Capítulo dos: Io non sono solo.

5K 500 672
                                    


Ser novio de ChanYeol tenía ciertos beneficios que adquirió dando el sí. En un principio creyó que conocía bien al más alto, ahora se daba cuenta que eso no era más que un espejismo. No conocía nada al verdadero ChanYeol, bueno, tampoco nada, pero ahora sí podía decir que lo conocía mejor que antes ¿estaba siendo muy enrededado? A veces tenía problemas para coordinar correctamente sus pensamientos, pero lo que quería decir es que ser novio de ChanYeol era lo mejor del mundo.

Y es que ahora su dinámica también era distinta, ya no solo se quedaban estudiando en la biblioteca sino que directamente buscaban un lugar donde besarse y charlar. ChanYeol lo trataba tan bien, era tan dulce, tan amoroso, nunca se había sentido así incluso si antes lo hacía sentir bien.

―Tengo que ir a casa. –dijo ChanYeol después de un largo beso, tenía sus piernas recostadas sobre los muslos del más alto tratando de encontrar una pose más cómoda, ya que el asiento era bastante incómodo y empezaba a hacer frío. ChanYeol calentaba sus manos con las propias, haciendo fricción, pero necesitaba más.

―¿Por qué? –preguntó haciendo pucheros, ChanYeol sonrió para luego darle otro besito.

―Tengo tarea que hacer, si me quedó nunca la terminaré con eso. –ChanYeol se puso de pie y lo obligó a hacer lo mismo, abrazando su pequeño cuerpo para mantenerlo caliente.

―¿Puedo ir contigo? –preguntó, podían llamarlo patético o lo que quisieran, pero quería pasar todo su tiempo con ChanYeol por alguna razón, le costaba mucho despedirse de él en las tardes así que se pasaban todo el tiempo separados hablando por teléfono y solo llevaban tres meses de noviazgo, temía terminar cansando a ChanYeol.

―¿Quieres ir conmigo? –asintió, ―Pero te aburrirás, amor. –negó con insistencia, envolviendo su cuerpo con sus brazos pequeños.

―No importa, no quiero llegar a casa ya. –ChanYeol asintió dándole otro besito cuidando no pasar a llevar sus lentes.

―Bien, vamos, creo que mamá me dejó algo de sopa.

Caminaron tomados de las manos como acostumbraban a hacer, aun había miradas indiscretas, pero aprendieron a ignorarlo. Tenía que admitir que recibió muchos mensajes de odio por parte de los interesados en su novio, ya que en un principio se había jactado de no tener nada con ChanYeol ahora eran pareja, por eso le dejaban mensajes hirientes en sus cosas o en sus redes sociales de forma anónima y algunos no tanto. Se sentía avergonzado pero realmente no había esperado iniciar una relación con ChanYeol.

Por supuesto que no se arrepentía ni terminaría con él solo por eso, pero sentía un poco de bochorno por sus anteriores palabras, pero lo olvidaba rápidamente cuando ChanYeol lo besaba y mimaba como solo él sabía hacerlo, solo quedaba decir Upsi.

Y ahora después de una recomponedora siesta en la cama de su novio mientras éste terminaba su tarea se sentía divino, sus ojos aún se sentían pesados, pero mientras miraba el perfil de ChanYeol frete al escritorio no dejaba de pensar en lo afortunado que era de tener a alguien así.

ChanYeol le sonrió cuando lo vio despierto para luego volver a sentarse, él en cambio se puso de pie para inspeccionar la habitación de su novio, deteniéndose específicamente en el anuario de su ChanYeol. Se rio un poco al ver sus fotos, no estaban en su mejor momento, pero pasada la risa un sentimiento un poco amargo lo envolvió.

―Amor ¿por qué eras un cretino conmigo en la escuela? –preguntó tomando asiento sobre la cama, ChanYeol dejó de ver su computador para mirarlo directamente, parecía tan interesado que hasta se enderezó para mirarlo bien.

―¿Yo cretino? –contratacó ChanYeol sorprendiéndolo por la forma en que parecía indignado.

―Sí, siempre eras grosero conmigo. –explicó mientras movía exageradamente los brazos recordando cada una de las veces que ChanYeol fue un verdadero bastardo con él.

Non Ti Lascerò |ChanBaek|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora