🌈 Situación 🌈 (parte 2)

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Volver a Konoha no era algo que realmente estuviera en tus planes, tu venganza había culminado 1 año después de tu partida pero...no estabas lista para enfrentar a tu familia por lo que estuviste prácticamente un año y medio vagando por todo el mundo ninja, ayudando un poco en cada parte y vengando a aquellos que no podian vengarse solos...y gracias a ello recibiste el apodo del Ángel caído, la Kunoichi que las naciones, los renegados e incluso alguno que otro Kage temía...

Pero aquello fue dejado de lado en cuanto supiste que tu madre, tu amada madre estaba enferma de gravedad, emprendiste un viaje a la aldea que solo te tomo 2 días y medio, ni siquiera descansaste por temor a que fuera demasiado tarde...

Podrías serlo todo pero no una mala hija, ningún Jonin, Chunin, Genin o incluso Kage te detendria de acompañar a tu madre durante una enfermedad.

Naruto Uzumaki

El rubio sintio tu chakra desde lo lejos ¿Cómo? Fácil, se había enfrentado a ti en un intento de devolverte a la aldea pero se dio cuenta enseguida de que tu no eras Sasuke, eras fuerte y decidida, ni siquiera con la ayuda de Kira había podido lograrlo...

Decidió esperar en la puerta de la aldea a por ti, una ráfaga de viento golpeó suavemente el rostro del hombre y apareciste justo frente a él, unos 3 metros los separaban.

Naruto: Mei...- dijo por lo bajo, ambos estaban serios, sacaste la capucha de tu cabeza, tu rojizo cabello estaba por tus hombros, tenías una larga cicatriz que iba de tu ceja a tu mejilla en tu lado derecho del rostro.

Mei: solo quiero ver a mí madre, luego me iré nuevamente- el rubio bajo la mirada- tío Sasuke, no necesitas cuidar la espalda del Hokage, no vengo buscando pelea, solo quiero ver a mí madre- llevaste tus manos hasta la capa y dejaste ver a los hombres que no llevabas ningún arma.

Sasuke: solo por si acaso- dijo el azabache saliendo de las sombras- veo que dejaste de ser una enana- intento bromear pero nadie río, ni siquiera un gesto, la luna estaba en su máximo esplendor, la calles de la aldea parecían vacías...

Naruto: andando- dijo y se giró para comenzar a caminar, nadie dijo nada pero la cabeza del rubio maquinaba mil ideas de cómo lograr que te quedarás en casa, sabía que no lo lograría de todas formas pero...al menos quería intentarlo...

Sasuke: que te sucedió en el ojo?- pregunto el azabache a su sobrina, la joven lo miró de reojo, en verdad estaba mas grande, incluso parecía más madura, aquella niña que alguna vez conocieron ya no estaba...

Mei: luche contra una invocación- el rubio presto atención a la charla- digamos que la más fuerte de su clase- puso su mano sobre la cicatriz- intenté curarlo con Ninjutsu pero no soy muy buena que digamos- sonrío un poco pero se puso sería al instante

Sasuke: podemos decirle s Sakura que lo arregle- la joven negó

Mei: no es necesario- saco la mano de su rostro- me gusta así, significa algo para mi- el azabache asintió y miro al frente

Llegaron al hospital, lugar donde estaba tu madre, entraron silenciosamente, tu padre abrió la puerta para ti y te adentraste, tus hermanos estaban ahí, Kawaki también pero se encontraban durmiendo.

Tu madre...estaba pálida, te acercaste para tomar su mano con cuidado, sentiste tus ojos picar, querías llorar, su cabell estaba largo, solías decirle que lo dejara crecer y que lo trenzarias por ella...

Hinata: Mei...- dijo dormida, apretaste un poco su mano y abrió los ojos lentamente, sus hermosos ojos perlados se llenaron de lágrimas, apretó tu mano un poco más fuerte intentando corroborar que aquella niña si era su pequeña- Mei?- asentiste y dejaste caer una lágrima, estás feliz de poder verla, te había hecho mucha falta su compañía.

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