psychologist [hood au]

Calum.

Estaba sentada en la vereda esperando a que Calum apareciera, habíamos hablado y todo iba a estar como siempre, así que decidimos juntarnos en el lugar que nos conocimos y ahí estaba yo, a una hora de entrar al psicólogo y el todavía no aparecía. Termino el tercer cigarrillo y cuando voy a prender el cuarto dos manos tapan mis ojos.

-¿Quién soy? - Calum trata de hacer una voz muy aguda, la cual no le sale bien y es bastante graciosa, por lo que empieza a reírse el solo y me destapa los ojos. Después de eso se sienta al lado mío y me saca el cigarrillo de la mano - Es malo esto, nena. No podes fumar - Dice mientras que me pone el cigarrillo bien en frente de la cara y después saca un encendedor de su bolsillo y enciende el cigarrilo. Lo miro mal - ¿Qué? Me preocupo por vos.

-No, solamente no tenes plata para comprar tus propios cigarrillos - Ojala no me haya sonrojado porque en serio que iba a quedar muy mal.

-Te los voy a devolver, ya sabes.

-Si, cuando Justin Bieber declare su amor por mí.

-¡Mañana te casas! - Grita Calum y escondó mi cara en mis manos mientras que el se rie. Esta haciendo el ridículo en la mitad de la calle.

-Callate la gente nos empieza a mirar.

-¿Qué pensas hacer lo que resta de las vacaciones?

-No se, quizá, vacacionar - Dije obvia y el solo rio. No sé lo que le pasaba hoy, pero no paraba de reir, y me ponía nerviosa.

-Tonta, te estoy preguntando si te vas de vacaciones a alguna parte.

-No si todavía no me dan el alta, aunque tampoco tengo ganas de irme a algún lugar.

-Entonces estamos iguales, podemos pasar las vacaciones juntas.

-¿Juntas? - Empiezo a reirme a carcajadas, no puedo creer que haya dicho.

-¡Deja de reírte! - Dice después de un rato en el que yo no pude parar de reirme - ¡Solo me equivoque!

-Calum, no sabía que eras mujer.

-Creo que sabes perfectamente que soy un varon - Y se a lo que se refiere, entonces me quedo callada y solamente miro para adelante sacando un cigarrillo de la caja. No puedo hablarle y mucho menos mirarlo, creo que en este momento esta sonriendo sabiendo de que había ganando la contienda. Pero en serio eso me había puesto muy nerviosa.

-Solo... No hablemos de eso...

-En algún momento vamos a tener que hablar. Nos besamos - Dice de golpe y bien duro, entonces no sé que responder a eso, así que sacó mi celular y me fijo en la hora que es.

-Tengo que irme, ya es tiempo de entrar - Le doy una última calada al cigarrillo y aunque no me lo haya terminado no puedo estar más en ese lugar, entonces lo tiro y empiezo a caminar. Siento que el me esta siguiendo.

-Mentira. Todavía falta media hora.

-Woodgate me dijo que vaya antes esta vez, porque, porque tiene que hacer algo - Digo lo primero que se me viene a la cabeza y empiezo a caminar todavía más rápido, quien diría que estas dos cuadras se harían infinitas. Miro para atrás después de dar un par pasos y veo como Calum sigue atrás mío. El camina más rápido y me agarra la mano, apretándola bien y sigue caminando conmigo de la mano.

No sé que significa ese gesto, pero espero que no note que tengo la piel de gallina. Llegamos a la puerta del edificio y me paro, lo miro y el ya me estaba mirando, muy fijamente. No tenía ninguna expresión en su rostro.

-Bueno, nos vemos después - Digo después de un rato de silencio puro, en el cual el no dejo de mirarme. Trato de soltarle la mano pero me agarra más fuerte todavía, impidiéndome que me vaya.

-Falta a la sesión. Veni conmigo. Quiero estar con vos.

-No puedo, Calum. Si falto una vez más el llamará a mi mamá y s enterara de las otras dos veces en la cual me escape. Vos mismo me lo dijiste.

-No me importa lo que dije - Dice y sacude un poco su cabeza haciendo que su pelo se despeine un poco más de lo que ya estaba - Quiero que vengas conmigo.

-No, Calum.

-Por favor.

Trato de sacarle la mano pero el es más fuerte y en ese instante se acercó mucho a mí. Demasiado. Mi respiración empezó a estar bastante agitada, y espero que no se dé cuenta, lo cual es imposible, porque estábamos tan cerca que mi nariz tocaba la suya y podía sentir mi aliento y yo el de él. No puedo ni mirar la hora, pero seguramente ya solo faltaban quince minutos para que empezara mi sesión.

-Estoy llegando tarde, Cal - Digo suavemente y casi susurrando. El suelta un poco mi mano, pero no me muevo para irme adentro del edificio, sino que me quedó ahí, mirándole todas las facetas de su cara. Enamorándome todavía más de él.

-Quiero besarte - El también susurra y con la mano que no sostiene mi mano empieza a acariciar mi cintura, haciéndome sentir todavía más nerviosa. Pierdo el aliento al escuchar sus palabras y no sé que decir, así que solamente seguí mirándolo - ¿Puedo hacerlo?

En serio quería besarlo, vivía con las ganas de hacerlo. Me acuerdo de la otra vez, sus labios eran una de las mejores cosas que alguien haya probado en la vida. Pero no podía, no quería que esto fuese así, yo quería que Calum sintiera algo por mí, no solamente que me tuviese ganas. Quería un sentimiento de él hacía mí, y no iba a tenerlo.

Juro arrepentirme por las próximas palabras pronunciadas.

-Los amigos no se besan, Calum - Fue lo único que dije y me alejé de él, entrando al edificio sin mirar atrás. Me declaro un idiota.