Oɴᴇ Sʜᴏᴛs ♡ ʟᴀ ᴄᴏᴛᴏʀʀɪsᴀ

👵🏻One Shot-Ricardito-baby +18👵🏻

Imagina que por tu cumpleaños Ricardo te hace un Show privado...

Por fin en casa, después de las mejores vacaciones de mi vida, no solo porque haya ido con mis mejores amigas si no también porque fui a Vegas, sin duda alguna el mejor cumpleaños, claro, el cumpleaños 18 debe ser inolvidable.

Tomó las llaves de mi bolso y así abrir la puerta y entrar con mi maleta, lo primero que me recibe fue un gran grito de Feliz cumpleaños por parte de toda mi familia.

Después de abrazos, felicitaciones por parte de mis familiares y amigos, comer y partir el pastel llegó la hora de la fiesta, ya todos estaban bebiendo y yo aburriéndome, hasta que llego la hora de la última sorpresa. Realmente pensé que este cumpleaños no podía ser mejor hasta que mi madre me reveló la sorpresa, había contratado a los comediantes que tanto veíamos mis hermanas y yo, no lo podía creer eran Ricardo y Slobo. Ricardo ese hombre que con tan solo escuchar su nombre hace que mis pantis se empapen, estaba justo enfrente de mi, tan cerca, que me fue imposible no coquetearle durante toda su rutina, y él lo noto, era tan obvio su nerviosismo, y eso hacia que me encantará más. Después del magnífico show que ambos dieron, se preparaban para ya marcharse, hasta que inesperadamente Ricardo se acercó a mí preguntando por el baño, y yo servicial lo guíe hasta el baño de mi habitación, no iba a desaprovechar esta oportunidad.

En cuanto nos adentramos a mi recamara le señale dónde era el baño y el de inmediato entro mientas yo me desnudaba por completo, en cuanto el salió me miro con los ojos bien abiertos mientras yo me acostaba en la cama y me abría de piernas solo para el, mientras el no se movía ni un milímetro que tal vez ni  respiraba.

— ¿Qué no me vas a venir a co*jer?—

— No... No... Digo si.— a duras penas termino de hablar y se lanzo encima mío, directo a besarme como nunca nadie me había besado antes, todo esto mientras se desabrochaba el pantalón, ya con el pantalón en las rodillas me tomo de las caderas para después darme la vuelta y así dejarme en 4 y seguido me dio una fuerte nalgada que seguro dejaría su mano marcada por días.
— Fuiste una niña tan mala. Todo él día estuviste enseñándome ese trasero y yo no podía hacer nada pero ahora si.— dijo para luego volver a estampar su mano varias veces contra mi trasero, sin piedad alguna, y yo no podía hacer nada por todo el placer que me tenía segada, estaba tan mojada y desesperada por él, por qué se enterrará en mí.

— ¿Quieres que te co*ja? — pareció leerme los pensamientos.

— S-si, mue- muero por qué lo hagas — apenas y pude articular.

— Bueno, pues... Tendrás que esperar...

hasta el próximo capítulo deeee " El show privado, con Ricardo Pérez...

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