Elección [RavnHo/LeeHo]

👤once👤

Geon Hak se acabó su bebida y, una vez que el vaso estuvo vacío, le indicó al barman que volviera a llenárselo. El chico sabía que estaba mal estar ahí, ahogando sus penas con alcohol en aquel bar al que; curiosamente, había ido en compañía de Seo Ho el día de su cumpleaños.

Cerró los ojos por un momento, suspiró y comenzó a acariciar su frente. Estaba recordando lo que estuvo a punto de suceder esa noche con Seo Ho luego de que ambos regresaron a su departamento. Si tan solo no se hubiera dejado llevar, si no hubiera dejado que sus sentimientos lo dominarán desde el principio... Posiblemente ahora no estaría sufriendo.

-Aquí tienes -le dijo el hombre que estaba atendiendo la barra y quien le dedicó una mirada de lástima al ver el estado deplorable en la que el muchacho se encontraba.

-Gracias -murmuró, con completa pesadez.

-Dame lo mismo que le acabas de dar a él -comentó una chica a su lado. Geon Hak la miró, entrecerrando un poco sus ojos. La fémina le resultaba sumamente familiar y, hasta que vio su sonrisa, la reconoció: era la chica que le había hablado la vez anterior que estuvo ahí-. Es bueno verte otra vez.

-Sí, creo que... Puedo decir lo mismo -soltó una risa, hasta que esta fue haciéndose más baja y el gesto desapareció completamente de su rostro. Geon Hak miró la bebida que acababan de servirle y, en cuanto notó que el hombre le entregaba la misma bebida a la chica, alzó el vaso. La muchacha entendió y ambos chocaron ligeramente sus copas, tomando el contenido que estos tenían en cuestión de segundos-. ¿Vienes seguido por aquí?

-Últimamente, sí. ¿Es muy obvio? -Respondió con otra pregunta y le hizo una seña al barman, quien inmediatamente sirvió otro poco de la bebida que le dio con anterioridad.

-Iba a decir que no y que era mucha casualidad que volviéramos a encontrarnos, pero... Parece que estaba en lo cierto. De que vienes aquí continuamente -aclaró. Ambos volvieron a reír y, antes de tomarse nuevamente el contenido de su vaso, la chica se atrevió a hacerle una pregunta.

-¿Qué hay de ti? Parece que quieres olvidarte de alguien. Lo digo por el montón de alcohol que has estado tomando desde hace rato -vacío todo el líquido en su boca; tomándolo poco a poco, y Geon Hak solo bajó la mirada-. Lo siento, quizá no debí preguntar. Olvida que lo dije.

-Está bien -humedeció sus labios y, una vez dejó la copa a un lado, entrelazó sus propias manos sobre la barra-, creo que también es muy evidente que quiero olvidar a alguien que... Significa mucho para mí.

-Es el chico de la otra vez, ¿no?

-¿Cómo lo...?

-No había notado al principio que lo eras. Sin embargo, luego de ver lo que hiciste cuando él decidió irse... Eso fue suficiente para darme cuenta de que eres gay -hizo una sonrisa de lado y, al igual que el chico, dejó el vaso a un lado-. ¿Y bien? ¿Qué tienes en mente para poder distraerte?

-Nada, realmente no tengo un plan -confesó, sintiéndose más patético que antes.

-Escucha, creo que por ahora será mejor que dejes de embriagarte. Estás demasiado borracho como para andar por tu cuenta, así que te llevaré a casa en mi auto. Será más seguro si yo conduzco, no he tomado tanto como tú -bromeó. La chica dejó algo de dinero en la barra, pagando lo que ambos habían consumido, y ayudó a Geon Hak a ponerse de pie. Dirigiéndose ambos; aunque él con algo de dificultad, a la salida del local-, ¿dónde vives?

-No, no quiero ir ahí -murmuró y entró al asiento del copiloto con ayuda de la muchacha-. Él también vive ahí y... No quiero verlo, quiero hacerle creer que lo odio, aunque evidentemente me tiene loco y estoy actuando como un completo imbécil por ignorarlo -comentó, a lo que ella hizo una mueca y exhaló.