No tan Uchiha // Tobirama

826 42 8
                                    

El albino miraba con recelo a la chica de cabello negro ¿Cómo es que su hermano dejaba que aquella Uchiha frecuente sin vergüenza la torre del Hokage? A sus ojos, era una completa barbaridad.

Mai: Hokage-sama, la misión fue completada con éxito- dijo la mujer mientras hacía una reverencia.

Hashirama: Estás herida- informó al ver la sangre salir de la ceja de la chica.

Mai: Estoy bien es solo un rasguño Hokage-sama- la mujer le sonrío con aquella tonta sonrisa de siempre.

Hashirama: ve a curar tus heridas Mai, luego puedes terminar de dar el reporte- el castaño le sonrió alegre y ella se sonrojó un poco.

Mai: gracias Hokage-sama- la chica se fue del despacho no sin antes hacer otra reverencia.

Tobirama: tks...que molesta- dijo en un susurro, su mayor lo miró con desaprobación.

Hashirama: deberías tomarte el tiempo de conocerla, no es igual que los demás miembros de su clan, ella es gentil y siempre está dispuesta a ayudar a la aldea- el peli blanco puso los ojos en blanco- hasta mi esposa la adora y conoces su carácter con las personas- el castaño sonrío un poco y suspiró cansado- hazme un favor y espera a que vuelva para darte el reporte, iré a ver a mí esposa- el Senju menor asintió desganado, su cuñada estaba embarazada por lo que cada 2 o 3 horas su hermano iba a verla para checar que todo esté bien.

Tobirama: no tardes, no quiero ver el rostro de esa chica- dijo con fastidió, su mayor salió por la puerta.

Pasaron los minutos y dos golpes se escucharon en la puerta.

Tobirama: Adelante- dijo con su imponente voz, la azabache entró e hizo una reverencia- bien, el reporte.

Mai: La misión fue un éxito, no hubo bajas y los pergaminos fueron entregados un día antes a lo acordado- la chica poso sutilmente una mano en su costillas- asesinamos a 3 ninjas de la roca quienes nos atacaron en el camino, eso es todo- la mirada del albino estaba fija en la mano de la chica- ¿Puedo retirarme?- preguntó cortésmente.

Tobirama: qué te sucedió?- la mujer se puso algo nerviosa y suspiró.

Mai: es un Jutsu prohibido, estaré bien, solo es un golpe- el albino se levantó de su asiento y fue hasta ella.

Tobirama: Siéntate, iré por un médico- la chica se interpuso en su camino con el ceño fruncido.

Mai: el dolor me enseñará a no ser tan confiada en el campo de batalla- su voz sonó dura, ahora era la Uchiha que debía ser- Gracias pero puedo curarme sola- la chica giró su cuerpo y se fue de la oficina, dejando al peli blanco algo confundido.

Los días pasaron y no habían rastros de la muchacha, ya no frecuentaba en persona la torre sino que enviaba a sus hombres con los mensajes.

Hashirama: dime Tobirama ¿Le dijiste algo a Mai cuando te entregó el reporte?- el hombre negó ofendido por la pregunta de su hermano.

Tobirama: no, ella solo se fue- dijo mirando la puerta que fue golpeada

Hashirama: Adelante- dijo y un chico del Clan Uchiha pasó haciendo una reverencia- buen día- dijo y acepto el pergamino que esté le entregaba.

Chico: Es un mensaje de la señorita Mai- dijo haciendo una reverencia.

Hashirama: dime ¿sucede algo con ella?- el chico se tenso un poco quedándose mudo

Chico: Hokage-sama, no creo que sea correcto darle información que no me pertenece- el castaño suspiró.

Tobirama: responde la pregunta o te asesinare ahora mismo- el chico se asustó por la declaración del albino quien se acercaba a paso lento hacía él.

Chico: señor Tobirama, entienda yo...- un pequeño cuerpo se poso frente al chico asustado, los presentes reconocieron al instante de quién se trataba.

Mai: entiendo que odies a mi Clan- los ojos de la muchacha estaban rojos- pero si vuelves a amenazar a alguno de mis camaradas tendremos serios problemas Senju Tobirama- el hombre retrocedió y la muchacha se calmó- Hokage-sama, lamento la ausencia, me encontraba recuperandome de mis heridas- el castaño asintió y fue hasta la mujer con una sonrisa.

