Amistades/Duelos

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El joven sentía alegría y alivio de que la primera persona que conocía y sabía de su naturaleza no le tuviera miedo, pero aún así tenía el sentimiento de impotencia aún latente dentro de él

-Eso es todo lo que querías hablar conmigo?- preguntó la pelinegra

-Eh, sí gracias- respondió

-Bueno entonces me voy- continuó Juleka

-Espera, fue por mí que te quedaste; déjame reparar ese error- dijo tomando su celular

-Qué harás?- preguntó

-Te pediré un Uber- contestó

-No es necesario- negó la chica

-Insisto- dijo usando la app para solicitar uno

-Listo, ya viene para acá- dijo volteando dándole la espalda a la joven para dejar su celular

-No había notado tu tatuaje. Que es?- preguntó

-Oh eso, no es un tatuaje- murmuró

-Entonces?- siguió

-Bueno cómo sabes mi secreto no veo inconveniente en que lo sepas y será una buena forma de matar el tiempo en lo que esperamos- inició y se quitó la camiseta sonrojando a la Couffaine

-Esta marca es el signo de la bestia y podría decirse que es lo que identifica a alguien como zoantropo y varía según el animal en qué te transformes- explicó

-Vaya- murmuró la joven y Kenji se colocó la camiseta de nuevo

-Si, hay cosas que tampoco entiendo mucho pero ya no es necesario que me preocupe de eso- dijo tranquilo y el transporte llegó

-Bueno ya llegó el Uber, vamos- cambió el tema

-Me vas a acompañar?- preguntó la pelinegra

-Claro, aunque sea un servicio en su mayoría confiable no quiero que por mi culpa te ocurra algo- respondió y ambos fueron al auto, le dieron la dirección a la que iban

-Gracias por todo- comentó Juleka bajando del auto

-Gracias a ustedes por visitarme, fue un buen cambio para variar- dijo también bajando del auto y la acompañó hasta el río Sena y dejarla frente al barco

-Alto ahí maleante- dijo una señora alumbrando con un faro a Kenji que se deslumbró

-Mamá! Disculpala, ella es mi mamá- gritó y pidió perdón apenada

-Quién eres y que quieres con mi hija?- preguntó sobre protectoramente

-Disculpe, solo la acompañé a su hogar. Me llamo Kenji Ogami y soy nuevo en la ciudad- dijo y se presentó

-Entiendo, gracias joven- dijo cambiando su actitud

-Bueno, nos vemos en clases- se despidió Kenji y comenzó a irse

-Si, nos vemos- murmuró entrando al barco

-Porque su presencia me recuerda a Uriko?- pensó y siguió su camino a casa

Al día siguiente

Kenji se levantó e hizo la rutina diaria de la mañana, preparo un bento nuevamente, se puso el mismo estilo de ropa solo que azul con bufanda gris; se puso unos auriculares y comenzó a reproducir musica y fue a la escuela. Al llegar todo el salón guardó silencio y le lanzó una mirada hostil a excepcion de Nino, Alya y Juleka que ya estaban en el lugar también

-Hola Kenji- saludaron los dos

-Qué tal- dijo y subió a su lugar, Juleka iba a voltear a verlo pero su amiga tomó su mano y negó con la cabeza evitando así que volteara. Poco después Adrien llegó y casi a la hora Marinette, la profesora Bustier también entró al aula

Una Nueva VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora