Historia de un amor (Jikook)

Capítulo 19

Jimin preparaba la cena moviéndose por toda la cocina mientras tenía a su hijo jugando en el living con la televisión encendida.

La puerta del departamento se abrió dejando ver a un cansado Jungkook.

-Unkuk... Unkuk-. Baemin gateaba hacia él, arrastrando a Iron Man.

-Que soy tu padre-. Jungkook se acercó al niño y lo alzó en brazos. -¿Dónde está tu papi?-

-Tocina-. Dijo señalando la cocina mientras metía el peluche en su boca.

Jungkook ingresó al lugar con su hijo en brazos. Jimin aún no se daba cuenta que había llegado por lo que seguía tarareando una canción.

-Papi, Unkuk leló-. Gritó Baemin.

Jimin se giró y sus ojos brillaron al ver aquella escena. -Llegaste muy temprano, Kookie-. Dijo Jimin mientras se acercaba dudando.

Desde el living, Baemin escucho la melodía de sus caricaturas favoritas. -Unkuk-

Jungkook lo llevó a la sala de estar para luego volver y encontrarse frente a frente con su esposo, quien traía puesto un delantal de cocina para no arruinar sus prendas. Jungkook lo acercó a él y lo besó siendo correspondido de inmediato.

-Volviste temprano-. Jimin intentó separarse pero Jungkook no se lo permitió ya que lo tomó de la cintura con fuerza.

-Terminé el trabajo temprano-. Susurró el peli negro con la vista fija en los labios de Jimin.

-Creí que saldrías con Seokjin a divertirte, es viernes-

-Pues... no tenía ganas de salir-. Besó a Jimin fugazmente mientras tomaba una bocanada de aire. -Además, estar en casa tampoco es malo y más si te tengo a ti-. Jungkook apretó el trasero de Jimin y este saltó por el repentino gesto.

-Pervertido-. Los ojos de Jimin desaparecieron por la risa y al mismo tiempo movió su cuerpo en forma coqueta.

-Pues no tengas un cuerpo tan hermosamente perfecto-. Dijo susurrándole en el oído y depositando un casto beso en el lugar.

Jungkook se separó de Jimin y luego le dió una nalgada.

-Se te quema la comida, bonito-. Jungkook soltó en forma burlona. -Me avisas cuando todo esté listo-

Jimin sonrió de forma tonta. "Bonito", y vaya que se sentía bonito. Se dió vuelta y gracias a Dios la comida no se había quemado.

🐰🐰

Jungkook caminaba dispuesto a cambiarse de ropa. Joder, así no era él pero no pudo controlar su lengua al ver al chico reír y hacer esos gestos tan provocativos, tiernos y lindos.

Había llegado temprano a casa. No quería salir porque ya no veía de su departamento un lugar del cual escapar sino un lugar donde solo podía encontrar cosas buenas.

-Unkuk, ven-. Baemin lo llamaba tratando de bajarse del sillón.

Jungkook llegó antes de que Baemi. pudiera caerse. -¿Qué pasa?-

-Jega con Minie-. Dijo mientras mordía a su nueva víctima: Hulk.

-Tengo que cambiarme de ropa, después juego con Baemin-. Jungkook explicó mientras lo dejaba en el sillón nuevamente.

A Baemin se le formo un puchero en su rostro. -Unkuk malo-

Jungkook suspiró mientras se sacaba el saco, arremangaba las mangas de su camisa, y sacaba la corbata. -Solo si yo utilizo a Iron man-

Baemin rió mientras le entregaba la figura de Iron man a Jungkook y él tomaba a Flash. -Yo con lojo-. Dijo señalandolo.

-Se llama Flash, Baemin-. Dijo Jungkook riendo.

-Fash-. Imitó el niño mientras tomaba al súper héroe. -Te lamas Fash-

Jungkook soltó una carcajada y comenzó a jugar con su hijo olvidándose de todo a su alrededor hasta que Jimin los llamó a cenar.

"¡Wow! El tiempo vuelva cuando te diviertes"

Y vaya que era cierto. Baemin no quería cenar solo jugar con su padre.

-Papi, Unkuk dijo que se lama Fash-. Baemin mostró la figura haciendo reír a Jimin y Jungkook. El peli negro miró a su esposo y puso su mano sobre la de él, acariciando su anillo de matrimonio.

🐶🐶

Seokjin miraba dar clase a Namjoon a través de la ventana. Gracias a Yoongi había descubierto su lugar de trabajo y ya se había inscrito a clases de danza.

Seokjin entró al notar que la clase había terminado. -Hola, Namjoon-

-¿Qué haces aquí, Seokjin?-. Dijo Namjoon mirándolo mientras bebía agua de su botella.

-Te acuerdas de mi nombre, que lindo-. Dijo Seokjin sin ocultar su alegría.

-No es muy difícil de recordar-. Namjoon comenzó a ordenar sus cosas. -No respondiste a mi pregunta-

-Vine a ver a mi futuro profesor de canto-. Y novio agregó en su mente el peli castaño.

-¿Te inscribiste a mis clases?-. Namjoon cerró su bolso.

-Sip-. Seokjin le dio una sonrisa.

-¿Qué ganas con todo esto?-. Namjoon lo miraba fijamente mientras una mueca de confusión se formaba en su rostro.

-Aprender a cantar-. Soltó con simpleza para luego mirar a los lados viendo si había alguien.

Seokjin miró a Namjoon frente a él e hizo un puchero. Se acercó y le dio un casto beso en los labios para luego irse.

-Me gusta la miel pero prefiero el durazno-. Gritó Seokjin refiriéndose al bálsamo labial de Nam para luego desaparecer por el pasillo.

-Pero que mier...-. Namjoon tocó sus labios y su ceño se frunció, ese chico no tenía derecho a besarlo pero aun así sus labios eran cálidos y suaves. No Namjoon, piensa en tu Mochi aunque en ese momento le fuese imposible.

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