Elección [RavnHo/LeeHo]

👤cuatro👤

El beso... ¿realmente sucedió o solo ha sido un producto de mi imaginación?

Seo Ho no dejaba de preguntarse aquello y, por ende, estaba muy distraído desde el viernes. Geon Hak había notado eso, pero lo entendía. Él se encontraba de la misma forma que el otro, estando enamorado de Seo Ho y el simple hecho de pensar en aquel beso... Provocaba que llegará a preguntarse si su amigo en verdad sentía lo mismo por él o si solo lo besó por estar bajo la influencia del alcohol.

Geon Hak vio al otro jugando con su almuerzo. El fin de semana pasó demasiado rápido para su gusto y, ahora, ambos se encontraban en la cafetería de la universidad.

-Gun Min -el de voz gruesa lo llamó por su antiguo nombre, pero, de igual forma, logró captar la atención del chico. Ya que este lo miró de forma atenta-, sobre lo que pasó el viernes...

-Ah, eso... -Seo Ho tragó pesado y humedeció sus labios, apartando la mirada de su mejor amigo para que no notará el rubor en sus mejillas-. Realmente no sé qué decir al respecto -confesó. No mentía, en todo el fin de semana estuvo buscando una excusa perfecta, pero, en realidad, no encontró nada que decir en su defensa-, supongo que te tomó por sorpresa.

-Sí... Mucho, más bien -Geon Hak estaba poniéndose nervioso de solo recordarlo, pero se sentía preparado. Iba a decirlo: diría la famosa frase. Aquella que había estado guardándose desde hace mucho, pero practicando con frecuencia-. Hay algo que quiero decirte. -Seo Ho lo miró nuevamente, su corazón latía rápido. Lo que lo llevaba a pensar que posiblemente Geon Hak podía escuchar aquellos latidos, aunque solo entreabrió su boca. Estaba preparándose para lo siguiente que diría, porque era obvio que, por fin, escucharía lo que Young Jo le había contado de la boca de su mejor amigo-. No es fácil para mí decirlo, pero... Lee Seo Ho, yo...

-¡Geon Hak! -La famosa voz de Keon Hee se escuchó desde la entrada del lugar y, por instinto, el nombrado volteó hasta encontrarse con el recién llegado.

-Lee Keon Hee -Kim suspiró con frustración luego de ver al chico, que tenía una amplia sonrisa en la cara y su celular en una oreja, acercarse hasta donde ellos se encontraban.

-Lo encontré, está en la cafetería con Seo Ho -los amigos no necesitaron preguntar, sabían que el recién llegado conversaba con Dong Ju-. Está bien, aquí estaré esperándote. Te quiero -Keon Hee guardó el celular en el bolsillo delantero de su mochila, luego de que su novio terminará con la llamada, y miró a los chicos en la mesa-. Hola.

-Hola -contestaron los otros a unísono, sintiéndose nerviosos por la recién llegada del menor.

-¿Estabas buscándome? -Interrogó Geon Hak, indicándole a Keon Hee que podía sentarse con ellos y olvidando por un momento que estaba a punto de decirle algo importante a Seo Ho.

-Sí, algo así -Keon Hee dejó su mochila en el piso, a un lado de donde acababa de sentarse, y entrecerró sus ojos. Tratando de recordar lo que el profesor Gong le había dicho-. Bueno, más bien, el profesor Gong me dijo que te dijera que fueras a su oficina.

-¿Te dijo para qué?

-Hay un chico nuevo, solo sé que es compañero de Dong Ju y creo que el profesor quiere que tú le muestres la escuela -Keon Hee se encogió de hombros y vio el almuerzo de Seo Ho, quien nuevamente estaba jugando con la comida-. Oye, ¿estás bien?

-Iré a verlo -Geon Hak se puso de pie, tomó una de las tiras de su mochila y la colgó sobre su hombro. El chico aclaró su garganta y vio a Seo Ho, quien seguía en silencio-. Hablaremos en el departamento, ¿está bien?

-Cla-Claro -Seo Ho quiso golpearse por haber tartamudeado. Geon Hak, por su parte, sonrió al oír su respuesta y el otro sintió como su respiración se entrecortaba. Viendo como su amigo salía de la cafetería sin decir algo más.