Hashirama: tranquila Mai, no hay problema pero a la próxima procura descansar al 100% y dejale tu trabajo a alguien más- la muchacha asintió.

Chico: señorita Mai, puedo retirarme?- preguntó el chico a sus espaldas.

Mai: sí, gracias por la ayuda- el chico asintió sonrojado- oh y recuerda nuestra práctica de ésta tarde, si llegas tarde como ayer me veré forzada a quitarte del programa- el ceño de la chica estaba marcado, el joven tragó saliva pálido, puesto a que la mujer le daba más miedo que cualquier otro miembro del clan o incluso de la aldea.

Chico: s-s-si Mai-sensei- la mujer sonrío y el muchacho se retiró no sin antes despedirse del Hokage.

Hashirama: vaya, en verdad te tienen miedo- dijo sorprendido.

Mai: ese niño solía ser todo un fracaso- suspiraste recordando aquellos tiempos- y ahora es los mejores hombres que la división puede llegar a tener- una sonrisa cruzo su rostro, el albino la miraba desde el otro lado de la habitación.

Hashirama: no me cabe duda de que  tu clan tiene los mejores Shinobis de la aldea- la mujer puso una mano en su nuca- oh Tobirama podrías ocupar mí lugar un momento?- el albino asintió, la puerta de la oficina se abrió dejando ver a otro miembro del clan entrar- Madara amigo!- dijo el castaño, la azabache miró a otra parte, algo que el albino notó.

Madara: Hashirama- saludó a su amigo serio-  Mai, te estuve buscando por toda la aldea.

Mai: Madara-san, lo lamento pero me encontraba haciendo mí trabajo- ambos se miraron, el mayor se acercó hasta la mujer y sonrío, algo que desconcertó a los hermanos Senju.

Madara: me preguntaba si te gustaría pasear está tarde conmigo- la azabache miró a otra parte, buscando una escusa.

Mai: lo lamento Madara-san pero tengo que...- su imaginación no lograba crear algun acontecimiento nuevo que no le permita ir a pasear con él.

Tobirama: tiene que trabajar conmigo ésta tarde- dijo el albino a espaldas de la mujer, el azabache lo miró serio y luego a la mujer de su clan.

Mai: así es...casi lo olvido- la mujer sonrío y el Uchiha asintió

Madara: entiendo, espero que pueda en otra ocasión- el Azabache se retiró de la habitación.

Hashirama: me alegra saber que trabajarán juntos- dijo el castaño sonriente, la mujer alzó una ceja pero no dijo nada, el Hokage parecía ser bastante tonto o inocente, el albino y la azabache quedaron solos en la habitación.

Tobirama: es el miembro más fuerte de tu clan- dijo el hombre, la mujer lo miró sin entender- Madara...si ustedes salen sus hijos serían la próxima generación más fuerte...- fue interrumpido por una risa de la mujer

Mai: no quiero niños fuertes, quiero niños que puedan ser amados...y Madara no me dará eso, se asegurará que nuestros hijos sean máquinas ninjas...- la mujer suspiró- mí padre fue muy estricto conmigo, no tuve amigos hasta los 13 años, solo era entrenar y entrenar... Estoy segura que mis descendientes serán fuertes y capaces, pero si se crían entrenando y odiando a su padre serán igual que algunos miembros de mí clan... El odio del que tú hablas es real- el albino asintió y se acercó más a ella.

Tobirama: entonces acepta salir conmigo ésta tarde- la Azabache levanto su vista al escuchar las palabras del hombre- odie a mí padre por como nos trató a mí y a mis hermanos y juré no ser como él...

Mai: pero tu odias a mí clan- respondió en un susurro

Tobirama: tu no eres como tu clan- la mujer se sonrojo y miro a otra parte

Mai: de acuerdo Senju Tobirama, tendrás el placer de salir conmigo- el albino sonrío y negó divertido.

Tal vez aquella chica no era tan Uchiha después de todo....

⭐ Naruto OS y Escenarios ⭐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora