Capítulo 8

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Segundo día.

La misma rutina, solo faltaba un día para que Jimin llegará y todo volviera a la normalidad.

¿Extrañaba sus polvos nocturnos? sería mentira decir que sí cuando la verdad no se acordaba de ellos, pues el mocoso no le daba tiempo para descansar y pensar en algo más que no fuese él.

Baemin solo era un niño y no se daba cuenta de lo agotado que tenía a su padre, extrañaba mucho a Jimin, aunque se divertía con Jungkook y su inexperiencia él no cambiaba los besos que le podía dar a Jimin.

Jungkook había recibido mensajes de más de una persona invitándolo a follar pero no había aceptado a ninguna, no por el mocoso, no porque quería empezar a ser le fiel a Jimin sino porque no tenía ganas ni energía.

Se sorprendió al escuchar el timbre tocar y pensó que podía ser Jimin pero al abrir la puerta se encontró con Hoseok.

-¿Qué haces aquí?-. Preguntó Jungkook con tono cansado.

-No deberías recibir así a tu hermano-. Hoseok entró al departamento buscando a alguien- ¿Y Jimin? ¿Se cansó de ti y se fue?-. Preguntó burlesco.

-Ja, aún no me hace ese favor, solo esta cuidado a su madre enferma-. Respondió el peli negro.

Hoseok lo miró en forma recriminatoria. -No deberías decir eso Jungkook-

El menor solo se encogió de hombros restándole importancia. –Tú sabes que lo que menos me importa en esta vida es Jimin, no deberías sorprenderte de cómo me dirija a él-

-Claro Jungkook, lo que digas-. Dijo el mayor mientras se sentaba en el cómodo sillón. -Pero cuando Jimin ya no te quiera dar ni la hora, no te quejes. Te estás perdiendo un hermoso chico-

-Hyung, si viniste para hablar de Jimin pierdes tu tiempo-

-Ahh Jungkook, solo venía a decirte que en dos semanas más celebrare mi cuarto aniversario con Yoongi, y claro, tú y Jimin están invitados-

-Está bien, ¿Te molesta que Jimin lleve al mocoso?-

-Claro que no-. Dijo Hoseok rápidamente. -Y hablando de Minnie, ¿Dónde está? ¿Se fue con Jimin?-

-Por desgracia no, lo tengo que cuidar. Ahora está durmiendo-. Dijo Jungkook mientras recogía unos juguetes del bebé y los dejaba en una caja.

-Debe darte muchos problemas-. Dijo Hoseok. -Es igual de inquieto que tu cuando eras un niño-

-Yo era un pan de Dios-. Se defendió Jungkook. -Es muy inquieto pero muy inteligente créeme que me llama Jungkook el muy irrespetuoso, además cree que lo sabe todo, le gusta pelear conmigo Hobbi-

-Vaya, y todo eso lo supiste al cuidarlo un día-. Hoseok lo miraba con una sonrisa mientras ayudaba a su hermano a ordenar los juguetes de su sobrino.

-Que puedo decir, es un niño muy expresivo-

Hoseok solo lo miraba con una sonrisa pues su hermano seguía hablando de las cosas que había hecho su sobrino durante esos días, hasta le mostró fotos del pequeño. Hoseok se dio cuenta de cómo los ojos de su hermano brillaban al contar cosas tan simples que hacia Baemin como comer una galleta hasta como el color de sus mejillas cambiaba cuando veía sus caricaturas favoritas.

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Historia de un amor (Jikook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora