el cual apagó sin pensarlo. Por alguna razón, y casualmente luego de la partida de Young Jo de Seúl, el chico tuvo un sueño para nada inocente con el hermano mayor de Geon Hak.

Soltó un pesado suspiro y rascó su cabeza para luego dejarse caer nuevamente sobre la cama.

-Deja de pensar en él, ¿quieres? -Se dijo y se sentó sobre la cama. Palmeó sutilmente sus mejillas y se quedó unos segundos pensando.

-Seo Ho, apresúrate. Hoy tenemos que entregar el proyecto que estuvimos haciendo desde hace días -le informó Geon Hak, desde afuera de su habitación y Seo Ho suspiró.

-Ya voy -con dificultad, se levantó de la cama y miró el objeto detenidamente. Había regresado a su habitación desde la partida de Young Jo y, por si fuera poco, desde entonces ha estado teniendo aquel tipo de sueños con el hermano de su mejor amigo... Y sí, Geon Hak era otra razón para que Seo Ho decidiera cambiarse de cuarto cuanto antes. Desde que Young Jo le había mencionado, en su carta de despedida, lo que el menor de los Kim sentía por él... Seguía sin poder ver a su amigo a la cara. Simplemente no podía mirarlo. No después de su pequeño momento con el mayor-. En verdad, Lee, olvídalo. Ya pasó -trató de convencerse, en verdad intento hacerlo.

Seo Ho se acercó al armario, sacó algunas prendas de ropa; las que se pondría para asistir a la universidad, y, una vez las tuvo en sus manos, salió de la habitación en dirección al baño. Vio a Geon Hak muy presentable en la cocina. Lo que significaba que podía tomarse el tiempo necesario para ducharse y cambiarse de ropa.

En cuanto entró al baño, Seo Ho se desvistió por completo y, con cada roce que sus propios dedos tenían con alguna parte de su cuerpo, imaginaba a Young Jo. Besándolo otra vez y tuvo que golpear, nuevamente de manera suave, sus propias mejillas para olvidarlo.

Cuando se puso debajo de la regadera, y la abrió, Lee seguía pensando en el chico.

¿Cómo es que él, con un simple beso, se ha clavado en lo profundo de mi mente? ¿Por qué no sale fácilmente de ahí?

Esas eran las preguntas constantes que se hacía y, para las cuales, todavía no tenía una respuesta muy clara. Pero lo averiguaría y trataría de hacerlo lo más pronto posible.

-Seo Ho, apresúrate o llegaremos tarde -la voz de Geon Hak lo hizo reaccionar. No sabía cuánto tiempo llevaba en la ducha, pero, de igual forma, se apresuró a enjuagar todo su cuerpo lo más rápido posible.

-Dame unos minutos -dijo y escuchó como, lentamente, su mejor amigo se alejaba de la puerta del baño a quien sabe que parte del departamento.

Seo Ho, luego de cerrar el paso del agua a la regadera, se secó con la toalla azul; que siempre dejaba en las noches, y se vistió lo más rápido que pudo hasta salir del baño lo mejor presentable posible.

-¿Hacías algo indebido y por eso tardabas? -Interrogó Geon Hak, causando que las mejillas de Seo Ho se tornarán de un color extremadamente rojizo-. Creo que eso es un sí.

-¡Claro que no! -Se quejó el otro y vio como Geon Hak se acercaba lo suficiente a su persona, al grado de que sus rostros quedaron suficientemente cerca y sus respiraciones podían mezclarse-. ¿Qué estás...?

-Mírame y dime que no estabas haciendo cosas indecentes ahí dentro -Seo Ho tragó pesadamente. Si no tuviera conocimiento de lo que Geon Hak sentía por él, posiblemente ahora estuviera a punto de matarlo, pero lo sabía y tragó saliva de manera pesada. Geon Hak estaba poniéndolo nervioso. Demasiado. Una parte de su mente decía que lo apartará, pero a la otra parecía gustarle aquella cercanía, por lo que no se atrevía a alejarlo-. ¿Y bien? -Ahí estaba esa voz gruesa de nuevo. Seo Ho sintió una ligera corriente eléctrica pasar por todo su cuerpo, haciendo que se le erizará la piel.